Situaciones extremas requieren medidas extremas.

Los últimos acontecimientos en torno a la terrible represión en Oaxaca reclaman actos que tengan una validez que va más allá del mero activismo.

Dentro de estas actividades, está el tener más inteligencia que los pinches prianistas, mantener la cabeza fría y, sobre todo, aprender a discernir entre el pueblo real, puro y duro, de los provocadores.

Por qué digo esto?

El día de ayer, su servillleta, el pinche masiosare, en compañía de otros cábulas que ya nos sabemos los métodos en los cuales chamacos pagados por gobernación llegan a romper movimientos, vimos con tristeza que en la marcha, había unos hijos de la chingada que se comenzaron a echar pintura roja y a taparse la cara.

Inmediatamente, el colillas (compañero que junto con su servilleta fué consejero universitario en CU), comenzó a pedir que estos weyes se descubrieran el rostro y mostraran la cara, ya que de inmediato identificamos los métodos que generalmente usan los porros que tienen su cheque quincenalmente en la secretaría de gobernación.

Qué pasó? Pues simplemente que estas mismas personas son las que el día de hoy comenzaron a cerrar el eje central y buscaron enfrentamientos con la policía.

Compañeros, no hay que ser pendejos: estos pinches porros, de los cuales hay muchos con los anarquistas y los pendejos de los larouchistas, son puros pinches porros pagados por el gobierno.

Nuestras acciones deben ir encaminadas a ganar simpatías y demostrar que, efectivamente, la violencia proviene del gobierno federal.

Compas, cada que vean a estos pinches vándalos (y los van a ver muy seguido en las marchas), inmediatamente hagamos un círculo en torno a ellos y exigamosles que se larguen a chingar a su madre.

Por otro lado, y desde este momento, hay que ir a apoyar las marchas. Tenemos que ir un chingo de raza a las marchas, si no, nos van tratar de romper la madre. Recuerden que nos esperan seis años de una dura represión.

Dado que tenemos que encaminar las acciones de resistencia civil en actos más concretos, les propongo lo siguiente:

Vamos a los módulos de atención ciudadana de los diputados, a las oficinas de los senadores, a solicitar citas para exigirles a estos pinches diputados y senadores webones que paren ya esta masacre. Vamos a sacar a estos webones de sus oficinas para que también peleen al lado del pueblo al que dicen representar.





Un chingo de razones más para sumarse a la creación de una nueva República.