Hay algo en esta nota de Álvaro Delgado en el Proceso que muestra no sólo en lo que fecal ha convertido a los procesos electorales en el país, sino también a la manera en la que el propio PAN admite que se está convirtiendo en lo más nefasto de lo que fue el PRI.
Y es que con la orden de Maricarmen Alanís de revertir la anulación del dirigente juvenil del PAN--anulada por que hubo compra de votos y cochinadas varias--lo que fecal y Alanís le están diciendo a los panistas es que hagan transas y fraudes. Total, el TRIFE se los va a solapar. Vean:
Impone el TEPJF líder juvenil en el PAN
Álvaro delgado
México, D.F., 3 de octubre (apro).- Después de unas elecciones calificadas de fraudulentas, y, en un fallo igual de controvertido que el que emitió en el caso de la elección presidencial del pasado 2 de julio, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) revirtió hoy la anulación del proceso interno en el que Juan Carlos Martínez Terrazas fue electo secretario de Acción Juvenil del Partido Acción Nacional.
Por unanimidad, el TEPJF decidió darle la razón a la impugnación interpuesta por Martínez Terrazas --quien es apoyado por el grupo de Calderón--, después de que el CEN del PAN, que encabeza Manuel Espino, anuló la elección por “abrumadora mayoría” de sus integrantes, debido a “prácticas de adulteración de la voluntad popular”.
En el CEN del PAN se anticipaba desde hace semanas ese desenlace, después de que el recurso de impugnación recayó en la magistrada María del Carmen Alanís, presidenta del TEPJF y amiga íntima de Calderón y de su mujer, Margarita Zavala, quienes apoyaron a Martínez Terrazas, activista, a su vez, de la campaña presidencial.
Carlos Abascal, secretario general adjunto, sólo declaró hoy que la dirigencia acatará la decisión del Tribunal Electoral --que consideró que el CEN no tiene facultades para anular el proceso--, tal como lo había adelantado también el presidente de ese partido, Manuel Espino, en agosto pasado, cuando denunció prácticas “mañosas” en la elección juvenil y aun intervencionismo de funcionarios gubernamentales:
“Prefiero que sea la primera vez que se nombre a un dirigente en el Tribunal que hacerme tonto y hacer de ladito a los principios del partido. Por encima de cualquier procedimiento, yo antepongo la ética histórica y los principios del partido. Aquí no hubo subsidiaridad ni solidaridad. Lo que hubo fue una abierta intervención”, dijo Espino.
Ante los miembros del CEN, días antes de anular la elección interna juvenil, celebrado el 7 de julio, añadió: “No hubo respeto a la autonomía de los jóvenes en sus procesos internos. Hubo una suplantación de su autonomía desde diversas instancias y eso no lo podemos avalar. Si la mayoría del CEN lo acepta, yo fijo mi posición: No voy a avalar ese proceso.”
La nulidad de la elección juvenil se produjo el 21 de agosto, después de 45 días de análisis del CEN --el plazo máximo para revisar el proceso-- y de hacer comparecer a los tres aspirantes a presidentes de Acción Juvenil, en cuya elección celebrada en Tlaxcala, Martínez Terrazas, autollamado candidato de Calderón, se impuso con 58.97 por ciento de los votos por 41.13% de Héctor Javier Rivera López, allegado a Espino.
La víspera de la elección, la diputada federal Claudia Caballero --tercera aspirante-- declinó participar, después de ser sometida, aseguró, a presiones e intimidación de Jorge Manzanera Quintana, operador de Juan Camilo Mouriño, jefe de la Oficina de la Presidencia, lo que condujo, entre otros numerosos elementos, a declarar la nulidad del proceso.
“El CEN consideró que el proceso de selección del secretario nacional juvenil presentó irregularidades que lo alejan de la práctica democrática, principios y valores que defendemos, y (que) representan al Partido Acción Nacional”, estableció el resolutivo, dado a conocer por el portavoz Antonio Alvarado.
“Esta decisión --según el CEN--, respeta la práctica democrática, principios y valores del partido; y es un mensaje claro para los jóvenes de nuestro partido y la militancia en general de que nuestro procesos deben conducirse con apego a los principios y la normatividad interna.”
En el Comité Ejecutivo Nacional se produjo una votación “contundente” de 23 votos a favor de la nulidad por tres en contra, por lo cual “consideramos que esta votación anula cualquier lectura de que esta decisión obedezca a favorecer a alguno de los aspirantes o contra alguno de ellos”, reportó Alvarado.
Los únicos tres miembros del CEN que votaron en contra de la nulidad de la elección fueron César Nava, secretario particular de Calderón; el diputado federal Rogelio Carvajal, también allegado a la jefe del Ejecutivo federal; y Rafael Morgan, subsecretario de la Función Pública y excolaborador de Germán Martínez, quien renunció la semana pasada a ese cargo para aspirar a la presidencia nacional del PAN.
Al respecto, Juan Carlos Mondragón, quien concluyó su periodo al frente de la Secretaría de Acción Juvenil y testigo de lo acontecido en el proceso, advirtió, en entrevista con la agencia Apro, que anular la elección fue “una decisión contundente y de raíz” para evitar daños futuros en el PAN, particularmente entre los jóvenes.
“Si bien es una decisión dolorosa, es necesaria para corregir algo que no puede suceder en las filas juveniles del partido. De lo contrario, estaríamos pervirtiendo a los jóvenes y enseñándoles, a un parte, que así se gana y, a otro parte, que para la próxima utilicen mañas para ganar”, agregó.
Las prácticas fraudulentas en la elección del secretario de Acción Juvenil, cuyo primer presidente fue Calderón por encomienda de Luis H. Álvarez, hace dos décadas, se produjeron en un contexto --declaró Mondragón-- de ejercicio del PAN del poder público.
“Hace 20 años, cuando se funda Acción Juvenil, no había de ninguna manera el nivel de relación que existe con el poder público hoy. En ese sentido hay que reconocer que estas prácticas tienen que ver con esta vinculación con el poder público, con las tentaciones del poder, con el utilizar medios que no son legítimos dentro de las decisiones del partido.
“Ha habido otras ocasiones en que el partido no ha tomado las decisiones a tiempo ni ha detenido este tipo de vicios por miedo, por chantajes, por presiones y en esta ocasión es de raíz para ir corrigiendo algunas prácticas que no deben suceder dentro del PAN”,reflexionó.
--¿Cuáles fueron esas prácticas?
-- Hubo desde el secuestro de delegados para que no se registraran en la asamblea y emitieran su voto; la compra o el intercambio de votos por ingreso a plazas del gobierno; la “línea” de parte de funcionarios del gobierno, la intromisión de adultos en las decisiones de los jóvenes; también la participación abierta de secretarios estatales juveniles a favor de un candidato.
“Lamentablemente es como cuando el PRI nos hacía fraude: Nosotros decíamos que hubo fraude y el PRI, de manera cínica, decía: ‘Compruébenlo’. Son cosas muy difíciles de probar.”
En ese sentido, Mondragón admitió la posibilidad de que Juan Carlos Martínez Terrazas ganara el recurso que interpuso ante el TEPJF, el cual hoy falló en su favor.
--¿Sería un secretario juvenil legitimado por el Tribunal?
--Exactamente: Un dirigente nacional impuesto por un tribunal… Sabemos que el Tribunal, bueno, yo pienso que el Tribunal va a conceder a Juan Carlos, lo va a imponer como secretario nacional, porque lamentablemente muchas de estas cosas no son comprobables.
“¿Cómo se comprueba que hubo línea? ¿Cómo compruebas que hubo recursos que no debieron haber estado? Pero a final de cuentas lo bueno es que queda el mensaje que el CEN no dejó pasar esto. Ahora, en una de esas el Tribunal nos da la sorpresa, es tan inconsistente, y favorece la decisión del Comité Nacional”, expresó.
Pero no: Por unanimidad, el TEPJF designó a Martínez Terrazas, como en su momento a Calderón, y en un plazo de 48 horas ocupará el despacho que dejó Mondragón, en el contexto de la lucha por la presidencia del PAN.
Fecal ya había hecho fraude para quedarse (que no ganar) la candidatura del PAN a la presidencia de la república en 2005. Lo que estamos viendo no es otra cosa más que la continuación de las mismas prácticas fraudulentas de fecal y su grupo, sólo que esta vez dentro del PAN.
Ahora bien, si el PAN admite que el TRIFE impuso al secretario juvenil; que hubo fraude; que se está cayendo en lo mismo que hacía el PRI; y que estas prácticas de hacer fraude vienen directamente de fecal ¿Por qué se niegan admitir que hubo un fraude electoral en las elecciones presidenciales de 2006?
¡Santas hipocresías, Batman!
Pero hay más. Álvaro Delgado extiende el tema en esta otra nota, en donde hasta los chavos panistas se quejan de que los corren por no seguir la línea del "gobierno del empleo":
Las buenas costumbres del fraude
Álvaro delgado
En el contexto de un nuevo intento por reformar los estatutos del Partido Acción Nacional (PAN) para contrarrestar las crecientes prácticas de defraudación electoral en los procesos internos --un proyecto que los seguidores de Felipe Calderón reventaron en una acción previa a la Asamblea Nacional de junio pasado--, la decisión del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de anular la elección de la dirigencia juvenil reavivó las hostilidades intrapartidistas.
Lo que no ocurrió con prácticas de adulteración electoral en los procesos internos para gobernador en Guanajuato, en 2000, y en Yucatán, seis años después, así como en la contienda por la candidatura presidencial --en 2005-- y en numerosas elecciones de candidatos y dirigentes, se produjo en el proceso para la renovación de la dirigencia de Acción Juvenil, que se manchó por la influencia de funcionarios del gobierno de Calderón.
Manuel Espino, presidente del CEN, había adelantado su posición desde que se encargó a la Comisión Interna de Elecciones un informe sobre la elección de los jóvenes panistas: No avalaría un resultado producto de la manipulación y prefería, en todo caso, que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) impusiera al dirigente juvenil del PAN.
“Prefiero que sea la primera vez que se nombre a un dirigente en el Tribunal que hacerme tonto y hacer de ladito los principios del partido. Por encima de cualquier procedimiento, yo antepongo la ética histórica y los principios del partido. Aquí no hubo subsidiariedad ni solidaridad. Lo que hubo fue una abierta intervención.”
Ante los miembros del CEN, añadió: “No hubo respeto a la autonomía de los jóvenes en sus procesos internos. Hubo una suplantación de su autonomía desde diversas instancias y eso no lo podemos avalar. Si la mayoría del CEN lo acepta, yo fijo mi posición: No voy a avalar ese proceso.” Y así fue:
Después de 45 días de análisis --el plazo máximo para revisar el proceso-- y de que comparecieran los tres aspirantes, el CEN votó, la madrugada del martes 21, por anular la elección celebrada el 7 de julio en Tlaxcala, en la que Juan Carlos Martínez Terrazas, autoproclamado candidato de Calderón, se impuso con 58.97% de los votos por 41.13% de Héctor Javier Rivera López, allegado a Espino.
La víspera de la elección, la diputada federal Claudia Caballero --tercera aspirante-- declinó participar, después de ser sometida, aseguró, a presiones e intimidación de Jorge Manzanera Quintana, operador de Juan Camilo Mouriño, jefe de la Oficina de la Presidencia.
Juan Carlos Mondragón, quien concluyó su período al frente de la Secretaría de Acción Juvenil y testigo de lo acontecido en el proceso, advierte que anular la elección fue “una decisión contundente y de raíz” para evitar daños futuros en el PAN, particularmente entre los jóvenes.
“Si bien es una decisión dolorosa, es necesaria para corregir algo que no puede suceder en las filas juveniles del partido. De lo contrario, estaríamos pervirtiendo a los jóvenes y enseñándoles, a una parte, que así se gana y, a otra parte, que para la próxima utilicen mañas para ganar”, agrega.
Con dos décadas de historia, iniciada por Calderón como parte de una encomienda de Luis H. Álvarez, Acción Juvenil sufre por primera vez la anulación de un proceso interno, en un contexto --dice Mondragón-- de ejercicio del poder público por parte del PAN:
“Hace 20 años, cuando se funda Acción Juvenil, no había de ninguna manera el nivel de relación que existe con el poder público hoy. En ese sentido hay que reconocer que estas prácticas tienen que ver con esta vinculación con el poder público, con las tentaciones del poder, con el utilizar medios que no son legítimos dentro de las decisiones del partido.”
Reflexiona: “Ha habido otras ocasiones en que el partido no ha tomado las decisiones a tiempo ni ha detenido este tipo de vicios por miedo, por chantajes, por presiones, y en esta ocasión es de raíz para ir corrigiendo algunas prácticas que no deben suceder dentro del PAN.”
--¿Cuáles fueron esas prácticas? --se le pregunta.
--Hubo desde el secuestro de delegados para que no se registraran en la asamblea y emitieran su voto; la compra o el intercambio de votos por ingreso a plazas del gobierno; la línea de parte de funcionarios del gobierno, la intromisión de adultos en las decisiones de los jóvenes. También la participación abierta de secretarios estatales juveniles a favor de un candidato.
“Lamentablemente es como cuando el PRI nos hacía fraude: Nosotros decíamos que hubo fraude y el PRI, de manera cínica, decía: 'Compruébenlo'. Son cosas muy difíciles de probar.”
En ese sentido, Mondragón considera muy probable que el ganador de la contienda, Juan Carlos Martínez Terrazas, gane también el recurso que ya anunció que interpondrá ante el TEPJF, institución que, dice, “actúa como le da la gana”.
--¿Sería un secretario juvenil legitimado por el tribunal?
--Exactamente: Un dirigente nacional impuesto por un tribunal.
Las mañas
Acción Juvenil se creó hace 20 años y ha sido cantera del PAN. Ahí se foguearon Felipe Calderón, quien inició esa estructura; su secretario particular en la Presidencia de la República, César Nava; José Espina, secretario general del CEN; Rogelio Carbajal, Carlos Torres y Cristián Castaño, diputados federales; y el propio Mondragón, candidato a diputado local por Puebla.
Por eso la relevancia de la decisión: Desde la sesión del 9 de julio, dos días después de la elección en Tlaxcala, varios miembros del CEN propusieron profundizar en las quejas de Rivera y Caballero sobre prácticas fraudulentas y presiones, por lo que se encomendó a una comisión ahondar en las indagatorias.
“Si esto es tan importante como decimos que es, acordemos una sesión extraordinaria”, propuso Luis Ernesto Derbez, mientras que Rosario Castro Lozano, alcaldesa de Lerdo, Durango, propuso llamar a comparecer a los tres aspirantes de Acción Juvenil; y aun anular el proceso.
La Comisión Interna de Elecciones --integrada por Patricia Durán, secretaria de Promoción Política de la Mujer; Gerardo Priego, secretario de Vinculación con la Sociedad; Fernando Palma, coordinador de diputados locales; Marcos Pérez Esquer, tesorero nacional; y el diputado Rogelio Carbajal-- elaboró un dictamen, que sometió al CEN y que acreditó prácticas fraudulentas.
Durante las seis horas que se prolongó la sesión, se llamó a los tres aspirantes a responder las preguntas de los miembros del Comité Ejecutivo Nacional: Claudia Caballero declinó detallar las presiones que padeció de Manzanera y funcionarios gubernamentales como el propio Mouriño, pero se pronunció por la nulidad de la elección.
La diputada federal por Nuevo León detalló, en entrevista con el diario Reforma, que fue amenazada por allegados de Calderón, entre ellos Manzanera: “Él tuvo mucho que ver. La verdad ya estoy harta de este tipo, y si quieren que nuestro partido se convierta en un PRI, pues vamos por el mejor camino, lo juro.”
Las amenazas se materializaron desde el gobierno en varios casos, declaró: “A algunos chavos de mi equipo, de varios estados, los corrieron de sus trabajos por no seguir la ‘línea’. Qué lástima, porque dizque éramos el gobierno del empleo.”
Héctor Javier Rivera López, quien fue coordinador de Organización y Fortalecimiento Municipal del Ayuntamiento de Lerdo, encabezado por Rosario Castro, ratificó los señalamientos sobre la intervención de servidores públicos en la manipulación, que orquestaron una “guerra sucia” para favorecer a Martínez Terrazas, quien se hacía llamar el “candidato” de Calderón.
Entre las irregularidades que se presentaron en el proceso hubo compra de votos con cargos públicos para beneficiar a Martínez y, al contrario, se hostigó y despidió a jóvenes identificados con Caballero y Rivera en delegaciones federales en el Estado de México y Chiapas, así como en el ayuntamiento de Reynosa, Tamaulipas.
Rivera ratificó también lo que declaró al diario Reforma, en el sentido de que Martínez Terrazas fue apoyado por Abraham González Uyeda, subsecretario de Gobernación, y en cuyo rancho, en Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco, se produjo el lanzamiento de Calderón como aspirante a la candidatura presidencial del PAN.
El día de la elección, según la información que conocieron los integrantes del CEN, las delegaciones de Colima y Nayarit fueron hostigadas por la Policía Federal de Caminos para evitar que llegaran a la asamblea, mientras que la de Morelos fue “secuestrada” en un palenque, supuestamente al mando de Óscar y Víctor Martínez Terrazas, hermanos de Juan Carlos.
En cambio, a los que votaron por el ganador de la elección se les obsequiaron bebidas alcohólicas y paseos turísticos por Puebla. Incluso los llevaron al zoológico Africam Safari.
En su turno, Martínez Terrazas negó las imputaciones de haber sido favorecido por la estructura del gobierno federal y recibir apoyo de Manzanera, cuyas oficinas acogieron su casa de campaña y a cuyas órdenes estuvo en la campaña presidencial --junto con Jordi Herrera, subsecretario de Energía--, aunque reconoció que lo asesoraron abogados del operador calderonista.
Chihuahuense avecindado en Morelos, Martínez Terrazas es allegado, también, a Mariana Gómez del Campo, sobrina política de Calderón; y uno de sus abogados es Santiago Torreblanca Engell, secretario particular del diputado Jorge Romero, presidente de la Comisión de la Juventud de la Asamblea Legislativa capitalina y quien hace tres años contendió contra Mondragón.
En la sesión del CEN celebrada el lunes 20, que concluyó en los primeros minutos del martes 21, sólo tres integrantes votaron en contra de la decisión de anular el proceso de Acción Juvenil: César Nava, secretario particular de Calderón; Rogelio Carbajal, quien ostentó aquel mismo cargo en la campaña presidencial, y Rafael Morgan, subsecretario de la Función Pública, subordinado de Germán Martínez, aspirante a suceder a Espino.
Incluso, antes de la votación, Carbajal trató de persuadir a sus compañeros de no anular la elección. Primero se dirigió a Martínez. “Juan Carlos, a mí no me cabe duda de que vas a ser secretario general y pronto estarás sentado aquí con nosotros”, dijo, retador. Y enseguida se dirigió a los miembros del CEN: “Hay que atacar las causas, no esto que sucedió, sino las causas que lo originaron. Porque, ¿qué va a pasar con Acción Juvenil?”
Hebert Taylor, quien encabeza la supersecretaría de Innovación y Desarrollo en el gobierno de Emilio González Márquez, de Jalisco, le replicó: “Es al revés: Si no atacamos ahorita de tajo, imagínate qué va a pasar con Acción Juvenil.”
El CEN emitió, entonces, una “contundente” votación de 23 votos contra tres que “anula cualquier lectura de que esta decisión obedezca a favorecer a alguno de los aspirantes o contra alguno de ellos”, según la comunicación oficial, y que, subrayó, envía “un mensaje claro para los jóvenes de nuestro partido y la militancia en general de que nuestros procesos deben conducirse con apego a los principios y la normatividad interna”.
El comunicado oficial, que leyó el portavoz Antonio Alvarado, incluía la exhortación a los aspirantes a acatar la decisión “en aras de mantener la concordia y la unidad y por el bien superior del partido, que debe estar por encima de intereses particulares o de grupo”.
Sin embargo, Martínez Terrazas se negó y advirtió a los miembros del CEN, latente su impugnación ante el TEPJF: “La única decisión correcta es la de la asamblea.”
Como en el PRI
Lo que el CEN pretendía con esa exhortación era evitar que, en el juicio ante el TEPJF, se conozcan los detalles, al menos del financiamiento irregular, en que incurrieron los tres contendientes, pero también la identidad de los funcionarios panistas acusados de haber intervenido en el proceso.
La Comisión de Orden, sin embargo, eventualmente procederá contra personajes como Jorge Manzanera e incluso Juan Camilo Mouriño, quienes se han involucrado en procesos internos del partido y aun en elecciones constitucionales, como la de Yucatán, tal como lo hizo público Espino tras la derrota.
Propietario de la empresa Diseño y Operación de Campañas (DOCSA), Manzanera opera ahora en Michoacán, por encargo de Mouriño y Calderón, y asiste jurídicamente a Guillermo Galland, calificado de “presidente espurio” del PAN en Hidalgo e identificado como uno de los instigadores de la rechifla a Espino en la Asamblea Nacional del PAN en León, Guanajuato, el 2 de junio.
Justamente en la Asamblea Nacional, Espino pretendía reformar los estatutos para evitar la manipulación de los procesos internos del PAN, pero los operadores de Calderón reventaron la sesión del Consejo Nacional que la propondría, por lo que Espino acusó a la Presidencia de la República de conducirse con “doble moral” (Proceso 1595).
Ahora retomó el objetivo de reformar los estatutos mediante una comisión presidida por Carlos Abascal, que preparará foros y propondrá una Asamblea Nacional Extraordinaria, en enero próximo, justo cuando estará en marcha el proceso de sucesión en la presidencia del CEN de Acción Nacional. (Proceso 1608 / 26 de agosto de 2007)
La pregunta es obligatoria: Si los panistas saben que fecal está convirtiendo al PAN en otro PRI ¿Por qué lo siguen aguantando? ¿No sería hora de que lo mandaran de una buena vez a la chingada? ¿No estaría el PAN en mejores condiciones para contender en unas elecciones federales si limpiara su imagen haciendo a un lado al que ha estado haciendo fraude desde que compitió por la candidatura del PAN? (me refiero a fecal, dese luego.)
En fin. Pendejos que son los panistas. Aguantan todas esas cochinadas y tan sólo para que los despidan por cuestionarlas. Chale.
Una razón más para apoyar al peje en el 2007.