REFORMA.
Pierden familias en sus changarros.
Según analistas, los negocios familiares entran en crisis, principalmente en el primer año de operación, por la falta de conocimiento empresarial.
Juan Carlos Orozco.
Ciudad de México (14 octubre 2006).-
Casi el 15 por ciento de los hogares mexicanos que invierten en negocios, terminan poniendo de su bolsillo.De los 9.6 millones de hogares que participan en actividades industriales, comerciales, agropecuarias y de servicios, 1.4 millones registran pérdidas en su operación, según se desprende de cifras de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) 2005 elaborada por el INEGI.
Para los analistas, la falta de conocimientos empresariales y la mala planeación por la urgencia de conseguir ingresos ocasiona que los negocios de este tipo entren en crisis, especialmente en su primer año de operación.Moraima Carbajal, analista de Consultores Internacionales, señaló que es común que las familias emprendedoras carezcan de información suficiente en el mercado en que se desarrollan e inician con pérdidas.
"La corta visión empresarial es un obstáculo para el crecimiento de los negocios familiares. Se requiere actualizarlos tecnológicamente, acercarlos a las ventajas de la competencia, contar con asesoría especializada para la comercialización, distribución y marketing de sus productos."Pero es muy importante buscar fuentes de financiamiento alternas y crear alianzas que minimicen los riesgos ya que a medida que una empresa crece su visión y disponibilidad para buscar alianza es mayor" afirmó Carbajal.
Eduardo González Nolasco, especialista de Grupo Financiero Banamex, consideró que la proliferación de negocios familiares poco exitosos se deriva de la menor oferta de empleo en el mercado."Ante las pocas oportunidades de trabajo, la gente ha optado por establecer 'changarros', pero existe un alto porcentaje de estos negocios que quiebran en el primer año de operación, ante lo cual tienen que tratar de cubrir esas pérdidas", explicó.
La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) confirma que entre junio del 2005 y el mismo mes de este año se generaron más de 500 mil empleos en los micronegocios.La ENIGH señala que el año pasado la pérdida mensual de los negocios hogareños sumó 921 millones de pesos del 2006. La pérdida promedio por hogar involucrado creció 11.3 por ciento entre el 2004 y el 2005.Sin embargo, los negocios de los hogares con más altos ingresos duplicaron sus pérdidas entre un año y otro, al pasar de 2 mil 281 pesos mensuales por hogar a 4 mil 625 pesos en promedio.
La analista de Consultores Internacionales comentó que la rentabilidad de los micro negocios es más alta en el comercio y los servicios que en la manufactura."Los talleres familiares se han visto en desventaja, además hay un desconocimiento de los hogares por los diferentes programas de capacitación, apoyo crediticio, técnico y de comercialización que otorgan tanto la banca de desarrollo como las microfinancieras" afirmó la especialista.
(Con Información de Mónica Ramírez y Gustavo de la Rosa)
Nota relacionada también del Reforma.
Nacen changarros sin aliviar pobreza.
Analistas dijeron que el Programa Nacional de Financiamiento al Microempresario concentró los apoyos en 2 estados y 5 microfinancieras.
Karla Rodríguez.
Ciudad de México (19 septiembre 2006).-
El proyecto estrella de la administración foxista, la "changarrización", cerrará el sexenio con alrededor de 3 millones de microcréditos, el triple que el plan original, pero la mayoría no fueron entregados necesariamente a quien más lo necesitan, y cobran una tasa de interés superior al de la banca comercial, dijeron expertos.
El Programa Nacional de Financiamiento al Microempresario (Pronafim) falló en su objetivo primordial de aliviar la pobreza en los segmentos más desprotegidos de la población, y concentró los microcréditos en dos estados y cinco microfinancieras, agregaron académicos encargados de su evaluación.
Uno de ellos, Guillermo Farfán, miembro del Consejo Académico del Área de las Ciencias Sociales de la UNAM, consideró que la entrega de créditos ha sido inequitativa, pues los mejores apoyos se otorgaron en la zona sur del País, mientras en el norte la población más necesitada no recibió el mismo trato."Se les estaba prestando a microempresarios que no son muy pobres o que trataban de crear empresas de mayor nivel; el Pronafim no tiene un criterio muy definido para determinar quiénes califican como pobres", explicó Farfán.
De acuerdo con la evaluación del Pronafim hecha por Guillermo Farfán, Henio Millán, Cecilia Ortíz y Rigoberto Pérez, la cobertura del programa refleja un alto grado de concentración en el Estado de México y el DF, que tienen un perfil notoriamente urbano y en el 2005 absorbieron más de la mitad de los microcréditos.
Al respecto, María del Carmen Díaz Amador, coordinadora del Pronafim, argumentó que las necesidades de cada región son diferentes y que el otorgamiento de créditos siempre ha sido enfocado a los más necesitados."Los montos de créditos son diferentes, porque son diferentes el grado de pobreza y las necesidades de la población en los estados del sur que los del norte", dijo.
Guillermo Farfán criticó que los préstamos a las microfinancieras fueron otorgados a una tasa del 60 por ciento anual, mientras que la banca comercial tiene tasas de entre 30 y 40 por ciento."Como el Pronafim no atiende directamente a los pobres sino a través de las entidades financieras, éstas tratan de obtener un beneficio muy por encima de lo que le pagan al Pronafim", dijo Farfán.
Los evaluadores mostraron su preocupación porque cinco microfinancieras absorbieron poco más de la mitad de los créditos aprobados, mientras que en el 2004 esa porción se distribuía entre siete y en el 2003 entre nueve.
Además, Henio Millán, coordinador de evaluación académica del Pronafim refirió que si bien el programa destacó por la generación de empleos, pues por cada 100 microcréditos que se otorgaron se crearon 73 plazas, la calidad de esos puestos ha sido deficiente, y en 64 por ciento de los casos ni siquiera son remunerados.
Actualmente, el monto del préstamo va de los 100 pesos hasta los 30 mil pesos, pero en la mayoría de los casos el primer préstamo no excede los 500 pesos iniciales, que pueden incrementarse en el segundo y tercer créditos.
Y esta información es de la Jornada:
Sábado 14 de octubre de 2006
Para Muhammad Yunus, al hombre no se le debe dar pescado, sino enseñarlo a pescar
Otorgan el Premio Nobel de la Paz al banquero de los pobres
Su banco ha otorgado millones de dólares en microcréditos, pero no da limosna a los mendigos
AFP Y REUTERS
Nueva Delhi, 13 de octubre. Quizás haya hecho más que cualquier otra persona para ayudar a la gente a salir de la pobreza y, sin embargo, Muhammad Yunus, conocido como el banquero de los pobres, no se disculpa por no darle limosna a los mendigos.
El Premio Nobel de la Paz fue otorgado este viernes a Yunus, fundador de Grameen Bank (Banco Rural), que ha entregado más de 5 mil 700 millones de dólares en pequeños préstamos a bengalíes pobres, proveyendo de un salvavidas a millones y de un modelo bancario a más de 100 naciones que lo han imitado, desde Estados Unidos hasta Uganda.
La elección del comité Nobel, que desbarató todos los pronósticos, provocó una cascada de felicitaciones de todos los rincones del planeta, desde la sede de la ONU hasta las aldeas de Ruanda.
La filosofía de Yunus es ayudar a los pobres a ayudarse a sí mismos: ''si a un hombre se le da un pescado, se le está alimentando por un día, pero si se le enseña a pescar, se le alimenta de por vida''.
Es por eso que nunca responde cuando un mendigo ciego o discapacitado, o una madre meciendo a su bebé, extienden su mano para pedir dinero.
"Me siento mal, a veces horrible, porque estoy ignorando a la persona. Pero me contengo. Nunca les doy," dijo Yunus en una entrevista realizada en 2004 en las oficinas centrales de Grameen. "Prefiero intentar solucionar el problema en vez de simplemente darles una mano y hacerme cargo de ellos por un día.''
"Una paz duradera no puede lograrse sin que una parte importante de la población encuentre los medios para salir de la pobreza", declaró Ole Danbolt Mjoes, presidente del Comité Nobel noruego, al explicar las razones que permitieron dar el Nobel de la Paz 2006 a Yunus.
27 dólares, el primer préstamo.
El profesor Yunus intenta solucionar el problema desde 1976, cuando le prestó el equivalente a 27 dólares a 42 mujeres en un poblado cerca de su casa en la ciudad portuaria de Chittagong.
Las mujeres estaban endeudadas con prestamistas que cobraban intereses enormes y el objetivo inicial de Yunus fue simplemente persuadir al gerente del banco local a involucrarse y ofrecerles créditos regulares. Pero el banquero expresó que era imposible sin una garantía. Lo mismo hicieron otros.
Yunus se propuso probar que estaban equivocados y nunca miró atrás. Grameen -la palabra significa poblado- desembolsa ahora decenas de millones de dólares por mes a 6.6 millones de acreedores, de los cuales 96 por ciento son mujeres.
"Estoy muy feliz porque continué y se convirtió en una institución y realmente probó su valor," dijo Yunus. "Hemos hecho algo que generó una gran interrogante hacia todo el sistema bancario. La actividad bancaria nunca será la misma."
La hambruna cambió su vida.
Yunus nació en 1940 en Chittagong en una familia que tuvo 14 hijos, de los cuales cinco murieron al nacer. Su padre era orfebre.
Una hambruna devastadora que se extendió por Bangladesh en 1974, dejando cientos de miles de muertos, cambió su vida para siempre. Ese año, un viaje universitario le hizo cuestionarse cómo podrían alguna vez las modernas teorías económicas llevar justicia social a los pobres.
"Mientras la gente moría de hambre en las calles, yo enseñaba teorías económicas elegantes," dijo a Alan Jolis, co-autor del libro sobre su vida The good banker, en un artículo publicado en 1996 por el Independent Sunday británico.
"Me empecé a odiar a mí mismo, a la arrogancia de pretender tener las respuestas (...) Nosotros, los profesores universitarios, éramos todos tan inteligentes, pero no sabíamos absolutamente nada acerca de la pobreza que nos rodeaba (...) Decidí que los pobres mismos serían mis maestros," dijo.
Yunus está orgulloso de que el microfinanciamiento se haya extendido en todo el mundo. Si la gente pobre tiene el mismo acceso al crédito que los ricos, prosperarán, explica.
"Hay que dejárselo a la gente," dijo. "Se pueden cuidar a sí mismos. No hay que derramar lágrimas por ellos. Son muy capaces."
Grameen Bank recupera cerca de 99 por ciento de sus préstamos, inclusive cuando sus clientes no necesitan presentar garantías.
Los pagos comienzan a la segunda semana del préstamo, lo que libera a los prestatarios de la necesidad de pagar enormes sumas de dinero al final del año. Todas las transacciones son llevadas adelante en reuniones públicas semanales, en un país en que la corrupción es endémica. Grameen otorga préstamos sin intereses a los más pobres.
"¿Por qué deberían los servicios financieros ignorar a los pobres? ¿Por qué debería ser la tecnología de la información un privilegio exclusivo para la gente rica? ¿Por qué no podemos diseñar cosas para la gente pobre?," se pregunta Yunus.
Los clientes del Grameen Bank son dueños de 94 por ciento de las acciones del banco. El seis por ciento restante es propiedad del gobierno de Bangladesh. Yunus desafía a los críticos que dicen que su banco realiza préstamos muy pequeños y muy caros e insiste en que no está haciéndole la guerra a los ricos, sino sólo ayudando a los pobres.
"No me importa si los ricos se hacen más ricos. No me molesta. Deben hacerse más ricos. Me preocupa que los pobres se hagan más pobres y no más ricos," expuso. "No me importa si hay varios Bill Gates en el país. Lo más importante está en la base de la sociedad," concluyó.
Creó una red financiera representada en México por los salinistas José Córdoba y Pedro Aspe
ROBERTO GONZALEZ AMADOR
Inspirador del programa de microcréditos que creó el presidente Vicente Fox Quesada cuando fue gobernador de Guanajuato, entre 1995 y 1999, el bengalí Muhammad Yunus, galardonado este viernes con el Premio Nobel de la Paz, ha tenido por un buen tiempo un pie puesto en México.
Yunus publicó en 1997 un libro en el que se autonombró el banquero de los pobres, sobrenombre con el que es conocido en prácticamente todo el mundo. Preside actualmente una red financiera mundial de microcréditos, PlaNet Finance, que funciona como organización no gubernamental acogida a la legislación francesa.
Los hombres en México de esa red son: José Córdoba Montoya, el poderoso asesor del ex presidente Carlos Salinas de Gortari, y Pedro Aspe Armella, secretario de Hacienda también en ese gobierno y hoy dedicado a actividades empresariales y a promover la integración de México en una región de América del Norte, que cubre Canadá, Estados Unidos y México.
El microcrédito vive ahora un crecimiento explosivo en México. Orientado a atender financieramente a personas pobres que no tienen una garantía para obtener financiamiento bancario, es operado tanto desde el gobierno federal y algunos estatales, como por el sector privado. Una microfinanciera, Compartamos, logró este año una licencia para operar como banco y el sector se expande, no sin críticas al alto costo de los créditos, que para el caso de algunas prestamistas llegan a ser de 7 por ciento mensual.
Fox importó el modelo de Yunus.
Publicado por Yunus originalmente en 1997, Banker to the Poor: micro-lending and the battle against world poverty (Banquero de los pobres: micro crédito y la batalla contra la pobreza mundial) plasma la idea del hoy premio Nobel de que los pobres pueden ser sujetos de crédito y que préstamos por montos pequeños entregados a grupos reducidos de personas, especialmente mujeres, pueden sacar de la pobreza a familias de comunidades marginadas.
En octubre de 1995, meses después de que había tomado posesión como gobernador de Guanajuato y en medio de la peor crisis económica de México en 60 años, Vicente Fox acudió al primer Foro sobre el estado del Mundo, celebrado en San Francisco, California, con el auspicio del ex presidente soviético Mijail Gorbachov.
El entonces recién estrenado gobernador de Guanajuato, quien había resentido recientemente problemas para pagar algunas deudas y había hecho campaña con la oferta, entre otras, de crear un sistema estatal de financiamiento, conoció en ese foro a Yunus, fundador en 1983 del Grameen Bank (Banco del Pueblo) en Bangladesh.
Luis Miguel Rionda, especialista de la Universidad de Guanajuato, señala que Fox "quedó profundamente impresionado con la experiencia de Yunus, economista y profesor de la Chittagong University en Bangladesh, quien había revolucionado las estrategias tradicionales de financiamiento al desarrollo popular mediante créditos de unos pocos dólares por persona, sobre todo a mujeres emprendedoras".
Fox se entusiasmo con la experiencia y en 1997 convocó en Guanajuato, el estado que gobernaba, al segundo Foro sobre el estado del Mundo, acto que tuvo entre sus resultados concretos, según la página de Internet del foro, la creación de un banco similar al Grameen Bank, llamado Santa Fe de Guanajuato y un centro de desarrollo humano, también apoyado por el banco de Yunus.
El sistema aplicado en Guanajuato fue muy similar al de Bangladesh. Se prestó preferentemente a las mujeres, organizadas en "núcleos solidarios" de entre 15 y 20 personas. Además, se procuró que en un mismo núcleo solidario no participaran matrimonios.
PlaNet Finance da asistencia técnica en nuestro país.
De otra manera Yunus también tiene presencia en México. Es a través de PlaNet Finance, red mundial que funciona con estatuto de organización no gubernamental y que es dirigida por Jacques Attali, fundador del Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo, institución creada a principios de los años 90 del siglo pasado para atender a naciones de Europa del Este después de la caída del bloque comunista. También fue asesor del ex presidente de Francia Francois Mitterrand.
Muhammad Yunus es uno de los dos presidentes del consejo de honor de PlaNet Finance; el otro es Abdou Difour, ex presidente de Senegal.
PlaNet Finance tiene operaciones en México desde 1994, en el estado de Veracruz y en la capital del país. Ha recibido recursos del Banco Mundial y del estatal Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (Bansefi). Su presupuesto es de mil 500 millones de dólares, de acuerdo con el reporte anual 2004-2005 de la ONG francesa.
La asociada en México de PlaNet Finance, que dirige José Córdoba Montoya, tiene un directorio integrado por: Pedro Aspe Armella, ex secretario de Hacienda; el propio Jacques Attalli y Arnaud Ventura, cofundador de PlaNet Finance.
En México, según el informe de la ONG francesa, PlaNet Finance se dedica a ofrecer asistencia técnica a unas 30 organizaciones de ahorro y crédito para que puedan cumplir las condiciones legales para convertirse en organización de ahorro y crédito popular, que están reguladas por la autoridad financiera, así como para reforzar sus operaciones.
''Los changarros no son recomendables''.
Explica Luis Miguel Rionda, de la Universidad de Guanajuato, en un estudio sobre el traslado de la experiencia del Grameen Bank al estado que gobernó Vicente Fox:
"El programa de microcréditos Santa Fe exhibe bondades y oscuridades. La filosofía en la que se funda puede ser debatible, pero tiene una lógica interna que la hace coherente y sencilla de apreciar por parte del común de los ciudadanos. Es claro que uno de los prejuicios sociales más arraigados es la convicción de que el origen de los problemas que aquejan a nuestras familias y grupos sociales debe buscarse en las motivaciones individuales, en la capacidad o incapacidad de asumir de forma singular los retos del entorno. Desde esta visión simplista, el autodesarrollo personal es la vía lógica y privilegiada. Sin embargo, la literatura académica más seria destaca la importancia que tienen los factores comunitarios y la necesidad que tiene el individuo de garantizar los lazos de solidaridad grupal".
Considera que la estrategia de los microcréditos debe buscar reforzar los lazos comunitaristas, pero no a manera de chantaje que garantice el pago, sino por medio de aventuras de inversión conjuntas que unifiquen esfuerzos en torno a un objetivo económico común. El sujeto de crédito debe seguir siendo el grupo solidario, pero también debe ser el responsable de diseñar la actividad que convoque al conjunto. Se asume por parte de los responsables del programa que se está educando en el trabajo de equipo, pero más bien se propone un esquema de vigilancia grupal, pero no de colaboración en torno a propósitos, añade.
"También debería buscarse anudar este tipo de programas con actividades educativas y de capacitación permanentes que busquen calificar las actividades del núcleo, superando los escalones más bajos -y competidos- del escalafón laboral. Tampoco se debería fomentar las actividades informales, los changarros, que no garantizan estabilidad en el empleo, ni seguridad ante los riesgos laborales, ni se sustrae de la explotación del trabajo familiar e infantil. Un puesto callejero puede resolver una situación de emergencia macroeconómica, pero en el largo plazo representa un callejón sin salida sin perspectivas realistas de superación", establece.
Comento:
Según puedo entender de ésto, en México lo que ha perjudicado la posibilidad de que este sistema funcione son por lo que alcanzo a ver dos factores primordiales:
1.- La onerosa intermediación -coyotaje- que deviene en una taza de interés bastante alta.Ni Córdoba Montoya ni Aspe Armella son unas hermanas de la caridad, mas bien son coyotes de angora.
2.- Una competencia brutal ante una población desempleada, esto es, la falta de liquidéz hace desaparecer a la clientela. O lo que es lo mismo hay muchos negocios y no hay ventas.