Mario Di Costanzo*
Amo la traición, pero odio al traidor
Aunque estoy muy lejos de compartir el pensamiento del emperador y dictador de la república romana Julio César, esta frase atribuida a él y que titula este artículo refleja grandemente la situación política, económica y social del país.
En el contexto político nacional se están dando una serie de acusaciones que hicieran parecer que se trata de un juego de buenos y malos, donde lo que menos importa es el país y sus instituciones.
De esta manera, mientras que en la Cámara de Diputados se alista la comisión que supuestamente investigará a Vicente Fox sobre su inexplicable enriquecimiento, el ex presidente lanza acusaciones a Manlio Fabio Beltrones, quien es el presidente del Senado, aprovechando también la oportunidad para hacer nuevamente una defensa pública de los hijos de Marta Sahagún.
Pero también entre los “empresarios” se están dando estas acusaciones. Así, resulta patético observar a Francisco Gil Díaz, ex secretario de Hacienda y ahora director general de una empresa de telefonía, acusar a Telmex y a la Comisión Federal de Competencia del monopolio que se ha generado en el área de la telefonía, poniendo con ello sobre la mesa el tema de la competitividad empresarial y los monopolios.
Por su parte, el gobierno federal ahora se escandaliza por la situación que Pemex atraviesa, como si hasta ahora se percatara de la corrupción y el olvido presupuestario que ha hecho presa de este “patrimonio de todos los mexicanos”, queriendo con ello en el fondo mostrar o inducir que la privatización de esta paraestatal es el único camino a seguir para salvarla de una bancarrota.
Así, sólo faltaría escuchar a Elba Esther Gordillo defendiendo a la democracia o a Miguel Ángel Yunes disertando sobre derechos humanos.
Sin embargo, tal pareciera que los actores han olvidado de dónde vienen, ya que los ciudadanos ya no dudan sobre el enriquecimiento inexplicable de Vicente Fox, y muchos recordamos las conjeturas que se hicieron sobre aquella misteriosa reunión entre Mario Aburto y Manlio Fabio Beltrones poco después del asesinato de Luis Donaldo Colosio, en las playas de Tijuana o las publicaciones del diario estadunidense The New York Times del 23 de febrero y del primero de marzo de 1997, en las que se advertía de los posibles nexos de Manlio con el tráfico de drogas.
Qué acaso Gil Díaz no recuerda que también él solapo las prácticas monopólicas y oligopólicas en el sistema bancario, incluso las fomentó y protegió, o aquéllos que hoy acusan la situación de Pemex se han preocupado por conocer si se han solventado a la fecha todas las observaciones emitidas por la Auditoría Superior de la Federación a esta paraestatal, y si estas observaciones han permitido corregir la operación de la empresa.Leer más...
Chíngale el otro ojo....
Arnaldo Córdova
Un empresario ejemplar
El pasado 23 de octubre, Mauricio González Lara hizo una entrevista a Ricardo Salinas Pliego que luego puso en su blog (altaempresa.com). La referencia me la dio el artículo de Miguel Ángel Granados Chapa del pasado jueves primero de noviembre publicado en Reforma. Me pareció que valía la pena comentarlo aquí, aprovechando algunas de las muy agudas observaciones que hace mi amigo en su columna. No se puede decir que, por su manera de pensar, este empresario sea diferente a como son todos los empresarios; a todos les es común la misma rusticidad y la más desgarbada ordinariez. Para todos ellos, el asunto no es cumplir con la función social que la legislación civil les encomienda; el asunto se reduce a lo más tangible: cómo hacer dinero, lo demás no es su problema.
Erróneamente, Salinas Pliego afirma que la gente dice que “la televisión es un bien público”. No es posible saber a qué “gente” se refiere, pero González Lara le dice que eso fue lo que el Poder Legislativo les dijo (a los dueños de las televisoras), lo cual, por lo que tengo sabido, es falso. Lo que se les dijo fue que el espectro radioeléctrico es propiedad de la nación (el Estado sólo es el representante de la nación, pero tampoco es el propietario). Las televisoras son un bien privado y un negocio que prospera sobre la base de una concesión que el Estado, en nombre de la nación, les hace. Salinas Pliego se indigna sobre bases falsas, que lo hacen despotricar imprudentemente:Leer más...
Rolando Cordera Campos
Perdidos en el limbo
Hace un año, al calor de la crisis política que propició la imposición del resultado electoral, muchos propusieron hacer acuerdos políticos para sostener el crecimiento económico. Hoy, los acuerdos duermen el sueño de los justos pero los dueños del dinero despliegan una estrategia que de seguir como va, sin contrapesos ni compromisos con el resto de la sociedad, puede llevarnos a un desvarío tal que las confusiones de los años veinte sonarán a cuento de hadas.
Las conmemoraciones de las grandes revoluciones mexicanas deberían tener como uno de sus faros el recuento de los proyectos que inspiraron a los grupos dirigentes y produjeron lealtades y cohesiones en las capas subalternas de la sociedad, hasta convertirnos en un Estado nacional siempre acotado por las asimetrías del poder internacional y nuestras propias debilidades de origen. Éste sería un buen servicio para una comunidad que hoy aparece perdida en el espacio global, sin carta de navegación para los nuevos tiempos y latitudes que la convulsión mundial ha hecho emerger y ahora, merced a un revisionismo obtuso de la historia y las ideas, despojada en gran medida de los reflejos históricos y la memoria necesarios para dibujar cursos económicos y políticos congruentes con nuestra realidad sociológica desbaratada y, sobre todo, con la geografía humana, política y económica que el gran cambio planetario impone sin consultarnos.Leer más...
Naomi Klein *
Respuesta ante los desastres, para los elegidos
Antes, me preocupaba porque Estados Unidos estaba controlado por extremistas que sinceramente creían que se acercaba el Apocalipsis y que ellos y sus amigos serían aerotransportados a una celestial seguridad. Ya cambié de opinión. El país sí está bajo el control de extremistas empeñados en representar el clímax bíblico –la salvación de los elegidos y la quema de las masas–, pero sin una intervención divina. El cielo puede esperar. Gracias a los prósperos negocios de los privatizados servicios contra desastres, obtenemos el Éxtasis aquí en la Tierra.
Miren que lo pasa en el sur de California. Mientras los incendios devoraban franjas enteras de la región, algunas casas en el corazón del infierno permanecían intactas, como si las salvara un poder superior. Pero no era la mano de Dios; en varios casos fue obra de Firebreak Spray Systems. Firebreak es un servicio especial ofrecido a los clientes del gigante de seguros American Internacional Group, pero sólo si viven en los códigos postales con la población más rica del país. Los miembros del Grupo de Clientes Privados de la compañía pagan un promedio de 19 mil dólares para que rocíen sus hogares con una sustancia antinflamable. Durante los incendios, las “unidades móviles” –que van de un lugar a otro en camiones de bomberos rojos– en ocasiones llegaron a extinguir incendios para sus clientes.Leer más...
Antonio Gershenson
gershen@servidor.unam.mx
Tabasco: es mucho lo que hay que cambiar
Las inundaciones de Tabasco muestran que es mucho lo que hay que cambiar. Las actuales parecen ser las peores, pero ya las ha habido, las más recientes en 1999, y las más duras hasta ese momento. Ha habido suficientes advertencias, inundaciones anteriores, de que había que tomar medidas, y no se tomaron.
Pemex informa de aportaciones para prevenir inundaciones durante los gobiernos estatales de Madrazo y Andrade, y de que no hay evidencia de que los recursos se hayan empleado en ello. Podemos decir que lo que hoy sucede es más bien evidencia de que no lo hicieron. Pero eso no es todo.
Se informa en estas páginas que han estado rompiendo los diques del río Grijalva en el tramo que atraviesa el centro de Villahermosa, la capital estatal. Tenemos que ir hacia arriba de ese río para ver otras causas, muy importantes, del problema.
En otra información de La Jornada vemos lo sucedido arriba, en Chiapas, donde hay cuatro plantas hidroeléctricas con sus respectivas presas, a lo largo del Grijalva. Todas ellas se diseñaron exclusivamente para generar electricidad, y no se consideraron problemas como las inundaciones, que ya las había. La capacidad de las presas consideraba la generación de energía, pero nada más.Leer más...
Hugo Casanova Cardiel
Manual para designar al rector de la UNAM
El próximo 19 de noviembre empezará en la UNAM la gestión del rector que se desempeñará durante el periodo 2007-2011. De acuerdo con la normatividad universitaria, el órgano encargado de la designación es la Junta de Gobierno, y tal atribución representa uno de los ejes de la autonomía de la institución y, por tanto, el más alto encargo de dicho órgano. La Junta de Gobierno ha funcionado por más de 60 años, y aunque en estos momentos no parece lo más razonable proponer cambio alguno a las formas vigentes en la designación del rector, para nadie es un secreto la necesidad de que la UNAM formule un marco normativo e institucional más acorde con los nuevos tiempos.Leer más...
Bajo la Lupa
Alfredo Jalife-Rahme
Golfo Pérsico: la fractura tectónica geopolítica del siglo XXI
Debido a la dinámica bélica que imprimió al mundo el irredentismo anglosajón desde el 11/9, sería un grave error de juicio deslindar los incendios focales desde la costa oriental del mar Mediterráneo hasta las alturas del Himalaya en el subcontinente indio en plena ebullición: la parálisis presidencial en Líbano; la extraña destrucción de instalaciones enigmáticas sirias por la aviación israelí, en la que participó la fuerza aérea de EU (Al Jazeera, 2/11/07); la inminente invasión turca al norte de Irak para impedir la autonomía kurda estimulada tras bambalinas por Israel y el Senado de Estados Unidos (EU) con sus votaciones alocadas; el estado de emergencia en Pakistán en proceso de balcanización; los eventos bizarros en el Cáucaso (Georgia y Azerbayán); las declaraciones teledirigidas y suicidas contra Irán de parte de Salman bin Isa al-Khalifa, el ingenuo jeque y príncipe heredero de Bahrain, etcétera.
En medio de la fluidez del caos global geofinanciero, geopolítico y geoenergético, se trata de una tercera guerra mundial “en proceso” –materializada en Irak, Afganistán y Líbano– que el proyecto unilateral de despliegue misilístico balístico de Baby Bush en las fronteras de Rusia (Polonia y la República Checa) –que incrustó como pretexto pueril la disuasión en contra de los misiles “terroristas” de la teocracia chiíta iraní–, ha llevado al planeta al umbral de una nueva guerra fría, la cual el zar geoenergético global Vlady Putin catalogó asombrosamente en la reciente cumbre de Lisboa entre la Unión Europea y Rusia como la “nueva crisis de los misiles de 1962”, donde fustigó que las unilaterales sanciones financieras contra Irán decretadas por la dupla Paulson-Rice semejan a “un loco con un puñal en la mano” dispuesto a matar a quien se le aparezca enfrente.Leer más...
José Agustín Ortiz Pinchetti
jaorpin@yahoo.com.mx
¿Una canción de sonámbulos?
Mientras el gobierno y la clase política parecen empeñados –con éxito– en generar cortinas de humo para tapar los problemas nacionales, Andrés Manuel López Obrador continúa su terco propósito de visitar los 217 municipios de Puebla. Hoy, por ejemplo, remontará la sierra para visitar Coatepec, el único al que no había podido llegar por los deslaves que inutilizaron los pésimos caminos. Este día rematará la hazaña (tarea no cumplida por ninguno de los gobernadores). Ha logrado credencializar en su movimiento en Puebla a 40 mil personas, y a los mítines habrán acudido más de 100 mil. La prensa local, la televisión y los periódicos de la ciudad de México no difunden ni interpretan estos hechos. AMLO llegará a mil mítines en todo el país y a 170 mil adherentes este diciembre.
La semana pasada, AMLO interrumpió un discurso para encarar a un hombre que observaba el mitin. Le preguntó si era del Cisen (centro de investigación política dependiente de la Secretaría de Gobernación) y el espía, sorprendido, contestó que sí. Los viajes de AMLO parecen tener poco interés para los reporteros y analistas. No así para los espías de la inteligencia militar, la Policía Federal Preventiva y los propios agentes de los gobernadores. Esta intromisión viola los derechos de López Obrador y de sus seguidores, pero demuestra que el gobierno federal no confía en la desaparición del movimiento de AMLO y no sin alarma calcula la dimensión del fenómeno.
¿Y qué sucede en el resto del país? Las evidencias de fraudes, abusos, saqueos, imprevisiones criminales aparecen y desaparecen en los medios sin dejar huella. Por ejemplo: la inundación de Tabasco y de su capital afectó a un millón de personas y pudo ser evitada. Los tres últimos gobernadores de esa entidad, impuestos con fraudes electorales, han desviado recursos destinados justamente a prevenir y evitar inundaciones. Sólo Pemex transfirió donativos por mil 970 millones a Madrazo y Andrade. Granier recibió 274. No hay evidencia de su uso apropiado y sí de enriquecimiento inexplicable y despilfarro burocrático denunciados una semana antes por el senador Arturo Núñez.
Lo escalofriante es que este desastre y todos los demás no parecen provocar iracundia en la población. Algunos piensan que somos una nación de sonámbulos. Yo no lo creo. Nuestro pueblo es realista y sabe que la única institución que opera en México es la impunidad. Las organizaciones intermedias no funcionan para generar justicia. Los partidos están empeñados en discusiones absurdas. Algunas ONG son activas y despiertas, pero no tienen capacidad para influir en el poder. La Iglesia está dedicada a predicar sometimiento. Los medios a adormecer a la opinión pública en favor del gobierno y la oligarquía.
Uno se pregunta si el aumento cuantitativo de escándalos podría provocar un cambio cualitativo en la conciencia pública. No creo que esto se produzca en los próximos meses. Salvo que haya una ruptura económica mayor, la inercia va a imponerse. La liviandad de los críticos puede mantener la ilusión de que la decadencia no existe y que debemos olvidar las fechorías. Será el despertar político convertido en organización el que podrá sacudir las mentes e impulsar las voluntades en favor de un cambio.