CON LA MIERDA HASTA EL CUELLO.

El México que ‘ganó’.

Sergio Gómez Montero.

La cotidianidad nos depara, más de una vez, momentos llenos de tristeza y amargura. El pasado día 5 de este mes fue uno de ellos. El País, ese día, lamentó lo sucedido. No sólo, claro, porque el Estado declaró a su candidato como triunfador del proceso electoral que el Estado organizó y manipuló, sino porque finalmente ni ellos mismos pudieron ocultar el fraude que cubrió a todo el proceso desde sus inicios.Es decir, en el fallo del Tribunal Federal Electoral queda manifiesto con absoluta claridad que Felipe Calderón triunfa a pesar:
a) De la intervención directa del presidente Fox (“…que puso en riesgo la elección”).
b) Con la intervención abierta de los empresarios (quienes con sus acciones mediáticas indujeron el voto).
c) Con el clero político interviniendo en asuntos que no son de su competencia (con los obispos del
País declarándose abiertamente a favor del candidato del PAN).
d) Con la labor parcial y enajenante de los medios.
e) Con un trabajo lleno de deficiencias por parte del IFE y a pesar de que, en la revisión parcial de los resultados que realizó el Trife, se encontraron anomalías de naturaleza diversa, que de haberse proyectado al total de la votación (voto por voto, casilla por casilla) hubieran demostrado fehacientemente (como lo demostraron estudios diversos, que los magistrados del Trife no quisieron ver) que el triunfador real de la votación fue Andrés Manuel López Obrador.

Y a pesar de todo ello, que da fe así del fraude cometido, dicho Tribunal tuvo el descaro de declarar Presidente electo al michoacano.¿Por qué entonces el Trife, pues, como debió haber sido luego de tener constancia del fraude, falló a favor de Felipe Calderón?.

Existe, para ello, una sola respuesta: Porque el Tribunal, en su calidad de institución, forma parte del Estado y desde luego, dado que el Estado se propuso desde un inicio no perder las elecciones recién terminadas, el Trife avaló, aun reconociendo el fraude, que el candidato del Estado, Felipe Calderón, ganó las elecciones.

Y si ello fue así, ¿cómo entonces confiar en las instituciones del Estado? ¿No ha llegado la hora de, precisamente, construir un nuevo Estado, con nuevas instituciones que avalen los intereses de todos aquellos mexicanos que ganamos con AMLO realmente en el último proceso electoral?

Pero mientras sean peras o sean manzanas, vale la pena preguntarse quiénes “ganaron” según el Trife las elecciones. Allí, en ese museo del terror, aparece en un lugar destacado Vicente Fox, quien encabezó el fraude electoral de este año; están allí, sin duda, el 10% de empresarios que acumulan más del 50% de la riqueza del País (datos del Banco Mundial); ocupan un lugar destacado los magistrados del Trife, quienes ganan más de 400 mil pesos mensuales (y quienes van a recibir una buena pachocha ahora que se retiren); los miembros del PAN, quienes acríticamente siempre apoyaron el fraude; los jerarcas de la Iglesia Católica, quienes desde siglos atrás en México siempre han estado junto a la reacción, y están allí también, lamentablemente, millones de mexicanos carentes de conciencia social, quienes se dejaron manipular abiertamente por los medios colectivos de información y dieron su voto por Calderón.

Sus votos avalaron las tropelías de Martita y sus hijos; las transas inenarrables del Fobaproa; los negocios y fraudes de Ruffo en Punta Colonett; la Ley Televisa; el que millones de mexicanos se vean obligados a emigrar a Estados Unidos porque aquí no hay empleo y una larga serie de historias que sólo dan fe de la urgencia real que existe de construir un nuevo País, un nuevo Estado, una nueva República, que dé origen a nuevas instituciones.

Es decir, que el México que “ganó” el proceso electoral no es sino aquel que en “Audigier”, un poema francés antiguo compuesto hacia finales del siglo XII, describe a Cocuce:
“… un país blando/ donde la gente tiene la mie... hasta el cuello./ Se llega a nado por un arroyo de cloaca: / Nunca podréis salir por otro agujero”. Cocuce, pues, “ganó”, según el Trife, las elecciones del 2006 en México.

Correo: gomeboka@yahoo.com.mx Sergio Gómez Montero es analista político y miembro de OCE de BC.