PATRÓN LAVIADA Y EL NARCO.

Desesperación

viernes, 02 de febrero de 2007

Patricio Patrón Laviada por fin dio la cara a la prensa, pero sólo para intentar proteger a su hermano incómodo, Alejandro "La Vaca", en vísperas del arribo de Felipe Calderón Hinojosa a Yucatán/ En tanto, los yucatecos todavía no conocen físicamente a los cuatro detenidos en el ataque al agente de la SPV, que permanece secuestrado en el Hospital Juárez Por órdenes superiores, Rutilio Martín Che, el oficial de la SPV que recibió tres disparos en partes no vitales, permanece prácticamente secuestrado en el Hospital Juárez del IMSS, en tanto que los yucatecos todavía no conocen físicamente a los cuatro detenidos vinculados con este caso, cuya identificación y procedencia no están claras, a los cuales ahora la Procuraduría General del Estado también atribuye el ataque con granadas de fragmentación contra la Base Pescador de Progreso. Luego de que POR ESTO! denunció la farsa montada por Patricio Patrón Laviada y la cúpula de la SPV, para desviar la atención del verdadero meollo del asunto -el exitoso desembarco, entre Progreso y Telchac Puerto, de 6.5 toneladas de cocaína pura proveniente de Colombia, gracias a la protección que dispensan a los barones de la droga el Poder Ejecutivo del Estado y altos jefes de la V Región Naval--, ayer, por fin, el "Alto Vacío" salió a hablar con la prensa, pero sólo para intentar proteger a su hermano incómodo, Alejandro "La Vaca", y en vísperas del arribo de Felipe Calderón Hinojosa a Yucatán. Alejandro "La Vaca" Patrón Laviada, como hemos venido publicando, está directamente involucrado en el mencionado desembarco del alcaloide, así como en el trasiego de 5 mil litros de gasolina para tres "tiburoneras" tipo "Eduardoño", cada una de las cuales con capacidad para transportar hasta 2.3 toneladas de cocaína. Citando una "declaración ministerial" de los detenidos Sergio Diego Rebolledo García, Pedro Díaz Hernández, Edgar Alejandro Rodríguez Martínez y Pablo Arsenio Cruz Hernández, así como a "especialistas en seguridad", que jamás identificó, Patrón Laviada expresó una serie de afirmaciones poco convincentes, como, por ejemplo, que los cuatro fueron contratados por un personaje de Cancún al que sólo conocen como "El Perro" y con el único fin de que "desestabilicen al Estado y a la raza con el fin de calentar la plaza" (sic). Al parecer, el "Alto Vacío" ya desechó su hipótesis inicial, que formuló con igual convencimiento, de que el ataque a la Base Pescador de Progreso no era más que un aparatoso "circo electoral". No garantizó que mañana diga lo contrario de lo que hoy afirma. Comentó, empero, que no todos los detenidos coincidieron con este propósito, pues uno de ellos, no sabemos cuál, declaró que su intención era efectivamente "desestabilizar"; otros dos aseguraron, sin embargo, que el motivo era "económico" y uno más afirmó que vinieron a "calentar la plaza". --"¿Quién los contrató?" --preguntó un reportero. --"No lo sabemos, señalan que en Cancún los contrataron, que no conocen a las personas que los contrataron", respondió Patrón Laviada. --"¿No se sabe si es narcotráfico o político?" --"Nosotros no descartamos ninguna línea de investigación". --"¿Hay más personas involucradas en estos dos casos?". --"Señalan que son estas cuatro personas, alguien los contrató sin duda alguna para hacer este trabajo de desestabilizar al Estado". --"¿Les pagaron?" --"Sí, algunos hablan de cantidades que no están acá en la cuestión ministerial, pero sí en el interrogatorio original donde señalaron que va desde un precio de dos mil pesos hasta cinco mil pesos (aunque la versión estenográfica difundida por la oficina de prensa del gobierno del Estado indica que fueron 25 mil pesos), pero es lo que sabemos de informes extraoficiales". Patrón Laviada citó luego a "especialistas en seguridad", que se cuidó de no identificar, "que descartan que los casos tengan relación alguna con disputas de células del crimen organizado". Un reportero le preguntó si dos de estos cuatro sujetos podrían también ser los autores materiales del ataque al diario POR ESTO! el 1 de septiembre de 2006 y Patrón Laviada, sin hacer sus acostumbradas muecas de costumbre, dijo: --"No podríamos señalar, trae como común denominador el uso de granadas y de que una estalló y otra no estalló". (POR ESTO! sabe con certeza que estas granadas, que forman parte de un lote de 12 artefactos, fueron adquiridas a fines de agosto del 2006 por "mecánicos" de la Secretaría de "Protección" y Vialidad, por medio de intermediarios del bajo mundo de Iztapalapa, en el barrio duro de Tepito, en la Ciudad de México, donde también compraron diversas armas de grueso calibre. Estos instrumentos para asesinar fueron trasladados de la capital de la República a Mérida sin ningún problema, porque los "mecánicos" de Daniel "El Puma" Carrillo Espinosa se encontraban amparados con documentos y oficios firmados por Javier Medina Torre, titular de la SPV.) En la conferencia de prensa, Patrón Laviada estuvo solo, pues tanto el Procurador Armando Villarreal Guerra como el titular de la SPV, se retiraron de Palacio.