Autodeterminación de los pueblos
76 Años de Doctrina Estrada,
aporte de la diplomacia mexicana
* Fox la ignoró y sus relaciones internacionales fueron un erradero
POR MANUEL MAGAÑA CONTRERAS(Exclusivo para Voces del Periodista)
Don Genaro Estrada, mexicano ilustre nacido en 1912 en el puerto de Mazatlán, dio a conocer la posición de México en materia internacional, conocida como Doctrina Estrada, el 17 de septiembre de 1930. Esta norma que ha dado prestigio a la diplomacia mexicana, acaba de cumplir 76 años de vida, salvo el lapsus del foxiato en que se le ignoró y el trato con las demás naciones se convirtió en erradero, extraño del todo a la razón histórica de nuestro país, de no Intervención y autodeterminación de los pueblos.
Tal vez el mayor agravio que cometió Vicente Fox contra los principios de la Doctrina Estrada, de respeto a la soberanía de los pueblos, fue el día en que desde su rancho de San Cristobal se prestó para que el criminal de guerra, George Bush, iniciara desde allí la invasión de Irak, como indicando que México aprobaba esa actitud demencial y asesina, como si nosotros no hubiésemos sufrido la ocupación militar gringa en 1847, cuando se nos arrebató más de la mitad de nuestro territorio.
En esa agresión al pueblo de Irak, han muerto más de 650 mil habitantes de ese país ocupado injustamente, porque Hussein no tenía las armas de exterminio masivo de que le acusó falsamente el gobierno presidido por el texano sediento de sangre humana y de exterminio de un pueblo, cuyo petróleo está siendo extraído de suelo iraquí para llevárselo a los Estados Unidos. Eso ningún mexicano que ame a su Patria puede aprobar.
Una singular trayectoria.
Don Genero Estrada murió a temprana edad, puesto que nació el año 1887 en el citado puerto sinaloense y dejó de existir el año 1937, cinco años después de haber dado a nuestro país una norma pletórica de sabiduría y tacto político y diplomático en grado sumo, producto de la gran experiencia que adquirió en el campo de la diplomacia mundial.
Don Genaro Estrada hizo sus primeras armas en el periodismo de su estado natal. En 1912 se estableció en la Ciudad de México, en donde fue secretario de la Escuela Nacional Preparatoria. En cuanto funcionario de la Secretaría de Industria viajó a Milán, Italia, en 1920. Tres años después ingresó a la Secretaría de Relaciones Exteriores, donde ocupó cargos cada vez más importantes, en razón de su eficaz desempeño, hasta llegar a subsecretario Encargado del Despacho y titular de Relaciones Exteriores, del 5 de febrero de 1930 al 20 de enero de 1932.
Dentro de los cargos que ocupó en el ámbito de la diplomacia se encuentran el de embajador de España y Turquía, en 1931 y delegado de México ante la Sociedad de las Naciones. En el ámbito internacional se le reconoce como creador de la Doctrina Estrada.
Fue profesor en varias instituciones académicas, entre ellas, la Facultad de Filosofía y Letra de la Universidad Nacional Autónoma de México, fue miembro de la Academia de Lenguas y fundador de la Academia Mexicana de la Historia.
No obstante que murió a la temprana edad de 50 años, sus actividades culturales fueron prolíficas . Fue fundador y director de las Monografías Bibliográficas Mexicanas; del Archivo Histórico Diplomático Mexicano. Fue, además, historiador, poeta y bibliógrafo. Escribió varios libros y ensayos.
La Doctrina Estrada
El nombre de Doctrina Estrada se le da a los principios que formuló el 27 de septiembre de 1930, en nota dirigida a los representantes de México acreditados en el exterior, a propósito del reconocimiento a los gobiernos de facto en otros países.
Entonces, don Genaro Estrada estableció que: "México no se pronuncia en el sentido de otorgar reconocimientos porque considera que ésta es una práctica denigrante, que sobre herir la soberanía de otras naciones, coloca a éstas en el caso de que sus asuntos interiores puedan ser calificados, en cualquier sentido, por otros gobiernos, quienes de hecho sumen una actitud de crítica al decidir favorable o desfavorablemente sobre la legalidad de regímenes extranjeros.
"El Gobierno de México, por ello, se limita a mantener o retirar, como lo crea procedente, a sus agentes diplomáticos y a continuar aceptando cuando también lo considere procedente, a los similares agentes similares que las naciones respectivas tengan acreditados en México, sin calificar , ni precipitadamente, ni a posteriori, el derecho que tengan las naciones extranjeras para aceptar , mantener o sustituir a sus gobiernos o autoridades".
No Intervención y soluciones pacíficas.
En lo anterior están los principios de la no Intervención y autodeterminación de los pueblos y solución pacífica de los conflictos entre las nnaciones. De 1930 a la fecha, el mundo ha sido prolífico en conflictos, especialmente los derivados del imperialismo norteamericano y los de regímenes autoritarios entre ellos los de Alemania, Italia, España, Portugal y la Unión Soviética, desde luego.
Propiamente dicho, la Doctrina Estrada nació en la parte final del período denominado, "Entre-Guerras", o sea, la Primera Guerra Mundial, 1914-1918, y la Segunda Guerra Mundial, 1939-1945, lo que da idea de los conflictos internacionales que se produjeron al nacer la Doctrina Estrada, el 27 de septiembre de 1930, como hemos asentado.
Sobre todo al entonces presidente de la República, general Lázaro Cárdenas, esta sabia posición de México ante los conflictos de las naciones, le permitió salir adelante, con una posición razonada, ante la invasión de Polonia por la Alemana nazi, el primer día de septiembre de 1939.
La Doctrina Estrada permitió que México pudiera asumir con decoro, sus compromisos morales internacionales, con motivo de la invasión de Etiopía por parte del ejército fascista de ocupación de la Italia de Benito Mussolini. El presidente Cárdenas tuvo a su alcance la argumentación de la Doctrina, para condenar las acciones del ejército del Ducce.
Salimos bien librados en la II Guerra Mundial
Cabe de decir que durante la Segunda Guerra Mundial, el presidente Manuel Ávila Camacho sorteó con buen éxito todos los peligros que amenazaban a nuestra soberanía e independencia durante ese período en que fuimos agredidos por las potencias del Eje, con el hundimiento de buques-tanque de bandera mexicana.
Muchos mexicanos han considerado que esos ataques fueron de origen estadunidense. Pero sea en un sentido o en el otro la respuesta de nuestro gobierno a los agresores considerados alemanes, se les respondió con energía y vigor.
A lo largo de la Segunda Guerra Mundial y los años cuarenta, México se conservó enhiesto ante el imperialismo norteamericano, porque no enajenamos ni un centímetro de nuestro territorio nacional, a cambio de que procedió con hombría, patriotismo y razón, al esgrimir los postulados de la Doctrina Estrada. No fueron puestas bases militares gringas en territorio mexicano.
La no intervención y autodeterminación de los pueblos y la solución pacífica de los conflictos entre las naciones, fueron estandartes con los que salió adelante nuestro país durante el difícil período de la post-guerra y la llamada"guerra fría".
A partir de 1970, los regímenes enfilados en el neoliberalismo, la macro-economía y la globalización económica, que es decir el capitalismo salvaje, la Doctrina Estrada ha sufrido mengua, sobre todo a lo largo de la administración foxista.
Con el cambio de régimen – aunque no de partido - la ultraderecha, con la presencia de Felipe Calderón no permite prever mayores cambios en relación a la actitud asumida por Vicente Fox.
Es deseable, no obstante, que a sus 76 años de vida, durante los años por venir, la Doctrina Estrada, fiel intérprete de nuestra razón histórica, retorne por sus fueros.
/tr> |
miércoles, noviembre 22, 2006
UN POCO DE HISTORIA DE LAS RELACIONES DIPLOMÁTICAS DE MÉXICO.
Publicadas por Armando Garcia Medina a la/s 11:08 p.m.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario