VA OTRA TRANQUIZA AL FARSANTE TELLO, QUE YA LO ÚNICO QUE LE QUEDA ES DECIR QUE ESCRIBIÓ UNA NOVELA DE FICCIÓN:
Repaso, detalles y despedida
Ignacio Solares
Además de la controversia y los desmentidos de que se ha visto rodeado –o precisamente gracias a ellos–, el libro 2 de julio de Carlos Tello Díaz ha traído una sana y necesaria reflexión sobre la moralidad y los límites de lo periodístico, en especial tratándose de un tema tan delicado como es la dudosa legitimidad del actual gobierno.
En un artículo anterior señalé que se requería tener muy claros los géneros literarios y periodísticos cuando se trabaja en ellos con honestidad. Una cosa es escribir un reportaje y otra muy distinta hacer una novela, por más que ninguna ficción, por autosuficiente e impermeable que nos parezca, deje de tener vínculos poderosos e irremediables con la otra vida, aquella que no es la creada por la magia de la fantasía y la palabra literaria, sino la vida cruda y tangible, la no inventada, la vivida y que involucra a seres de carne y hueso. El cotejo entre ambas realidades –la ficción y la realidad real, por llamarla así– es por suerte prescindible en términos artísticos, pues para saber si una novela es buena o mala, excelente o mediocre, no hace falta saber si fue fiel o infiel al mundo verdadero, si lo reprodujo o lo mintió. Es su intrínseco poder de persuasión, no su valor documental, lo que determina su alcance y su calidad. En la novela histórica el acercamiento a esa realidad real es imprescindible, pero no determinante. La ventaja del novelista es que puede llenar con la imaginación los huecos que deja la historia, que siempre deja huecos. Según fórmula de Vargas Llosa, en ese género lo que importa es “lo simbólicamente verdadero y no tanto lo históricamente exacto”. Pero hay que subrayarlo: Si nos atenemos a lo simbólicamente verdadero, no estamos haciendo periodismo o historia, sino ficción. En la respuesta que escribe Carlos Tello Díaz (Proceso 1583) a mi artículo La cena inexistente, dice: “En todo caso, mi libro no es una novela. No tiene ficción”. Pone como prueba esa cena que, insiste, sí existió. En su libro dice: “La víspera del 2 de julio, el sábado, (Carlos Slim) había cenado en casa del rector –una cena muy íntima, en la que también estaba Carlos Fuentes, y en la que hubo un ambiente de celebración por el triunfo ya palpable de López Obrador”. Habría que subrayar lo de en casa del rector –una cena muy íntima, y el ambiente de celebración. En su respuesta a mi artículo, Tello se corrige: “Supe de la cena en forma indirecta, por lo que la quise confirmar con uno de los que estuvieron presentes, amigo mío desde hace años, quien me la confirmó, en efecto, aunque prefirió no decirme nada más y, desde luego, no aparecer en mi libro como fuente. La cena del 1 de julio tuvo lugar, supe después, no en la casa del rector sino en un salón adjunto al palco del rector en la sala Nezahualcóyotl, después de uno los conciertos de la Orquesta Sinfónica de Minería”. Me apasiona el periodismo –mi formación es en buena medida periodística–, me parece imprescindible rastrear “la verdad” que puede esconder un reportaje o una crónica, y por eso supuse que Tello iba a contestar lo que contestó. También por eso, en mi artículo anterior aclaré: “Por mera curiosidad periodística –ésa sí– les pregunté a los tres personajes involucrados si existió tal cena. Los tres –Slim, Fuentes, De la Fuente– me respondieron con un contundente: ‘no, nunca existió’”. La razón es muy sencilla: Yo también, con mi esposa, estuve en el palco del rector en ese concierto –además del propio Slim, Carlos Fuentes y su esposa, Gilberto Borja, Héctor Vasconcelos, Gerardo Estrada y su esposa, Carlos de la Mora y su esposa, y Sergio Vela. Ni fue cena ni tuvo nada de íntimo, y mucho menos de “ambiente de celebración por el triunfo ya palpable de López Obrador”. Si acaso, el ambiente era festivo porque se celebraba el Día del Ingeniero –Slim, Borja y De la Mora lo son–, había un buen número de ingenieros en la sala y el concierto era en su honor. Se tocó música de Beethoven, Mozart y Shostakovich. En el intermedio –durante el concierto era imposible, claro– se habló de las elecciones que se celebrarían al día siguiente, aunque la verdad casi nadie manifestó abiertamente por quién iba a votar. Alguien sí dijo en algún momento que lo haría por el PRD, otro más se negó a hablar del sentido de su voto porque, argumentó, éste era secreto, y hubo quien confesó abiertamente que votaría por el PAN. Por supuesto, nadie lo denostó por ello. Como sabe Tello, los intermedios duran cuando mucho 15 minutos, por lo que la plática debió ser muy breve. Escuchamos la Sinfonía número 5 de Shostakovich, esa sí bastante larga –casi una hora–; al final del concierto platicamos otro rato, nos despedimos, y mi esposa Myrna y yo llevamos a Carlos Fuentes y a Silvia a su casa, lo que debió haber sido alrededor de las 11 de la noche. Y este es el punto que me interesaba sobremanera aclarar, por lo cual les hice la pregunta a los tres personajes involucrados: ¿Sería que después del concierto, los muy canijos se fueron a cenar ellos solos, ahí sí “íntimamente”, a “celebrar” lo que se les viniera en gana, sin invitarnos a los demás, por lo menos a mi esposa y a mí? La pregunta me acuciaba sin remedio: ¿Nos habría sucedido, simplemente, que nos cortaron y se fueron ellos solos a comer unos tacos?, le dije a Myrna cuando leí el pasaje citado en el libro de Tello. ¿Era posible? Dejamos a Fuentes y a Silvia cerca de las 11 de la noche. En el camino, Carlos no mencionó nada de volver a salir de su casa, y más bien dijo que al día siguiente tenía que levantarse muy temprano. Silvia, por su parte –también coludida–, habría fingido cansancio y sueño. Una vez que los despedimos y comprobaran que Myrna y yo nos alejábamos lo suficiente –y a esas horas– habrían sacado su propio auto del garaje –para correr a reunirse, en algún lugar convenido previamente, con Slim y De la Fuente. ¿Será? Por supuesto que no, por supuesto que suena disparatado, pero no menos disparatado que el giro tramposo que le quiso dar al hecho Carlos Tello. Por eso le reitero que sí hay ficción en su libro y que si lo que quería era moverse en lo simbólicamente verdadero más que en lo históricamente exacto, debió de subtitular su libro como novela |
VA EL TEXTO DEL MONSI:
PARA ULTRADERECHIZAR NUESTRO OPTIMISMO
SECCIÓN “Y VOLVERÉ/ COMO BOTAS CON INERCIA SEXENAL./ VERÁS QUE PRONTO VOLVERÉ Y ME QUEDARÉ,/ POR LAS PENSIONES QUE EL GOBIERNO SIEMPRE DA, QUE A MÍ ME DA.”
1ESTE DEDITO SE QUEDA EN LA CUCHARITA. ESTA CUCHARITA VA PARA LA BOQUITA DEL MUSEITO...
“Este presidente no se escapa a ningún lado (sólo se fuga de la realidad, que nunca consigue alojamiento. La R.). Este presidente vuelve al rancho, a montar caballos en San Cristóbal, en el estado de Guanajuato (que queda en México, que queda en el mundo, y más ya no sé. La R.). No haré lo que otros expresidentes mexicanos han hecho: salir corriendo con una fortuna en sus bolsillos y esconderse de la gente”. (Pues qué valor civil de no esconderse, ¿o ni los ve ni los oye?)
Este presidente se llama Vicente Fox. Este presidente hizo esta declaración a don Alberto Armendáriz (Reforma, 7 de marzo de 2007). Este presidente se sabe Di por qué de Cri-Crí. 2 PUES PARA NO SENTIRSE PRIMERA DAMA, DEJÓ QUE LE DIERAN ESE TRATAMIENTO UN MILLÓN DE VECES. “Yo nunca me he sentido una primera dama (sólo fue pareja presidencial, la R. con su águila mocha), no entiendo lo que son las segundas damas. (Son las esposas de los hijos de las primeras damas, pero a ellos no se les acusó de nada. La R.) Yo creo en la igualdad que todas tenemos la misma dignidad, las mismas capacidades, y que podemos buscar las mismas oportunidades. (No todas tienen el mismo sueldo ni a todas les caen del cielo las oportunidades. La R., sentenciosa) Decidimos que yo no caminaría detrás de él, sino que lo haríamos a la par juntos. Y que no estaría obligada a hacer lo que no quería hacer; que podría hacer lo que quería hacer, que era trabajar con la gente pobre”. (¡Claro! Tan pobres como sus donantes de Vamos México.) Marta Sahagún de Fox. Nota de Alberto Armendáriz, Reforma, 7 de marzo de 2007. 3 Y, DADOS LOS EJEMPLOS A MANO, REQUIERE COMO MÁXIMO QUE NUNCA SE LE ELIJA (“ENTREGA PLENA”, ¡QUÉ PERVERSO SENTIDO DEL HUMOR!) “Creo que un hombre que dedica seis años de su vida y se entrega plenamente a servirle al país, requiere como mínimo una pensión.” Emilio Gamboa Patrón, símbolo moral y coordinador de los diputados del PRI, al defender las pensiones para expresidentes de la República. Nota de Andrea Merlos y Ricardo Gómez, El Universal, 7 de marzo de 2007. 4 AUNQUE QUIERA HABLARNOS DE TÚ Y SENTARSE A LA MISMA MESA QUE NOSOTROS, SEGUIREMOS RESPETANDO A LA OPOSICIÓN... YA LO DEL IDÓNEO CHAPARRITO DE LOS LENTES ES OTRO CANTAR “No, no, no. Hubo una toma de posesión, la otra es una faramalla, una fantasía, una obra de teatro mal escrita. (¿Hablará acaso de las conferencias de Vicente Fox?, la R. confundida entre tanto presidente) Estamos convencidos de que tenemos que hacer un esfuerzo permanente para convocar al diálogo a todos los actores políticos. Eso lo reconocemos, hay que hacerlo siempre. El partido que está en la responsabilidad del gobierno siempre tiene una obligación de la iniciativa, de la tolerancia, del respeto a la oposición, por muy altanera que ésta sea.” Manuel Espino, abanderado cultural y dirigente nacional del PAN, y presidente de la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA), al responder a cuestionamientos sobre la existencia de dos presidentes en México. Nota de Lilia Saúl, El Universal, 4 de marzo de 2007. SECCIÓN “SI NO FUERA POR LAS COMPARACIONES ZOOMÓRFICAS, LOS POLÍTICOS MEXICANOS NO TENDRÍAN NADA QUÉ DECIR” 5 “Y MIRE USTED, O MIRA TÚ, COMO TE SIENTAS MÁS A DISGUSTO, NINGÚN GOBIERNO SE PARECE A OTRO PORQUE SI DIOS LOS HUBIERA QUERIDO IGUALES, AUTORIZA LA REELECCIÓN”. “–Dicen que es el delfín del gobernador Patrón Laviada; de ganar, ¿el gobierno será muy similar al de él? –Yo no soy delfín ni gallo ni gallina de nadie (mucho menos cochinita pibil, la R. enterada de la gastronomía peninsular); hay amistad, hay respeto, creo que el gobierno de Patricio ha sido uno de los mejores, por encima del de los priistas, pero si gobierno, lo haré considerando mis estrategias y prioridades a favor de Yucatán”. (Y allí, concluye de seguro, nada tendré que ver con alguien a quien no le debo ni un kikirikí.) Xavier Abreu, candidato del PAN a gobernador de Yucatán. Entrevista con Yazmín Rodríguez Galaz, El Universal, 6 de marzo de 2007. 6 ESO YA NI SIQUIERA ES LA OPERACIÓN ALZHEIMER. ES LA TRAICIÓN IMPERDONABLE A LA FALTA DE PRINCIPIOS. “¡No somos profesionales en manejar asambleas, compañeros; somos priistas! ¡Somos un partido de leyes, no de tribus!” Carlos Aceves del Olmo, obrero y dirigente de la CTM, al auxiliar la presidencia de la mesa de la Asamblea Nacional Extraordinaria del PRI. Nota de Ciro Pérez y Fabiola Martínez, La Jornada, 4 de marzo de 2007. 7 HAN NACIDO EN LOS CHEQUES DOS PARTIDAZOS, DOS PARTIDAZOS QUE PARECEN GEMELOS... “Es urgente reconstruir los puentes que absurdamente fueron dinamitados… (Si los partidos no son distintos, sino iguales a medias, suspira la R.) Impulsaremos nuestra agenda… no seremos una oposición dócil ni obsequiosa. (Lo malo de disponer de un vocabulario muy escaso es que dicen lo mismo en cualquier circunstancia. La R.) Somos opositores, no adversarios, queremos construir, no destruir. No aceptaremos amenazas ni descalificaciones (¡dále pa’lante, papá!, diría el clásico, la R), pero tampoco que se nos culpe infundadamente por falta de acuerdos”. (No sabemos lo que quiso decir, pero a quién le preguntamos si sólo está él.) Emilio Gamboa Patrón, coordinador de los diputados del PRI, durante la reunión de la cúpula de su partido con Calderón Hinojosa. Nota de Sergio Javier Jiménez, El Universal, 8 de marzo de 2007. SECCIÓN “NO TIRE SU ALMA. MÁNDELA POR DHL” 8 LE SUPLICAMOS POR PIEDAD, QUE NO PUBLIQUE AHORA EL EXPEDIENTE DE PEDRO EL PESCADOR. “Es una calumnia. Dios dará a cada quien lo que le corresponde. Y sepan que no podrán contra la Iglesia. Ésta no se va a derrumbar, porque Cristo la sostiene, a pesar de que entre sus mismos apóstoles, Pedro incluido, hubo varias fallas.” Felipe Arizmendi, obispo de San Cristóbal de las Casas, al apoyar al cardenal Norberto Rivera, acusado en una corte de Los Ángeles de encubrir a sacerdotes pederastas. Nota de Juan Balboa, La Jornada, 4 de marzo de 2007. SECCIÓN “TESIS: TODOS LOS HOMBRES SON MORTALES./ ANTÍTESIS: SÓCRATES ES HOMBRE. SÍNTESIS: YA ME HABÍAN DICHO DE QUÉ PIE COJEABA EL FILÓSOFO” 9 “PANTALEÓN Y LAS VISITADORAS” ES UNA NOVELA DE VARGAS LLOSA. EL RESTO DE LA INFORMACIÓN CORRE A CUENTA DEL BUEN HUMOR MACHISTA DE MARZO DE 1953 (POR AHÍ). “No sé si existen todavía los ‘pantaleones’, pero sí existen todavía ‘las visitadoras’. Seguirán existiendo y estarán próximas ‘las visitadoras’ a los cuarteles y, como la Constitución me obliga a no discriminar, a lo mejor también hablo de ‘visitadores’”. (El chiste es malo, pero la gana de exhibir el prejuicio es majestuosa.) Ministro de la Suprema Corte de Justicia Salvador Aguirre Anguiano, al exponer su oposición contra el amparo concedido a militares seropositivos suspendidos del Ejército. Nota de Enfoque de Reforma, 4 de marzo de 2007. 10 DE ACUERDO, DOCTOR, A LA CIENCIA LE DAMOS CABIDA NOMÁS QUE CORRAMOS A TODOS LOS ENEMIGOS DE LA MORAL Y LAS BUENAS COSTUMBRES. “Por ahí se me atribuyó que yo soy enemigo de la ciencia. No, yo firmaría plenamente todo lo que se ha dicho aquí a favor de la ciencia; la verdad tiene diferentes accesos. Desde luego, no comparto la que dice ‘todo se puede saber a través de la ciencia’. Yo siempre he sido de la idea de que el juez no debe ser autómata, pero ahí es donde tenemos que ver dónde damos cabida a la ciencia.” Ministro Mariano Azuela, expresidente de la Suprema Corte. Nota de Enfoque de Reforma, 4 de marzo de 2007. 11 ¿Y QUÉ DECIR DE QUIÉNES CARGAN CON PREJUICIOS HISTÓRICOS PROPIOS DE LA EDAD MEDIA? A ESOS SE LES PODRÍA NOMBRAR GRANDES JURISCONSULTOS. “¿Qué pasaría con el resto de los padecimientos contemplados en las distintas categorías como una causa de inutilidad? Que tenemos una lista gigantesca, aquí. En algunos casos, no sé ni siquiera qué significan las palabras. ¿No merecerían todos aquellos individuos de toda esta lista un trato semejante para remediar la posible causa de inutilidad? ¿Por qué tratar distinto a quien es portador de VIH, de quien padece obesidad de 40 o más de índice de masa corporal?” Ministro Genaro Góngora Pimentel, expresidente de la Suprema Corte de Justicia. Nota de Enfoque de Reforma, 4 de marzo de 2007. 12 ¡QUÉ INFORMACIÓN TAN NECESARIA Y OPORTUNA! ASÍ QUE NADA MÁS... Y QUÉ IDEA TAN BARROCA Y METAFÍSICA DEL “CONTEXTO”. “–¿Qué opina de las declaraciones de Vicente Fox, que se refirió a sí mismo como el presidente que no se va? –Mire, en México hay un sólo presidente y es Felipe Calderón, ¡nada más!... (Lo de Fox) es una declaración de él, nada más, lo que sucede es que en el contexto en el que dice las cosas (¡qué maravilla! Así que no hay un contexto de las palabras, sino, aún mejor, las cosas se dicen dentro de un contexto. Con razón se acabaron los textos. La R.) seguramente quisieran verlo recluido en un convento o que ya no hiciera nada, que no hablara”. (No haga declaraciones tan profundamente anticlericales, señor, y sigamos con que en el contexto alguien quisiera... ¿Está seguro de que usted no le dicta a Fox sus discursos por vía telepática?) Jorge Zermeño Infante, titular de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados. Nota de Roberto Garduño y Enrique Méndez, La Jornada, 8 de marzo de 2007. 13 LO QUE SIGUE NO ES GRACIOSO NI TIENE CHISTE ALGUNO NI CORRESPONDE AL HUMOR INVOLUNTARIO. LO QUE PASA ES QUE NOS INDIGNA TANTO QUE QUEREMOS AMARGARLE A LOS LECTORES SU AMENA LECTURA. “Francisco Gil Díaz ordenó la concesión de 26 tramos carreteros que formaban parte de Caminos y Puentes Federales (Capufe), engrosando el costo del Fideicomiso de Apoyo para el Rescate de Autopistas Concesionadas (FARAC). El exsecretario de Hacienda también operó con objeto de que la Secretaría de Comunicaciones y Transporte adjudicara al banco inglés HSBC una concesión por 20 años para construir, operar, explotar, conservar y mantener tramos de las siguientes autopistas: Tihuatlán-Tuxpan, México-Pachuca, Asunción-Tejocotal, Tulancingo-Nuevo Necaxa, en los estados de Hidalgo, Veracruz y Distrito Federal. “Con el rescate carretero en 1997, la deuda del FARAC ascendía a 58 mil 123 millones de pesos.” Denuncia del diputado del PRD Javier González Garza. Nota de Roberto Garduño y Enrique Méndez, La Jornada, 8 de marzo de 2007. Lectura del horóscopo de los Cien Días: CM. Selección de textos: JV. La R: la Redacción. |
Cien días que parecen diez años
Miguel Ángel Granados Chapa
Al cumplir 75 días en el gobierno, el 15 de febrero, Felipe Calderón dijo que le parecían siete años. En proporción a ese cálculo, ayer que festejó su centenario, tal vez calcule que han pasado 10 años. Y es que ha procurado, en ajetreados y fatigosos ires y venires, honrar su compromiso de iniciar 100 acciones prioritarias en el lapso convencional que marca el comienzo de un gobierno. No lo ha conseguido por más que el despliegue propagandístico busque asegurar lo contrario.
El 20 de junio pasado, 12 días antes de la jornada electoral, Calderón presentó el centenar de medidas con que inauguraría su gobierno entre el 1 de diciembre y el 10 de marzo. Aunque dijo haber tenido cuidado de “no caer en la salida fácil de proponer acciones que no se puedan cumplir”, su documento incurrió en ese defecto y en otro aún mayor, que consiste en aprovechar las inercias y expresarse con los verbos continuar, consolidar, fortalecer, avanzar. Un error estructural, mayor, más abultado que esas deficiencias, caracteriza a ese plan del incipiente gobierno: no se transformó el catálogo de buenos propósitos que es a lo largo de algunos de sus tramos, en un instrumento real de gobierno, porque no se dotó a las medidas enunciadas de la provisión presupuestal requerida. Por lo demás, el que se haya mantenido el haz de propuestas de junio en diciembre, sin caracterizar adecuadamente las condiciones de su arribo a la Presidencia, surgidas con posterioridad al documento, explica el carácter más virtual que real de este período. Aun si lo hubiera conseguido a derechas, Calderón encabezaría un gobierno débil porque responde al voto de una parcialidad muy menor de la sociedad en general y a un tercio del electorado. Pero su triunfo, que no fue contundente, tampoco fue inobjetable, sino todo lo contrario. Una franja de la sociedad participativa no reconoce que cuente con la legitimidad necesaria para gobernar. Su partido, si bien integra las bancadas más numerosas en las dos cámaras, no le sirve de sostén en el ámbito legislativo porque se reflejan allí las disensiones internas. Por eso depende de sus acuerdos con el PRI, que tendrá en sus manos en todo momento la suerte de este gobierno. Todas esas circunstancias hubieran promovido, en un político sensible, un notorio ajuste a las propuestas preelectorales. Pero Calderón no lo hizo, y obra como si en abstracto y en el vacío se tratara simplemente de cumplir las promesas de una campaña exitosa premiada en las urnas con votación abundante. Ni en esa perspectiva ha mostrado capacidad de gobierno, porque no hizo lo que ofreció aun en terrenos donde no había obstáculos, ni corrigió allí donde la evidencia lo exigía. Fue incumplible, por ejemplo, y lo será por largo tiempo, la acción número 44, que consiste en el comienzo de las corridas del tren suburbano de la zona metropolitana de la Ciudad de México, en su primer tramo, de Buenavista a Cuautitlán. Calderón contaba con que el gobierno de Fox lo tendría listo para que los vagones corrieran sobre los rieles en estos días iniciales. Pero la obra ni siquiera ha sido comenzada (y no es prioridad en este año) y por lo tanto es imposible utilizarla. Pero nadie tuvo el cuidado de corregir el documento, que por eso emite a ratos fetidez de engaño y hasta de demagogia. También hiede a autoritarismo. Su punto 3 se refiere al mando único de la policía y anuncia que “se impulsará la aprobación de una iniciativa de ley para dar unidad de mando a las policías federales a fin de fusionar la Policía Federal Preventiva, la Agencia Federal de Investigación, la policía del Instituto Nacional de Migración y la Central de Inspección Fiscal y Aduanera”. Hasta el meridiano del nonagésimo noveno día esa acción no se había realizado. Ese incumplimiento deriva de que, al margen de la ley y en contra de las regulaciones aplicables a cada una de ellas, Calderón nombró ya un solo jefe para la PFP y la AFI. Y eso es, en su perspectiva, lo importante: decisiones ejecutivas aunque no estén avaladas legalmente y aun sean contrarias a la norma. También ha fallado en convocar, como lo enuncia el punto 9, “a las autoridades del Estado de México y las del Distrito Federal para diseñar la Policía Metropolitana del Valle de México”. Conforme a la vieja tradición, de cuño priista, de que lo hecho en México está bien dicho, apenas en el nonagésimo octavo día de su mandato Calderón se refirió al punto 8 de su plan, que a la letra dice: “Cadena perpetua para secuestradores. Se impulsará ante el Congreso de la Unión el establecimiento de cadena perpetua a los secuestradores de menores de edad y a los secuestradores que mutilen a sus víctimas”. Con oportunismo, puesto que el 8 de marzo es el Día Internacional de la Mujer, en esa fecha añadió entre las víctimas de este delito agravado a las mujeres. Y se limitó a anunciar el envío de la iniciativa. No la ha impulsado, como dice el texto. Y quizá no lo haga, porque acaso no encuentre terreno fértil en las cámaras, ya que, si bien nadie quiere incurrir en el costo de decir no a una medida que literalmente mereció aplauso a Calderón en el momento de ser anunciada, tampoco habrá disposición a simplemente incrementar las penas a delitos abominables a sabiendas de que esa política penal es ineficaz, porque no hay relación entre incidencia delictuosa y penalidad. Si el gobierno no fue capaz de poner en práctica acciones enunciadas con tanta anticipación, menos aún tuvo agilidad para enfrentar fenómenos surgidos súbitamente. Tal es el caso de la carestía, originada por el incremento de precios de la tortilla. La primera reacción presidencial fue reflejo de la de Ernesto Sojo, secretario de Economía, que simplemente alzó los hombros como si el hecho no le incumbiera. Cuando la reacción social forzó a una toma de posición gubernamental para encarar el alza del principal alimento popular, las medidas ideadas para enfrentar el problema fueron mezcla de simulación y demagogia. Se escenificó la firma de un pacto contra la carestía suscrito por los causantes de la misma, que obtuvieron ventaja en ello, pues con la intención de estabilizar el precio se consagró el aumento ya practicado. Y se desplegó persecución penal contra acaparadores que resultaron en realidad almacenistas que practicaban su negocio de conservar mercancía que ya había sido adquirida. Cada uno de los 100 días transcurridos fue ocupado por Calderón para aparentar un activismo gubernamental destinado a generar una imagen de eficacia. Como estrategia mediática ha rendido sus frutos, que consisten en percepciones sociales adecuadas a los fines de una administración débil. El despliegue de las Fuerzas Armadas en el combate a la inseguridad, que es mucho menos productivo de lo que se admite (pues de las personas detenidas en las operaciones sólo un mínimo porcentaje es acusado formalmente y una proporción mucho menor será sentenciada), genera sin embargo en ciertos sectores sociales la sensación de que se avanza. No en vano la encuesta levantada por Reforma para evaluar el trabajo de los miembros del gabinete pone a los ministros castrenses en los lugares primero y tercero: el secretario de la Defensa Nacional con 59 puntos y el de Marina con 50 |
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