ALGO DEL DEFORMA Y EL PLAN "MIEDO" DE LOS PANUCHOS

CON GRAN ALGARABIA Y PLACER AVISAN QUE SEGUIRAN LOS ATENTADOS, SABEN QUE LA SOCIEDAD EN LOS ESTADOS "TRANQUILOS" ES LA MEJOR ALIADA PARA PEDIR LA "MANO DURA".

Estos mentecatos cada vez se parecen mas a Bushito y sus fantasiosas "alertas naranja" que cerraban puentes internacionales cada tercer dia por "amenazas" hasta que la gente se harto de hacerle el juego a ese payaso criminal y genocida, y hoy en las fronteras una "alerta naranja" solo son mentadas al BORRACHÍN GRINGO.

Prevé Sedena más atentados del narco
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El General Guillermo Galván dijo que la campaña impulsada por el Presidente no se ganará en un día

Benito Jiménez

Ciudad de México (20 febrero 2007).- El Secretario de la Defensa Nacional, General Guillermo Galván Galván, anticipó este martes más atentados provenientes del narcotráfico.

Tras ser cuestionado sobre el atentado que ayer sufrió el diputado federal Horacio Garza en Tamaulipas, el militar consideró que actos como este volverán a suceder.

"Yo creo que este tipo de eventos vamos a tener con mucha frecuencia, esta campaña que impulsó el señor Presidente no se va a ganar en un día, va a durar varios años, pero estamos en ese propósito de enseñar todos los recursos, superar con éxito esta batalla", aseguró.

Entrevistado después de inaugurar la exposición "Un Ejército para la Paz", en el Senado, Galván Galván negó que el narcotráfico esté superando al Estado.

"De ninguna manera el narco va a ganar, tenemos un frente puesto en todas las entidades seguramente estamos con la balanza a favor", destacó.

Para el General de División, el narcotráfico se ha visto afectado en sus fuentes económicas gracias a los operativos del Ejército mexicano.

"No veo que estemos en desventaja de ninguna forma, creo que todos los Poderes, incluyendo al Legislativo, estamos en la idea de hacer cosas muy positivas y terminar este año con esa diferencia", subrayó.

NOTA:El plan "mete miedo" a la sociedad va viento en popa, solo que olvidan que 10 años de operativos en las fronteras mas violentas del país nunca han detenido a los grupúsculos facciosos; ya que mientras los retenes encueraban ciudadanos decentes, los jefes policiacos cenan con los mafiosos a gusto en los lugares de moda, pocos creen ya que esto no es mas que una cortina de humo para LEGITIMAR AL PELELE, ayudados por el ejercito, que a cambio de simples migajas (ya ganaban miserables sueldos) se pretende legitimen al MONIGOTE de la oligarquía nacional y extranjera. No lo olviden, el costo en las calles de las drogas es la única forma de saber la "afectación" a el trafico.

SIN EMBARGO TEMEN DAR "muchas molestias" EN "ESTADOS PANUCHOS" y se hacen de la vista gorda con Aguascalientes. ¿porque? Sus muy particulares razones tendrán, tal vez solo sea porque allí han mandado los panuchos yunqueros hace rato, y es mala publicidad.


Descarta PGR operativo en Aguascalientes
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Medina Mora afirmó que la PGR sigue realizando las investigaciones relacionadas a los asesinatos de policías en esa entidad

Esaú López

Manzanillo, México (20 febrero 2007).- El Procurador General de la República, Eduardo Medina Mora Icaza, descartó implementar el operativo conjunto en los Estados de Aguascalientes y Guanajuato.

A pregunta directa si se tiene contemplado el operativo conjunto para Aguascalientes y Guanajuato respondió que no.

Al salir de la inauguración de la sexta reunión de procuradores de la zona centro occidente en Manzanillo, Medina Mora Icaza, afirmó que la PGR sigue realizando las investigaciones relacionadas a los asesinatos de policías en esa entidad.

"La PGR atrajo el expediente (de Aguascalientes), tenemos en este momento a 11 personas en arraigo en la Ciudad de México, donde ya rindieron sus declaraciones ministeriales y continuamos reuniendo evidencias en el Estado de Aguascalientes", dijo.

"Estamos colaborando con la Procuraduría General de Justicia de ese Estado para determinar a qué organización pertenecen estas personas, es lo que puedo comentar hasta este momento".

El funcionario federal señaló que las fuerzas federales no han sufrido bajas en los operativos conjuntos.

Medina Mora afirmó en Manzanillo que no habrá más operativos conjuntos.

"No habrá ya más operativos, hasta este momento hemos determinado que estas son las zonas donde habrá operativos y estas intervenciones de fuerzas federales se dan en lugares que se expresa de manera extraordinaria la violencia en la disputa de bandas del crimen organizado", expresó.

"Lo que se ha determinado es que hasta este momento sólo Nuevo León y Tamaulipas son los estados en los que hacemos este nuevo despliegue, por lo pronto no vemos en mi horizonte inmediato ninguna otra entidad, no se descarta pero no está previsto".

DE GRANADOS CHAPA
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Usos y abusos militares

Ni los principios ni la práctica resultan bien servidos con la ilegal dedicación militar al combate a la delincuencia, pues por un lado se infringe la Constitución (artículo 129), y por otro lado no se consigue eficacia, pues pocos detenidos son llevados a juicio Desde que, en las horas previas a su asunción del gobierno, el presidente Calderón manifestó su propensión y su necesidad de cobijarse en las instituciones castrenses para gobernar, las fechas relativas al Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea, que por rutinarias se habían vuelto huecas, han adquirido importancia política. Calderón insiste en adular a las tropas, aunque sea de modo repetitivo y por lo tanto demagógico. Ayer, en la fiesta del Día del Ejército -que recuerda el establecimiento de fuerzas federales diversas de las del porfiriato, surgidas de la lucha contra la dictadura y la usurpación huertista, y contra zapatistas y villistas-, Calderón precisó el incremento salarial a los militares, que había anunciado el atropellado día mismo en que tomó posesión. En correspondencia a la presencia privilegiada que el Ejecutivo ha dado a las Fuerzas Armadas, el secretario de la Defensa Nacional, Guillermo Galván, abandonó el 9 de febrero, llamado Día de la Lealtad, la tradicional ajenidad militar a los asuntos políticos de la hora, lo que en Sudamérica llamaron la prescindencia militar. El antiguo jefe de Galván, a quien reemplazó el año pasado, el general secretario Gerardo Clemente Ricardo Vega, había deslizado en algún momento comentarios que, según él mismo advirtió, no estaba bien que externara. Pero lo hizo de modo casual, en ceremonia privada a la que asistía como particular (si eso es posible en rigor jurídico). En cambio, Galván, que fue subsecretario en los años finales del sexenio pasado, se arrogó la facultad de avalar a la autoridad presidencial, de la que sin embargo depende. He allí al subordinado otorgando un apoyo que por ley está obligado a prestar y por lo tanto no necesita expresarse. Galván habló de la legitimidad presidencial de Calderón, con lo que se situó en la orilla opuesta de una posición política que, en ejercicio de su libertad expresan millones de personas, una muestra representativa de los cuales llamó Presidente legítimo a Andrés Manuel López Obrador. No, ha venido a responder el general secretario, el legítimo es Calderón. No es al titular de la Defensa Nacional, que dispone de fuerza física, armas y organización, al que corresponde proclamar la condición política y jurídica de su comandante supremo. Quizá advertido de la desmesura de sus expresiones, en un nuevo discurso -la frecuencia de sus intervenciones públicas por sí misma es cuestionable, pues sus deberes son más de hacer que de decir- ha utilizado un dicho militar para asegurar que las Fuerzas Armadas "no buscamos hacer la guardia que no nos toca", si bien insistió en que "no dejaremos de hacer lo que nos corresponda". Planteó asimismo, como si no entrañara eventualmente una contradicción, la complementariedad de conductas: el hacer "lo que las leyes nos mandan" y lo que "nuestro comandante supremo instruya". No siempre son compatibles ambas convicciones. En rigor estricto no lo es la creciente y aparatosa, más que eficaz, actuación castrense en las operaciones conjuntas contra la delincuencia organizada en un número cada vez mayor de entidades. El domingo mismo se anunció que, en adición a las tareas de ese género en Michoacán, Baja California, Guerrero y Sinaloa, habrá operaciones conjuntas en Tamaulipas y Nuevo León. Después del asesinato de cuatro agentes policiacos en Aguascalientes no será extraño ver incluida a esa entidad en la lista de los estados en que se militariza la acción policiaca. A nadie parece importarle que se infrinja de modo flagrante la estricta disposición constitucional (artículo 129), según la cual "en tiempos de paz ninguna autoridad militar puede ejercer más funciones que las que tengan exacta conexión con la disciplina militar". Y quienes admiten que se relaje la observancia de la Constitución en aras del pragmatismo, harán bien en considerar este resultado de la presencia castrense en los estados más directamente afectados por el crimen organizado: a partir del 8 de diciembre, en que comenzaron las acciones en Michoacán, más de 16 mil 500 efectivos que participan en esas operaciones han detenido a alrededor de 580 personas, de las cuales sólo fueron puestas a disposición del Ministerio Público 360. Y de ellas, lo que acaso muestra una decisión de aprehender sólo con fines mediáticos y estadísticos, se ha iniciado proceso a sólo 94 personas (Reforma, 19 de febrero). Uno de los riesgos de acrecentar fuera de la ley los márgenes de acción de las Fuerzas Armadas queda claramente significado en la existencia misma y en la operación del Estado Mayor Presidencial, un cuerpo de elite que parece no sujeto a limitación alguna. Encargados de la seguridad de la casa y de la persona del Ejecutivo (y su familia), miembros de ese segmento del Ejército se constituyen en autoridad suprema respecto de los derechos de las personas. Hace unas semanas remitieron a un juzgado cívico a un militante perredista -en ese momento vocero de su partido- por invadir un tramo de la vía pública que su simple autoridad había clausurado. Mucho peor fue el comportamiento de otros miembros de ese cuerpo el viernes 18 en Tlaxcala, cuando su jefe asistía a la reunión de la Conferencia Nacional de Gobernadores. Los guardias militares impidieron realizar su trabajo a camarógrafos de TV Azteca y otros medios. Y a Luis Castillo, de Reforma, además lo tundieron y lesionaron al grado de requerir atención hospitalaria. Los Pinos lamentó el grave episodio pero dejó impunes a los agresores. Cajón de Sastre El ataque de los miembros del Estado Mayor Presidencial a Luis Castillo, reportero gráfico de Reforma, es mucho más que un incidente resultante del choque entre intereses profesionales encontrados: buscar información relevante, por un lado, y cuidar el orden del que depende la seguridad del Presidente. Narró el sábado nuestro diario: "Cuando un grupo de fotógrafos intentó aproximarse al palacio de gobierno de Tlaxcala", donde Calderón estaba reunido con la Conago, "elementos del EMP arremetieron a empellones contra ellos". Hicieron mucho más que eso: Castillo "fue sometido por la espalda y derribado por un efectivo del EMP y luego otro efectivo lo golpeó y pateó en el piso...". Uno más "pisó la cara del fotógrafo luego de gritarle: ¡Te estoy diciendo que te vayas! Después fue levantado del cinturón y aventado hacia la zona aledaña... ¿No que no te ibas?, le espetó el mismo elemento del EMP". Y sin disculparse con el agraviado, la oficina de prensa presidencial hizo un discursi sobre "el respeto al ejercicio de la labor periodística". Correo electrónico: miguelangel@granadoschapa.com