Militarismo y Constitución (impunidad y violaciones) |
martes, 27 de marzo de 2007 | |
Por Alvaro Cepeda Neri
II.- Es verdad que las policías se han corrompido y, por lo mismo, son cada vez más ineficaces en la persecución de los delitos, pero eso es suficiente como para que Calderón lleve ya varias violaciones al orden constitucional. Si el narcotráfico es ya "una perturbación grave de la paz pública" que pone "a la sociedad en grave peligro", entonces debió apoyarse en el Art. 29 de la Constitución, para "hacer frente, rápida y fácilmente a la situación". III.- Calderón se ha militarizado y sus decisiones son paramilitares. A su deslegitimación electoral le sigue sumando ilegalidades que pueden poner en serio riesgo la legalidad de su elección. Ya que para utilizar a los militares ha tenido que concederles privilegios (les aumentó al doble el sueldo, para evitar deserciones que continúan) y mayormente un fuero o sea que son intocables a cambio de que se desempeñen como una policía militar para combatir al narcotráfico. IV.- Denunciados unos soldados por abuso sexual y golpes a una indígena anciana (de 72 años), el calderonismo ha decidido apoyar a la casta militar que encubre a esos soldados integrantes de un destacamento de 150 uniformados de verde oliva, en la Sierra de Zongolica, en el Estado de Veracruz. Tras los abusos, doña Ernestina Ascensio Rosario, falleció. V.- El alto mando militar de inmediato desmintió los hechos para encubrir a los soldados. La impunidad por sobre todas las cosas y que, añadida al fuero, los han hecho intocables. El Estado Paramilitar de Calderón, pisoteando la Constitución, ha emprendido una marcha irreversible y de hecho, de facto, los derechos y las garantías de los mexicanos se han suspendido, para que los militares, sin darle cuenta a nadie, se comporten como los sicarios del narcotráfico. VI.- Eso ha sucedido a pesar de que "el pasado 2 de febrero -23 días antes de la agresión a Ernestina-, el ayuntamiento de Soledad Atzompa envió una carta al secretario de la Defensa Nacional, Guillermo Galván Galván, y al presidente Felipe Calderón, en la que detallaban los atropellos de la tropa: robos, invasión de propiedad, maltrato a los indígenas, revisión de vehículos...", escribieron los reporteros Regina Martínez y Rodrigo Vera (Proceso: 11/III/07). VII.- Violaciones sexuales y violaciones constitucionales del Estado Paramilitar Calderonista. Y como factor común la impunidad para un militarismo que empieza a ser más que un arma contra el narcotráfico y que puede encaminarse hacia un Estado Paramilitar, lo que es decir un autoritarismo soldadesco. Pareciera que Calderón será un Jefe de Gobierno y un Jefe de Estado tal y como se presentó al asistir al tradicional saludo a las Fuerzas Armadas. VIII.- En esa ocasión el Presidente Legal sin Legitimidad (incluso de acuerdo a un artículo que publicó con su firma en 1989, criticando la ilegitimidad de Salinas), vistió un uniforme militar dentro del cual se veía ridículo, pero, sobre todo, alarmante ya que el mensaje que nos envió a todos los mexicanos, es el de que será un Presidente con las cinco estrellas del General en Jefe de los soldados para imponerse ante la sociedad civil. IX.- En ese artículo, del que El Universal (12/III/07) nos da información, Calderón escribió: "Para que un gobernante tenga el derecho de mandar y ser obedecido, requiere de un reconocimiento o aceptación de parte de aquellos sobre quienes recaerá su mando". Carente ahora de esa legitimidad, a la mejor Calderón busca en la militarización, rompiendo los límites constitucionales, su legitimidad. X.- Más violaciones sexuales han cometido los soldados (a los que se les priva de las visitas maritales) a lo largo del país. De todas las acusaciones salen librados con toda la impunidad que requieren quienes intocables por el fuero, gozan, ahora, de la protección del general de cinco estrellas que está al frente del Estado Paramilitar Mexicano. |
No hay comentarios.:
Publicar un comentario