/tr>
LOS PRODUCTOS DEL BOICOT ¡NO LOS CONSUMAS!: Bimbo , Sabritas , Jumex , Pepsi, Gamesa , Televisa (televisión y revistas), TV Azteca , Milenio (Diario y Semanal), Banamex , Maseca , COPARMEX , Coca-Cola , Wal-Mart , Bachoco , Megacable , Farmacias Similares , M&M's , Kimberly Klark , Burger King , grupo ALSEA , Autobuses Estrella Blanca . Más en este link.

sábado, septiembre 02, 2006

RESPECTO A LA COLUMNA DE HOY DE JAIME AVILÉS

Jaime Avilés ya me había hecho el comentario de que teníamos que erradicar el odio hace unos días. Pero como ibamos saliendo de conocido centro de recreo y esparcimiento de la colonia Condesa, el comentario se me hizo medio fuera de lugar. "Ha de ser uno de esos comentarios filosóficos que se echa el Jaime cuando se echa unos whiskis" pensé. Y me olvidé del asunto.

Ayer tuve un incidente que me pareció de muy mal gusto. La gente de seguridad del plantón en el Zócalo no le permitió la entrada al área de prensa a una amiga que, sin sueldo y usando sus propios recursos, ha videograbado una gran cantidad de las asambleas informativas del peje. Ella lo único que quería era darle el pésame a los reporteros de Televisa por el fallecimiento de uno de sus compañeros. Tanto los reporteros de Televisa como los de TV Azteca (que no es lo mismo los reporteros que los pinches cerdos de Azcágada y Gómez) han tratado siempre a mi amiga muy bien. La han felicitado por ayudar al Sendero del Peje y con mis propios ojos pude ver como la gente le sonreía cuando ella se identificaba como reportera del Sendero del Peje--que eso es lo que es ella: colaboradora del Sendero del Peje.

Pero la gente de seguridad no le permitió pasar al área de prensa A PESAR de que tenía un gafete autorizado para el área de prensa y a pesar de que yo estaba ahí y ellos sabían quien era yo--y sabían además que yo tengo acceso al templete.

En solidaridad con mi amiga decidí NO quedarme en el templete y escuchar el discurso del peje con ella desde fuera. Como el resto de la gente. Total; yo al que apoyo es al peje, no a sus achichincles. Mis palabras exactas fueron "vámonos; si no nos quieren dejar pasar que chinguen a su madre." (Y que conste que NO estábamos pidiendo que la dejaran pasar al templete sino al área de prensa, para la cual tiene autorización. Nada más.)

Nos salimos entonces y entre apretones y caras de incomodidad de la gente logramos llegar al área de prensa por otro lado. Escuchamos el discurso del peje--muy chingón, por cierto--y punto. Pero yo estaba muy encabronado. No por mi; por la grosería que le hicieron a mi amiga, quien ha hecho MUCHO de el trabajo que se ha dado a conocer en El Sendero del Peje y nadie se lo ha reconocido. A mi me felicita mucho la plana mayor del PRD y que "felicitaciones" y que "está muy chingón el blog" y bla bla bla. Pero yo no soy el único que hace el blog. Y mi amiga merece tanto reconocimiento. Pero no se lo dieron. Lo único que le dieron en agradecimiento por cubrir las asambleas informativas fue la grosería de mandarla al carajo cuando la puerta de entrada al área de prensa estaba a miserables 3 pasos de distancia.

Era tanto mi encabronamiento por esta grosería (¡carajo! nunca pedimos nada que no fuera razonable) que cuando me topé con unos perredistas que quería que subiera un video al Sendero del Peje les dije "hoy no, luego platicamos." ¡Nadamás eso me faltaba! Que después de que le hicieron esa grosería a mi amiga ENCIMA me pidieran que les hiciera chamba de gratis. Lo siento, pero mi límite es el maltrato a los demás. A mi que me digan lo que quieran. Si quieren no me dejen entrar al templete. Me vale. Yo voy a seguir apoyando al peje de todas maneras. Pero no me pidan que les ayude en ese instante si a las personas que ayudan a que El Sendero del Peje sea lo que es las van a tratar mal a pesar de que autenticamente ha hecho un esfuerzo ENORME a favor del movimiento. Y repito: SIN pedir ningún privilegio. Ella tenía gafete de prensa pero de todos modos no la dejaron pasar al área de prensa.

Ya con los ánimos más serenos me puse a pensar por qué me enojé tanto. Y debo reconocer que es en parte por lo que dice Jaime. Algo le ha pasado al país. Yo no lo veo como odio. Creo más bien que se trata de dos situaciones distintas.

Lo que ocurre del lado de los que apoyamos al peje yo no lo veo como odio. Si así fuera tendría que odiar a varios de mis familiares que son panistas. Obviamente no los odio. Lo que tenemos los que apoyamos al peje es hartazgo. Es la sensació que le queda a uno cuando se siente agredido por alguien que abusa del poder. Es exactamente la misma sensación de hartazgo que teníamos con el PRI. En eso nada ha cambiado. Es un hartazgo social que viene desde hace muchas décadas. No nos lo inoculó el PAN. Más bien lo llevó al límite.

¿Pero odio? No. No lo veo como odio. El odio no tiene un fundamento razonado. Lo que sentimos los que estamos en la izquierda es 100% fundado y basado en hechos: la desigualdad social, la discriminación, el racismo, el clasismo, la corrupción y el saqueo a la nación por parte del PRIAN, el entreguismo a los intereses de Washington, etc. No nos sentimos agraviados simplemente por los colores del logo del PAN. Nos sentimos agraviados por las múltiples chingaderas que ha hecho el PRIAN desde hace décadas. Es un hartazgo por la grosería social.

Creo que mi enojo con los perredistas el día de ayer fue precisamente por eso; por la grosería. Y que si quieren es un incidente muy pedorro, pero ese no es el punto; el punto es que ese hartazgo se manifestó en una situación menor por que el hartazgo ya era muy grande. Tan grande que se desborda a la menor provocación.

En el caso de los panistas lo que tienen sí es autenticamente odio. Es un odio que creció a partir del momento en el que Dick Morris y Antonió Solá les dijeron a los panistas que amedrentaran a la gente diciendo que el peje es un peligro para México. Este miedo también lo estuvo suministrando en grandes dosis la iglesia católica, los empresarios de la COPARMEX, y los medios en general--con las honrosas excepciones, desde luego. "Pero miedo no es odio" dirán algunos. Y yo respondo: "pero el miedo degenera en odio."

El miedo es una reacción instintiva ante una apariencia. Es un mecanismo de protección que tenemos todos, y que nos ayuda a tomar precauciones ante una posible situación de peligro. Pero, como dije, el miedo es una reacción a una APARIENCIA, no a una realidad. Uno podrá tener miedo a hablar en público, pero no hay una verdadera justificación para tener miedo. Uno podrá tener miedo a un temblor, pero lo que nos permite sobrevivir en un temblor no es el miedo, sino la cautela; el guardar la calma.

Esa es la base psicológica del miedo que explotaron los panistas; el crear la idea de un peligro en base a mentiras: que si el peje era Hugo Chávez, que si iba a quitarle sus casas a la gente, etc. Crearon una situación de pánico 100% ficticia. Pero como les daba muy poco resultado, su frustración catalizó a este miedo para que se convirtiera en odio. En auténtico ODIO.

Ciro Cómez Mierda se quejó de que lo odian los simpatizantes del peje por que no es 100% pejista. Falso. Nadie lo odia; lo REPUDIA en base a los hechos. Y los hechos son muy claros: con tal de hacer puntos con Televisa, y con tal de lamerle las patas a Ahumada para que no divulgue el video de Ciro recibiendo billetes al estilo Bejarano, se olvida de la objetividad en el periodismo y se vende a la línea oficial. A los mercenarios no se les odia; se les repudia.

Ahora bien; hay un aspecto de la situación nacional que Jaime no tomó en cuenta en su columna: La falta de información de mucha gente. Varias veces he platicado con taxistas--a quienes el plantón en Reforma les pegó duro--que me salen con que les cae mal el peje, pero no por que se hayan creído lo que dice el PAN, sino por que no tienen la información suficiente para tener un punto de vista distinto. Pero luego de platicar un rato durante el trayecto, y luego de que les doy más información, los ánimos se serenan. Un taxista una vez hasta me pidió disculpas por haber hecho comentarios negativos contra el peje. Yo le dije "no se preocupe; todos tenemos derecho a una opinión y es muy respetable. No nos vamos a pelear por algo así." Y le di la mano en señal de amistad. Hasta ahí llegó el asunto.

La vacuna que pide Jaime contra el odio es muy sencilla: la serenidad y la información. En vez de pelearme con la gente que está enojada por los plantones primero escucho lo que tienen que decir. Luego les doy información. Si lo logro cambiar su punto de vista (la mayoría de los panistas son gente tan atemorizada que les impide razonar) por lo menos evito una situación que puede degenerar en animosidad o en violencia. Esto es algo que todos los que somos de izquierda debemos de practicar.

Y sí; estamos hartos y muy enojados por las chingaderas del PRIAN. Pero lo que busca el PRIAN es que nos descarrilemos por medio de una situación en la que nuestro coraje nos nuble la vista. Y eso es precisamente lo que debemos de evitar a toda costa.

Una razón más para apoyar al peje en el 2006.

No hay comentarios.: