Pablo Marentes escribe en el Universal:
Plaza LLena.
Una concentración de 200 mil personas, en cualquier lugar del mundo, indica que ahí hay un problema político.
Los 20 mil 900 metros cuadrados que mide la plataforma del zócalo sumados a los de las banquetas, pasillos de portales y de circulación de vehículos que la circundan, hacen un total de 49 mil. En cada metro cuadrado pueden permanecer cuatro personas sin apretujarse. El zócalo acomoda 196 mil personas holgadamente. El 24 de junio de 1988 se efectuó "un acto de medición promovido por un grupo de reporteros de los principales medios informativos del Distrito Federal", que protocolizó el notario público 190, David Dávila Gómez, en el testimonio número 954 firmado por Irma Rosa Martínez de EL UNIVERSAL, Azucena Valderrábano de La Jornada y Rogelio Hernández de Excélsior .
Las fotografías publicadas el pasado domingo 9 de julio por algunos diarios del DF permiten ver por lo menos 200 mil personas en la plataforma del zócalo, los arroyos vehiculares y los espacios laterales de la catedral.
La concentración de 200 mil personas frente al monumento de Abraham Lincoln en Washington, el 28 de agosto de 1963, cimbró a Estados Unidos y aceleró la promulgación de la Ley de Derechos Civiles y Electorales de 1965, a un siglo de distancia del estallido de la Guerra Civil y 10 años después de que Rosa Parks, ciudadana negra, se rehusara el 1 de diciembre de 1955 a levantarse de su asiento en un autobús para que lo ocupara un ciudadano blanco.
Para que se reunieran en la capital estadounidense 200 mil personas en demanda de derechos electorales, hubieron que transcurrir 22 años a partir del primer llamado.
La concentración del zócalo se efectuó tres días después de convocada. El corto tiempo ratifica que en México hay un problema político postelectoral.
El presidente del IFE, al presentar precarios resultados parciales, omitir información relevante respecto a 2 millones y medio de boletas "puestas a un lado," para su posterior escrutinio y efectuar un conteo titubeante, desató dudas que fueron agravadas por el sutil margen entre los votos emitidos en favor del candidato Calderón Hinojosa y del candidato López Obrador.
El PRD ratifica que no pretende que se anule la elección. Solicita al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación limpiarla. Es constitucional la vigencia de los principios de certeza, legalidad, independencia, imparcialidad y objetividad en las elecciones federales cuya garantía está a cargo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
La ineludible enseñanza de esta elección, enaltecida por la generosa participación de los ciudadanos, es la vastedad de la influencia que tuvieron en ella los minúsculos grupos familiares que controlan los servicios de radiodifusión, los consorcios industriales y comerciales de exportación, que comparten las ganancias de la banca que funciona en México. El fenómeno no es privativo de aquí. La investigación rescata estudios. De manera destacada lo hace la Universidad de Chicago. Sus hallazgos recientes corroboran que "el dinero, más que los votos; los recursos más que los derechos, determinan los procesos políticos en las repúblicas contemporáneas". Conviene analizar las secuelas de esta elección federal mexicana como una evidencia más de esa redescubierta tendencia.
Profesor de la FCPyS de la UNAM
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martes, julio 11, 2006
"EL DINERO MAS QUE LOS VOTOS, LOS RECURSOS MAS QUE LOS DERECHOS"
Publicadas por Armando Garcia Medina a la/s 1:35 p.m.
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