Los Gobernadores Traidores

En 1864, debido a la aproximacion de las fuerzas francesas a Saltillo, Juarez decidio cambiar la sede de su gobierno rumbo a Monterrey. El gobernador de Nuevo Leon era Santiago Vidaurri. Con este señor habian habido toda clase de roces desde la guerra de tres años. Juarez y su menguada escolta fueron recibidos descortesmente. El zapoteco era un politico muy zorro, sin embargo, y a pesar de que ya habia concluido que Vidaurri iba a chaquetear por el imperio le sonrio de dientes para afuera. Hubo un intento de arrestar al presidente pero logro salir de la trampa aunque tuvo que regresar a Saltillo.

No paso mucho tiempo antes de que Vidaurri abiertamente se declarara por el imperio y le besara la mano al habsburgo. Vidaurri recibio grandes titulos --gran mariscal del imperio o algun otro titulo de opereta-- pero no por eso se escapo de que eventualmente Mariano Escobedo lo arrestara y lo fusilara como el traidor se merecia.

Hoy en dia los gobernadores del PRD vuelven a seguir los pasos de Vidaurri. La Amalia, Lazarito (cuyo abuelo ha de retorcerse en la tumba de verguenza), y Torreblanca van a los actos de su alteza etilisima y le besan la cola de rata pelona a ver si les concede algun titulo de opereta. Que bueno que de una vez se definan, fuera mascaras. Olvidan la historia. Doña Amalia, don Lazaro, Sr. Torreblanca, aqui les puse la foto del Sr. Vidaurri. Veanlo bien para que lo puedan reconocer. Tal vez este dia de muertos el fantasma de Vidaurri, en lugar de andar errante por el cerro de la silla, les haga un favor se les aparezca, a ver si asi entran en razon.