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miércoles, julio 05, 2006

COLUMNAS DE MILENIO

Salen las columnas de Milenio de hoy:

Federico Arreola (quien FINALMENTE escribió una columna editorial que no fuera pura baba de perico):

Aunque la elección se ensucie, AMLO va a ganar

Federico Arreola

Uno de los observadores electorales más importantes que vino a México, el señor Ted Lewis, dijo ayer en CNN en español que pocas veces había visto más irregularidades en una elección. Para Lewis, el colmo fue que el IFE hubiese dicho que su programa de resultados preliminares llevaba computados más de 98% de los votos cuando, tal como denunció López Obrador, faltaban alrededor de 3 millones de sufragios por contabilizarse.

En su opinión, la única forma de limpiar el proceso electoral es contar voto por voto para poder llegar a una conclusión válida acerca de quién debe ser el próximo Presidente. Ciertamente ha sido una vergüenza el espectáculo que ha dado el IFE, es decir, Luis Carlos Ugalde, que luego de la denuncia se vio obligado a admitir que le faltaban muchísimos votos por contar en su absurdo, ilógico, manipulado, inmoral y propanista PREP.

Aunque el IFE todavía no limpia del todo a su famoso programa, ahora resulta que de un día para otro la “ventaja” que el IFE le daba a Calderón de más de 1% ya la redujo a .64. Esto no sólo es inaudito, sino prueba que el PAN, el gobierno y el IFE han estado cocinando algo muy parecido a un fraude cibernético que, gracias a la participación de miles de ciudadanos que lo descubrieron, no va a prosperar.

Qué terrible retroceso democrático, todo por el miedo irracional que AMLO genera en los pusilánimes espíritus de Vicente Fox, Felipe Calderón, Carlos Salinas de Gortari, Roberto Hernández, Claudio X. González, Luis Carlos Ugalde y el resto de los cómplices de este burdo intento de alteración de un resultado electoral.

Todo esto ha sido tan grotesco, que ya no va a resultar suficiente el solo cómputo acta por acta en los 300 distritos electorales del país que hoy inicia. Ahora, lo único que podrá darle credibilidad a la elección es que se cuenten todos los votos uno a uno. Cuando se haga, se verá que el Presidente electo se llama Andrés Manuel López Obrador.

COMENTO:
Ya lo había dicho antes, pero lo repito; los panistas subestimaron al pueblo. Pensaron que los que apoyamos al peje somos masa manipulable e ignorante. Tanto nos subestimaron y tan inferior es el concepto en el que nos tienen que NUNCA les pasó por la mente que MILES de mexicanos estaríamos al pendiente del PREP en internet y que otros tantos estaríamos evidenciando las irregularidades del PREP con cámara digital en mano y desde luego con el conocimiento que dan los estudios académicos en ciencias y estadística. Para ellos, los panistas, nosotros, los mexicanos comprometidos con la democracia y con LA VERDAD, no existimos. Y no existimos simple y sencillamente por que NO QUIEREN que existamos. Es precisamente por gente como nostros que sus fraudes están siendo evidenciados ANTES de que se puedan consumar.

Y esto no es por obra de un partido político, puesto que en estas elecciones el PRD se vió francamente MUY PINCHE INEPTO y su nivel de reacción fué DEMASIADO lento (aunque finalmente se pusieron las pilas.) Tuvimos que ser NOSOTROS, los ciudadanos de a pie, los que sacamos a flote a nuestro candidato. Sin nosotros, el PRD hubiera tenido que aceptar una derrota de la misma manera tan bochornosa como lo hizo Cuauhtémoc Cárdenas en el 88--y por exactamente los mismos motivos: un fraude electoral que se evidenciaría con un conteo de votos y que, precisamente por eso, el PAN no quiere que se cuenten los votos.


Ciro Gómez Leyva tiene también hoy un momento de lucidez:

Cuánto miedo le tienen a Andrés Manuel

Ciro Gómez Leyva

Es enfermiza, irresponsable, la insistencia de los dirigentes del PAN y algunas personas, grupos empresariales, locutores de radio e incluso medios de comunicación, para que Andrés Manuel López Obrador reconozca su derrota en las elecciones del domingo. Esa prisa intransigente es hoy la principal amenaza para echar a perder la luminosa jornada del 2 de julio.

¿Por qué tendría López Obrador que levantarle la mano a Felipe Calderón, si el propio presidente del IFE, Luis Carlos Ugalde, ha aceptado que, por inconsistencias o errores, 3 millones de votos emitidos no están cargados al PREP? ¿Por qué tendría que hacerlo si el PREP sólo le da una ventaja de 400 mil votos a Calderón?

Pero la obsesión por enterrar al odiado Peje está superando a la lógica más simple. Nunca pensé que los grupos conservadores le tuvieran tanto miedo a Andrés Manuel.

Esos fanáticos, mal disfrazados de demócratas, deberían sentarse a estudiar lo que ocurrió en Alemania hace poco. El 18 de septiembre pasado, la coalición de la Unión Democrática Cristiana y la Unión Social Cristiana, con Ángela Merkel al frente, ganó por un millón de votos la elección de los miembros del Parlamento al Partido Socialdemócrata, de Gerhard Schröeder. Pero había una controversia sobre cómo se debían repartir los escaños. Merkel y los suyos se movieron y Schröeder apeló en todas las instancias legales al alcance, antes de aceptar que había perdido y dejar su cargo de canciller el 22 de noviembre. Dos meses y cuatro días tomó dirimir la elección en la Alemania ejemplar.

Por no hablar de Al Gore, el candidato demócrata a la presidencia de Estados Unidos en el 2000. Obtuvo más votos de la gente que el republicano George Bush, pero al final, Bush ganó con los votos del Colegio Electoral: 271 a 266. La clave era el estado de Florida, que aportaría los votos decisivos en el Colegio Electoral. Bush ganó gracias a 537 personas que marcaron la diferencia en Florida. Quinientos treinta y siete sufragios en la gran democracia occidental.

Gore llevó el caso a la Suprema Corte de Justicia, que, tres semanas después de los comicios, resolvió cerrar el proceso y proclamar ganador a Bush.

No entiendo, pues, por qué nuestros fachos se enfurecen porque López Obrador pide, simplemente, que se cuenten los votos.

COMENTO:
Hombre, pues que bueno que bueno que Ciro finalmente dice algo como esto. Quien lo viera hace unos días atacando al peje por que no le convenía a su cuate Ahumada que el peje ganara. En fin, esperemos que esto que están haciendo los fachos mexicanos le abra los ojos de una buena vez por todas a Ciro de que lo que está en juego no son las ambiciones políticas del peje, sino LA VOLUNTAD POPULAR.


Y finalmente pongo la columna de Carlos Marín UNICA y EXCLUSIVAMENTE por que, como siempre pasa con este pendejazo, una vez más se tiene que tragar sus palabras luego de haber balbuceado las estupideces que dijo uno o dos días antes. Me explico: no recuerdo si ayer o antier Carlos Marín salió con la batea de babas de que el quejarse de las inconsistencias en el PREP en base a las fotos de las sábanas--que no concordaban con los resultados del PREP--merecía que a quienes estábamos denunciando esto se nos calificara de "poquiteros." Yo hasta le mandé un e-mail a Marín diciéndole cuan pendejo es y pidiéndole de la manera más atenta que no mame y que antes de abrir el hocico se INFORME; que no son poquitos votos, sino una colección bastante extensa de discrepancias con el PREP (y que nosotros hemos documentado en este blog). Sepalachingada si Marín leyó mi e-mail. El caso es que hoy escribe lo siguiente:


El milagro de los números

Carlos Marín

Un dato de las elecciones de 2000 para intentar entender lo que está sucediendo:

Hace seis años, con 93.08% de las casillas capturadas en el PREP, Vicente Fox aventajaba por 6.93 puntos a Francisco Labastida, y con el resto de la información, incrementó su diferencia en 62 décimas, para terminar 7.55 puntos arriba del priista.

En esta elección, los misteriosos dos millones 581 mil 226 votos (no “tres”) que estaban en 11 mil 184 actas que presentaban inconsistencias, redujeron la brecha entre Calderón y López Obrador, de un punto, a 0.6. Esto hace que la ventaja del panista, en vez de sumar 402 mil sufragios, disminuya a 257 mil 532.

Ahora falta que se contabilicen dos mil 17 actas de todo el país que no han llegado al IFE y que, de acuerdo con el porcentaje de participación electoral, pueden contener las preferencias de casi 850 mil ciudadanos.

López Obrador necesita poco más de la tercera parte para que se haga el milagro.

Ah, pero ayer tachaba al peje y a los que nos quejábamos del PREP de "poquiteros." Pinche hocicón.

Por cierto que Marín hace mal el cálculo. Necesitaría el peje poco más del 60% de esos votos para ganar, ya que si SUPONEMOS que de verdad los votos están distribuídos en 30% y 30% más o menos para fecal y para el peje, entonces tenemos que la suma de los votos tendría que ser superior a 60% para igualar el número de votos de fecal y sacar ventaja. La bronca es que los números actuales del PREP--que es en lo que se basa esto del 0.6%--no son confiables por que, como hemos visto, están alterados. Se tienen que revisar los votos uno por uno para asegurarnos de que se están contando TODOS los votos y no se le está restando ni sumando votos a nadie.

Lo curioso es que en los votos que no se contabilizaron--los de las anomalías--la ventaja más grande era para el peje. Tendremos que esperar a ver que sucede con estos votos y si el IFE deja de hacerse pendejo y se permite el conteo de todos los votos. De lo contrario, estas elecciones van a tribunales. No hay de otra.

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