LA DISCUSION YA COMENZO

La discusión ya empezó
Gerardo Unzueta
23 de diciembre de 2006

Nota original:

Los ojos de la opinión pública están fijos en la izquierda. Los titulares "gruesos" de la prensa y los espacios espectaculares de tv se dedican al grupo gobernante y a su primer magistrado, pero la atención está puesta en ¿cuál es la acción que seguirá a la proclamación de López Obrador como presidente legítimo?, ¿cómo actuarán los diputados y senadores de izquierda en las cámaras?, ¿cuál será la ruta política del partido reconocido socialmente como representante de la izquierda -el PRD- y los que con él forman el Frente Amplio Progresista? Y, sobre todo: ¿se consolidará el gran movimiento que se formó en torno a AMLO como potente fuerza nacional, cuyas acciones nadie pueda ignorar?

A estas preguntas hay que dar respuesta razonada. Y es el PRD la organización política más obligada a contestarlas. Ya el octavo pleno de su Consejo Nacional resolvió convocar a un congreso nacional "extraordinario".

La segunda sesión de ese pleno, que se realizará el 13 de enero, definirá el contenido de la reunión nacional, sus formas de preparación y resolución.

Pero hay que reconocer que la discusión sobre los grandes problemas planteados ya comenzó. Y desde el inicio tiene en su centro las definiciones de la cuestión más general, aquella que no acepta respuestas elusivas: el régimen político de México atraviesa una profunda crisis y las instituciones de éste muestran su decrepitud e incapacidad para darle solución democrática. Sobre esa cuestión crucial el PRD, como tal, no tiene posición precisa, argumentada. Pero los escritores y periodistas -destacadamente los moneros- democráticos o de izquierda se le han anticipado.

Ese sector de la vida pública de México hace un vigoroso llamado a la izquierda y le demandan responsabilidad. Adolfo Gilly ha señalado: "Estamos hoy ante la ruptura de las reglas de reproducción del poder y, por lo tanto, ante una crisis de la relación mando/obediencia, consustancial al equilibrio de cualquier régimen político". Luis Javier Garrido escribió: "La vida pública se halla inmersa en una grave crisis política y moral y las instituciones nacionales en el más absoluto desprestigio". Carlos Fazio, ante los ataques a las fuerzas populares, dijo: "El uso de la fuerza guarda relación con la pérdida de hegemonía del bloque en el poder a través de sus representantes políticos y portadores ideológicos, lo que obligó a la adopción de formas excepcionales para la solución de las crisis". El pintor oaxaqueño Francisco Toledo declaró en entrevista: "Si hay patrullas de la Policía Federal Preventiva y perros amaestrados para quitar brazos y piernas en Oaxaca, (eso) hace ver que se vive en un estado de sitio, de guerra... Lo percibo como casi al borde de una guerra civil".

El PRD está obligado a atender el llamado a esclarecer la situación política; lo reclama el inmenso colectivo de más de 14 millones de votantes que el 2 de julio cruzó el sol azteca con esperanza y hoy exige un rumbo de lucha concreto, formas para enfrentar la militarización de las relaciones entre la población y el Estado y la acentuación del autoritarismo derechista.

Y debe hacerlo como partido, mediante la incorporación de todos sus miembros al debate sobre la crisis en que la derecha hunde al país, con la elaboración de formas de lucha que hagan más sólida su unión dentro del gran movimiento que representa el gobierno legítimo encabezado por Andrés Manuel López Obrador.

Analista político, miembro del PRD