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lunes, noviembre 27, 2006

AHÍ TE HABLAN, FECAL.

Tomado de la revista Emeequis.

Carta que no leyó Calderón para probar sus coincidencias.

Por Daniel Cazés-Menache
Todo parecía indicar que una parte enorme de la ciudadanía –las decenas de miles de individuos que solicitamos al IFAI ver las boletas electorales del 2 de julio antes de que se quemen– iba a verse frustrada, y que todas las personas honestas de este país viviríamos seis años con la duda respecto de lo que realmente sucedió ese día.

Pero, menuda sorpresa, usted, el presidente dudosamente electo, percibió que entre su programa y el del contrincante al que incontables irregularidades hicieron perdedor, hay coincidencias irrefutables que podrían ser estímulo para el entendimiento entre quienes, desde bandos opuestos, tienen la absoluta seguridad de que alcanzaron la mayoría en los comicios presidenciales.

Quizá aún no es demasiado tarde para demostrar a la ciudadanía que la enumeración de coincidencias no es mera ocurrencia a la Fox, sino propuesta seria de construir relaciones profundamente nuevas.

Por si usted o alguno de los ancianos de izquierda que lo consideran la cabeza de una derecha moderna y avanzada, piensan que la palabra de algún votante es atendible, le propongo que dé una muestra de esa sinceridad que al menos 15 millones de electores ponemos en duda:

•1. Coincida: transparencia y honestidad.
a)
Si usted y sus allegados están convencidos de que la elección fue clara, transparente y honesta, si de veras no tienen nada que perder, ordene que los documentos en que expresamos nuestros votos sean puestos a nuestra disposición. Me refiero a las boletas, no a las actas en torno a las cuales subsisten todas las sospechas expresadas desde el día mismo en que llegaron a las urnas. Somos multitud quienes, obnubilados por las tradiciones, pensamos que la negativa de hacerlo significa que con toda seguridad usted perdió la elección.

Coincida: demuéstrenos lo contrario.
b)
Si tiene la certeza de que el gobierno que fenece actuó honradamente, ordene que se haga toda la luz sobre el Fobaproa, los Amigos de Fox y los hijos de la segunda parte de la casi ex pareja presidencial.

c)
Ordene que la tensión en Oaxaca llegue a su fin de la única manera posible: así podrá confirmar que no es resultado de ningún oscuro contubernio o negociación inconfesable; saque de ahí a la PFP y haga que los agresores con la legitimidad de la violencia sean sometidos a juicio.

•2. Coincida: proponga un gabinete conjunto y confiable.

Convenza a la Convención de que no pretende usted secuestrarle su programa:
invite a AMLO a que él lo lleve a cabo a nombre de ambos:
propóngale que ocupe la Secretaría de Gobernación, que Claudia Sheinbaum sea Secretaria de Desarrollo Social, Assa Cristina Laurel de Salud, Alejandro Encinas de la Contraloría y Bernardo Bátiz se ocupe de la PGR. Si no aceptan tendrán que explicárselo a la Convención y a sus electores; si acceden, tendrán con toda seguridad el apoyo de millones, no sólo entre sus seguidores.

•3. Coincida: austeridad.
Convenza a toda la ciudadanía de que los integrantes de su gobierno, los miembros de su partido y la totalidad de la clase política son hombres y mujeres que en verdad se sacrifican por el bien de México:
ordene que se vote una ley conforme a la cual quienes ocupan las cúspides del Poder Ejecutivo y Judicial, así como todos los legisladores, dejen de cobrar los salarios fabulosos que perciben:
que se les pague el salario mínimo y que ellos retribuyan remunerando al menos con un millón de pesos al año por tener el honor de ser los próceres que proclaman ser.
Dé el ejemplo, pague, no cobre y no permita que cobren sus antecesores.

•4. Coincida: justicia y fin de la impunidad.
Nada lo haría más legítimo que ordenar que se aplique la ley en relación con el feminicidio en todo el país: sírvase de la investigación que realizó la LIX Legislatura y decrete el fin de las simulaciones en la PGR y las procuradurías estatales, y de paso estipule que sus socios en el Senado aprueben la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia que aprobó la Cámara por unanimidad y el último día de la Legislatura los senadores de su partido lograron dejar en primera lectura.
Ponga en acción los instrumentos que tiene para enjuiciar a los criminales y violadores de Atenco.
Actúe ya contra la impunidad de los crímenes organizados.

•5. Coincida: corrupción.
Usted la conoce mejor que nadie:
no insista en sus manos limpias y estipule formas concretas en que se cancelarán todas las formas de corrupción, empezando por la de la cúspide, que es la más cercana a usted.

•6. Coincida: los medios.
Ordene a los legisladores de su partido y a sus socios tricolores que se revisen en detalle y con profundidad las leyes de radio y televisión y de telecomunicación teniendo en la mira el derecho de radioescuchas, televidentes, usuarios de la informática y difusoras públicas, comunitarias y culturales, y no seguir beneficiando a empresarios de los medios y de la publicidad.
Haga que se prohíba la publicidad partidista y gubernamental y sólo se permita la propaganda equitativa.

•7. Coincida: legislación electoral.
Ordene a su mayoría legislativa que reduzca el número de legisladores, la duración de precampañas y campañas, el negociazo de las asignaciones del IFE (éstas mejor cancélelas) que van a dar al monopolio electrónico.

•8. Vaya contra la coincidencia de todos los partidos.
Promueva que nadie pueda eternizarse en la política profesional:
que nadie ocupe puestos de elección o de administración pública durante más de quince años en total:
así se abriría camino a la juventud y se combatirían los intereses de cuerpos con poder.

¿Cómo la ve?
A lo mejor con estas y otras medidas semejantes nos olvidamos de la evidente posibilidad de tener un presidente espurio y otro “legítimo”, y nos hacemos de uno solo, mínimamente creíble.

Como sin duda tomará este texto como una provocación peligrosa o como una mafufada, le propongo otra alternativa para contrarrestar a esos violentos fracasados que en años ni siquiera han conseguido romper un vidrio:
deje de acosar con vallas y armas de fuego la Cámara de Diputados y vaya a tomar posesión en algún estadio que pueda ser bien vigilado por su Estado Mayor personal e íntimo, y a la vez pueda albergar un número más o menos igual de impresionante que el de la gente que el día 20 estuvo en el Zócalo capitalino.

*Antropólogo y lingüista. Director del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades de la UNAM.

Cuenta Regresiva.
Por Juan Reyes del Campillo*
Ha empezado la cuenta regresiva para el cambio sexenal.
A unos días del ascenso a la Presidencia de Felipe Calderón, estamos muy próximos a conocer lo que nos habrá de deparar el nuevo gobierno.

La cuenta regresiva de Vicente Fox para quitarse la banda presidencial y empezar la parejita presidencial su retiro en el rancho de San Cristóbal, en Guanajuato. También para dejar de poner atención a sus tonterías.

Pero la cuenta regresiva también para conocer cuáles fueron, con tal de obtener apoyos fundamentales para su campaña, los compromisos establecidos por Felipe Calderón con los poderes fácticos. La Iglesia, los empresarios, los líderes charros, los monopolios mediáticos, los priistas tránsfugas, etcétera, empezarán a cobrar sus dividendos con todo e intereses a partir del 1 de diciembre.

Con el gabinete económico se entiende que tendremos más de lo mismo.
Tecnócratas neoliberales formados en las principales universidades privadas del país continuarán el proceso de desregulación del Estado, que iniciaron los últimos presidentes priistas y que Fox se encargó de darle un buen avance.

De todo tenemos en las designaciones, de chile, de dulce y de manteca: foxistas, tránsfugas priistas y un panista, pero si algo hay que identifica a este grupo de nuevos ministros es su fe absoluta en el neoliberalismo.

El próximo martes nos anunciarán al gabinete social en el que seguirá la repartición de puestos de Calderón para cubrir los compromisos.
Se anuncia desde ya a su destapador, el ex gobernador de Jalisco, Francisco Ramírez Acuña, la posibilidad de entregar a la maestra Gordillo la Secretaría de Educación Pública y la continuidad de la política asistencialista en la Secretaría de Desarrollo Social.

A todos, el nuevo presidente ha dicho que les habrá de exigir eficacia, aunque bien a bien no sepamos de qué tipo de eficacia se trata.

Después nos darán a conocer al gabinete político; sin embargo, los nombramientos tampoco habrán de depararnos ninguna sorpresa.

La verdadera cuenta regresiva va a empezar cuando el nuevo gobierno se tenga que enfrentar a los graves problemas del país: empleo, pobreza y seguridad. Veremos entonces de qué están hechos estos políticos ciertamente muy distintos a los gerentes del sexenio que termina.

Pero acaso, ¿alguien espera un buen resultado cuando todo parece la misma cosa? Es curioso, pero a diferencia del inicio de muchos otros sexenios, hoy las expectativas están muy reducidas. Esto puede ser bueno para el nuevo presidente, siempre y cuando empiece a sacar el buey de la barranca. Nada mejor en una sociedad dividida, que dar buenos resultados cuando las expectativas se encuentran prácticamente en cero.

Tal vez lo más preocupante son los compromisos con otros poderes, empezando por la Iglesia católica. Hace unos días le prometió a la Conferencia del Episcopado Mexicano promover un cambio constitucional para modificar el artículo 24. Cambiar la libertad de cultos y de creencias por la libertad religiosa, lo cual significa, entre otras cosas, acceso de la Iglesia católica a los medios masivos de comunicación, libertad religiosa en las escuelas públicas, así como asistencia espiritual y religiosa en centros penales y de asistencia pública.

Lo anterior es de pronóstico reservado, y no es sólo una demanda de la Iglesia sino también de la ultraderecha panista. Tienen la espina clavada desde la Guerra Cristera y no quieren dejar pasar la oportunidad ahora que el PAN repite en el gobierno. Después de más de 70 años, vuelven por sus fueros en un asunto sumamente delicado.

Ahora bien, ¿ese cambio constitucional sería igual para todas las iglesias o únicamente para aquéllas que cuentan con suficientes recursos económicos? Desde el muy peculiar punto de vista de la Iglesia católica, este cambio sería la conquista de un derecho humano largamente anhelado y perseguido, pues demandan poder penetrar ciertos espacios largamente protegidos y regulados por el Estado mexicano.

Pero como el horno no está para bollos, cualquier reforma al respecto debe ser ampliamente discutida. No vaya a ser que la supuesta libertad religiosa nos conduzca a una nueva guerra religiosa. Efectivamente las cosas han cambiado mucho en el país, pero el tema religioso es sumamente explosivo, sobre todo si se pretende ampliar las atribuciones que los clérigos religiosos obtuvieron a principios de los años noventa.

Finalmente debemos preguntarnos ¿qué fue lo que se negoció con otros sectores y poderes fácticos? Sería muy grave que el futuro presidente, como parece ser, inicie su gobierno con las manos amarradas. Si se van a repartir favores, posiciones para hacer un uso patrimonialista del Estado o darle continuidad a una política que ha demostrado su desgaste e ineficiencia, tendremos entonces un presidente débil. Aun a pesar de que nadie quiere un retorno al presidencialismo autoritario, tampoco es de desearse una presidencia disminuida.

*Ex consejero electoral del IEDF, secretario académico de la Sociedad Mexicana de Estudios Electorales y profesor-investigador de la UAM-Xochimilco.

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