Propaganda antichavista

De Venezuela a México.

Los empresarios contra el pueblo.

Edgar González Ruiz

La situación de Venezuela ha sido un tópico recurrente de la derecha en las elecciones de México, comparando a AMLO con Hugo Chávez y presentando a este último como un gobernante autoritario, “populista” y hasta “comunista”.

Es difícil comparar ambos casos entre otras cosas porque su historia y marcos jurídicos son diferentes. En México, a diferencia de los otros países de AL, salvo excepciones, se dio una revolución social, la de 1910, y se consolidó un marco jurídico que garantiza el estado laico, conquistas que intenta socavar la camarilla panista en el poder.

Hugo Chávez, a quien tanto critican los ricos de su país y del nuestro, está llevando a cabo cambios importantes en ese sentido, al promover el laicismo educativo, que es fundamental para el futuro de esa nación, y al desarrollar proyectos de beneficio social, así como una visión del gobierno enfocado a los más pobres, lo cual no es sino expresión de las ideas de solidaridad y de justicia.

Esas ideas cuestionan la falta de valores del neoliberalismo radical, que sustituye la ética por las ganancias materiales. En el plano ideológico, por eso la derecha neoliberal odia tanto a Hugo Chávez, quien también ha tenido la lucidez, que no la tuvo en México Ebrard, ni otros colaboradores de Obrador en el gobierno del DF, de rechazar la llamada ideología de la inseguridad, promovida por think tanks neoliberales, y que pone en el centro de las preocupaciones oficiales la defensa de la propiedad y la persecución de los marginados con el pretexto del combate a la delincuencia, lo que sirve a la vez para soslayar la lucha contra la pobreza.

En el ámbito geopolítico, la insistencia de los grupos neoliberales afines a la ultraderecha que gobierna EU en impedir la llegada de AMLO al poder, y en atacar a Chávez, a Evo Morales y a otros exponentes del resurgimiento de la izquierda latinoamericana obedece también al interés estadounidense de apoderarse del petróleo y otros recursos naturales de la región mediante políticas privatizadoras como las que promueven los políticos panistas.

En Venezuela, algunos empresarios han encabezado la lucha contra Chávez, al grado de promover la desestabilización del país, incluyendo un golpe de estado y otros crímenes políticos patrocinados con dólares de grupos republicanos de EU.

En México, ante el fracaso de la publicidad del derechista Partido Acción Nacional, grupos empresariales, que pretenden ponerse por encima de las leyes, están encabezando su última resistencia al triunfo de AMLO, mediante una insistente publicidad que retoma el caso de Venezuela, y haciendo llamados ilegales y otras maniobras para impedir que los trabajadores defiendan en las urnas sus propios intereses.

También se está difundiendo en la Web una publicidad antichavista, basada en supuestos testrimonios de venezolanos expatriados, que llaman la atención por lo grotesco de su defensa de los privilegios económicos y de su llamamiento a una lucha de clases de los ricos contra los pobres, para evitar que las ciudades, y sobre todos sus barrios lujosos, se conviertan en lugares habitables para quienes menos tienen.

Reproduzco a continuación una de esas cartas que sin firma circula en medios electrónicos atribuída a una persona que se identifica como ciudadana venezolana y que con evidente mala fe o desconocimiento de la realidad y de la historia mexicana despotrica contra AMLO, usando el espantajo de su pretendida similitud con Chávez. Es patente el elitismo y la falta de consideraciones sociales de esa venezolana, que incluso parece ignorar que aquí en México costó mucha sangre quitarle el poder al clero conservador, a lo largo de los siglos XIX y XX, para que ahora vuelva por sus fueros, encabezado por personajes como Calderón, Abascal, y demás panistas. Insidiosamente, insinúa que la izquierda no cumplirá la promesa de ayudar a los ancianos, cuando ha sido una realidad bajo la gestión de AMLO. Abunda también en la consabida retórica de la inseguridad, con la que se justifican ahora los derechistas venezolanos desde el exterior de su país, pero es evidente que para quienes no tienen recursos económicos, el problema fundamental de su vida no es el temor de ser secuestrados por una poderosa y millonaria banda criminal, o sufrir las “incomodidades” del comercio ambulante, sino poder sobrevivir, simplemente.

Personas como la que escribe la carta satanizan al gobierno de Cuba, pero con todas su s limitaciones, ha tenido la virtud, entre otras, de dar educación y salud a su pueblo, a niveles que no se tienen en otros países.



Esta es la carta de la antichavista y antimexicana:

Voté por Chávez, similitudes con el PRD y AMLO (Ciudad de México, DF, Mexico)

Soy venezolana y vivo en México desde hace dos años.

Casi todos votamos por él, me refiero a mis amigos, amigas, y familiares. La gente con universidad y maestría como yo, votamos por él. Su discurso era convincente, "la riqueza estaba en manos de unos cuantos capitalistas y políticos, mientras que había una gran pobreza...", etc.

Sabíamos, pero no le dimos importancia que Chávez era sarcástico, mostraba cierta ironía en sus discursos y lleno de odio hacia los ricos. Pensamos que ese carácter era lo que Venezuela necesitaba para salir de la corrupción en que estábamos envueltos.

Hoy, Uds. lo saben, la economía y calidad de vida en Venezuela está cada vez peor. El dinero no se repartió entre los pobres. Las empresas que tomó el gobierno no sirven para nada y el gran ingreso del gobierno por la venta de petróleo no se usa para construir un país mejor. Eso si, con Chávez, al gobierno de Cuba le ha ido muy bien, mas no a su pueblo.

Ahora vemos a los marginados viviendo cómodamente en las calles. Hay jacales por todas partes y en Sábana Grande, una hermosa calle comparable con Masaryk en el D.F., hoy sólo se ven ambulantes, defecación al aire libre, violencia y asaltos.

Monumentos nacionales, esculturas, puentes, obras de arte, espacios públicos, hoy parecen basureros y han sido maltratados. Y es que el discurso de Chávez es dejar que los marginados vivan a sus anchas, y que los ricos que han robado toda su vida la pierdan y se jodan.

Pero mi familia no robó nada ni éramos ricos. Éramos una familia de clase media, con estudios, trabajadores, con las necesidades básicas cubiertas, pero sin grandes propiedades ni negocios. Hoy mi familia está en aprietos y con temor. Votamos por el referéndum contra Chávez por lo que estamos en una lista negra, por lo que perdí mi empleo y las cosas se nos dificultan, mi hermana se tardó meses en obtener cita para tramitar el pasaporte.

Uds. saben también que han desaparecido periodistas e intelectuales que han opinado contra Chávez. Todos quienes votamos por él, hoy estamos en su contra. A favor de él sólo están los militares, los corruptos y los resentidos sociales qué el ha creado, que dicho sea de paso, no tienen intenciones de producir o crear un mejor país, sino simplemente vivir del gobierno y de las facilidades que les da.

¿Qué hace Chávez con el dinero del gobierno? Pues ayuda a Cuba, a Evo Morales, y, me parece obvio, a López Obrador. ¿QUE NO SE DAN CUENTA? ¿NECESITAN REPETIR LO QUE NOSOTROS PARA DARSE CUENTA?

Yo sé muy bien que Chávez no es igual a López Obrador, ni Venezuela es igual a México. Pero sí les digo, que yo viví la campaña de Chávez y veo cosas muy parecidas.

Veo una persona con odio, violenta en su forma de hablar, burlona. Veo que tampoco habla bien el castellano, y es solo la punta del iceberg de su falta de educación. Veo a un buen manipulador como Chávez, que va al corazón de las personas, hacia sus sentimientos, y veo que engaña, los ha engañado a Uds. Veo que Elena Poniatowska, una gran intelectual para México, hizo un anuncio hablando de los "viejitos", ¿quién no se deja convencer si el candidato va a ayudar a los "viejitos"? Mis padres ya no son jóvenes, y no reciben nada del gobierno, sólo obstáculos.

Veo que los intelectuales mexicanos apoyan al candidato del PRD, y también veo cómo mañana Uds. mismos estarán de dientes para adentro arrepintiéndose de su decisión de hoy, cuando sus hijos no encuentren empresas donde trabajar, cuando los ambulantes estén en su banqueta defecando al aire libre, y no los puedan correr porque son violentos y "están en su derecho"; el gobierno no haga nada porque de eso se trata, de darles "libertad de acción". Cuando no haya ley que evite los robos, asaltos, vandalismo cuando vean gente vagando en las calles sin ocupación.

Cuando haya toque de queda voluntario porque sea un riesgo salir de noche. Cuando la falta de mantenimiento de las obras públicas, la desidia, suciedad y deterioro vaya generando una depresión colectiva que hasta sus casas llegue, porque lo más importante es comer, cualquier otra cosa es un lujo.

En mi opinión, USTEDES ESTÁN CIEGOS, pero los invito a reflexionar, sólo a dudarlo y a informarse de lo que sucede en mi país. No por lo que dice el gobierno ni la prensa, les pido que hablen con los venezolanos que hemos llegado a este país en busca de un mejor futuro, huyendo de Chávez.

México es un país increíble, con diferencias sociales y pobreza como todos los países de Latinoamérica, pero el camino para lograr un mejor país no es odiar a los ricos, y a las empresas, sino amarlos y crear leyes para distribuir mejor el dinero. El odio trae más odio, el amor trae más amor.

No se trata de volver a México un país de pobres para pobres, como Cuba o Venezuela.

Abran los ojos!