Hoy nos levantamos con la triste novedad de que todo lo que le pensaban hacer Mario Marín y Kamel Nacif a Lydia Cacho se lo hicieron los policías del presi precioso Fox y del héroe de la película del EdoMex Peña Nieto a las mujeres de Atenco.
Primero que nada esta es la portada de Milenio Diario de hoy:
Esta nota de La Jornada nos muestra lo que le espera al país con otros 6 años de PRIANismo:
Valentina vivió el Chile de Pinochet, pero en México
• Violaron a varias chavas camino al penal, denuncia
• Presentará demanda por haber sido objeto de abuso sexual
Valentina Palma, al momento de su detención, el pasado jueves en Atenco Foto Mario Antonio Núñez
BLANCHE PETRICH
Desde Chile, después de ser expulsada de México, Valentina Palma analiza con sus abogados tres demandas: una para exigir su derecho a concluir su carrera de cinematografía en México; otra penal, contra la corporación policiaca que la detuvo en Atenco, la golpeó, maltrató y abusó sexualmente de ella, y una tercera contra el Estado mexicano por deportación ilegal. Pero sobre todo, a cinco días de haber vivido la experiencia más aterradora de su vida, sostiene: ''Puedo decirlo con absoluta certeza: a varias chavas arrestadas en Atenco, con las que compartí cerca de 12 horas de prisión en Almoloyita, las habían violado durante el traslado del lugar de arresto al penal. Más de cinco, sin duda''.
La estudiante chilena lamenta que las autoridades mexicanas califiquen de ''mentiras'' y ''estrategia'' las denuncias sobre estas violaciones y torturas: ''Las chavas que yo vi lloraban mucho, estaban ensangrentadas, tenían la ropa desgarrada. Una llevaba los calzones rotos; la entrepierna del pants de otra estaba totalmente descosida. Nadie decía la palabra violación, pero eso es natural. Las mujeres, cuando salen de un episodio así, lo bloquean. Y no quisieron que las revisara el médico legista. Una lo expresó así: 'ya me metieron mano, no voy a ir a abrirme de piernas para que me esculque otro más'. Porque no había una doctora; era un médico sin sensibilidad y en extremo malhumorado''.
La estudiante del Centro de Capacitación Cinematográfica no acepta el alegato de uno de los funcionarios que participaron en su expulsión, quien le dijo que había estado en el lugar menos apropiado y en el momento menos indicado. ''La profesión que yo estudio, video documental, implica estar ahí, en el lugar menos apropiado y en el momento menos indicado, para registrar lo que pasa.''
El suyo es parecido a aquellos testimonios que en los 70 los mexicanos escuchábamos en el Chile de Pinochet. Pero esto le ocurrió a una chilena en México, apenas la semana pasada:
''Oí por la radio que en Atenco habían matado a un muchachito de 14 años. Decidí tomar mi cámara e ir a grabar; es la tendencia natural de alguien que busca ser una profesional en esto de documentar lo que pasa. Llegué al pueblo como a las 8 de la noche del miércoles. Estuve grabando las guardias que organizaba la gente. Luego me fui a la plaza. Ahí estaba, ya medio adormilada, cuando empezaron a tañer las campanas y a dar voces de que estaba entrando la policía. Volví a los puestos de guardia, grabé el ir y venir de las bicicletas, de la gente informando en todos los puestos. Cuando empezó el ataque guardé mi cámara y me fui a refugiar a la biblioteca, frente a la iglesia. Ilusamente pensé que podía esperar ahí a que se calmaran las cosas. Entraron dos muchachos que no conocía y estábamos esperando cuando llegó la policía. Dos me tomaron de los brazos, mientras otros dos me golpeaban. Eran de uniforme azul. Supongo que eran de la policía municipal. A las mujeres nos daban toletazos en pechos y nalgas.
''Nos llevaron a un costado de la iglesia, donde ya había muchos detenidos, y nos obligaron a arrodillarnos; nos seguían golpeando. Cuando sonó en mi mochila mi celular, un policía ordenó que me registraran. Me robaron todo: documentos, mi material, la cámara. Luego nos subieron a una camioneta. No pude ver de qué color era, pero era grande. Me arrojaron sobre unos cuerpos ensangrentados. Uno de los uniformados me ordenó que pusiera la cara contra el piso, pero había un charco de sangre. Como me resistí aplastó mi cabeza con su bota. Ahí empezó el abuso sexual''. El traslado duró de las ocho de la mañana hasta las tres o cuatro de la tarde. Un recorrido incierto y horas de tortura continua.
''Me insultaron, me manosearon todo lo que quisieron. Yo era la única mujer. Fue una violación, aunque no hubo penetración. Nos ordenaban permanecer inmóviles. A mi lado venía un viejito que gemía y pedía piedad. Su cara era una sola costra de sangre. Traté de tocarlo y me golpearon. No puedo quitármelo de la cabeza, iba muy mal.''
Cuando llegaron al penal y los bajaron del autobús, Valentina llevaba los pantalones a las rodillas y el cuerpo manchado de sangre, propia y ajena. Al llegar a Chile, lo primero que hizo su madre fue llevarla a un reconocimiento médico. El informe de los galenos describe numerosos moretones en nalgas, senos y posible fractura de costillas. Durante las horas de detención, en México, también fue revisada por varios médicos legistas, pero ninguno le entregó su reporte.
Al bajar de los camiones ''nos taparon la cabeza y nos hicieron pasar entre dos hileras de policías que nos pateaban. Nos separaron a hombres de mujeres. Ahí vi a una policía y me dije gracias, al fin. Pero ella apenas me vio dijo: 'déjenme a esta perra', y me empezó a golpear con las manos en los oídos. Cuando me ingresaron fue cuando vi a las chavas con los pantalones y la ropa interior rotos, llorando mucho. Eramos 25 o 30 mujeres, muchas en shock. Conozco esa reacción, la crisis después de un episodio de violación. Al menos dos sufrieron violación con penetración, aunque nadie pronunciaba esa palabra. Una contó que el hombre que la agredía le ordenó decirle jinete y se burlaba. Las custodias nos preguntaban si habíamos sido violadas, como si supieran.''
Después de 12 horas en Almoloyita, Valentina, junto con dos españolas, fue trasladada a Toluca, luego al centro de detención migratoria de Iztapalapa y finalmente al aeropuerto. A las siete de la tarde del día 5, amigos y familiares interpusieron un amparo contra su deportación. A pesar de ello, a las 11 de la noche fue subida a un avión, junto con su compañero, el estudiante de antropología Mario Aguirre, y ambos trasladados a Santiago de Chile sin una declaración oficial de deportación ni algún otro documento de por medio.
Pero para Valentina éste no es el final: ''Más allá de mi deportación ilegal, contra la que voy a luchar, denuncio desde aquí que en Atenco hubo abusos y violación contra mujeres como una arma de represión''.
En este blog lo dijimos varias veces: lo que le espera al país con 6 años más de PRIANismo es una dictadura de derecha estilo Pinochet. Ahora lo estamos viendo con las vejaciones que sufrieron los Atenquenses a manos de la policía estatal y federal.
Una segunda nota de El Universal da cuenta de más casos de abusos de la policía en Atenco:
Documentan abusos de policías en Atenco
Reportes dan cuenta de excesos. Pide AI garantías para detenidos
En el hospital Adolfo López Mateos de Toluca permanece esposado Edgar Santiago Nava, detenido tras los sucesos de San Salvador Atenco (Foto: Jorge Alvarado/EL UNIVERSAL)
María de la Luz González, Teresa Montaño y Emilio Fernández
El Universal
Martes 9 de mayo de 2006
El Centro de Derechos Humanos "Miguel Agustín Pro Juárez" (Prodh) documentó que elementos de la Agencia Estatal de Seguridad y de la Policía Federal Preventiva incurrieron en uso excesivo de la fuerza durante el enfrentamiento con pobladores de San Salvador Atenco.
EL UNIVERSAL estuvo presente ayer en el juzgado donde los detenidos rendían su declaración preparatoria y pudo constatar que muchos presentan golpes y heridas graves.
Deogracia Morales Solís, habitante de Atenco, relata que a su casa entraron 40 granaderos que destruyeron muebles, puertas, aparatos electrónicos. Dos mujeres policía le robaron más de 10 mil pesos que tenía guardados en la alacena.
El centro Prodh recabó testimonios de integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) detenidos y golpeados, y realizó visitas en domicilios.
En el reporte se da cuenta de allanamientos y destrozos en viviendas, a las que ingresaron sin órdenes de cateo; lanzamiento de gases lacrimógenos en áreas donde se encontraban niños, ancianos y embarazadas, así como del sometimiento de detenidos con toletes, puñetazos y patadas.
Sobre la denuncia de violaciones sexuales, el centro Prodh cuenta de momento con testimonios indirectos. Testigos aseguran que las hubo.
En un comunicado desde Londres, Amnistía Internacional pidió hacer pública la identidad de los detenidos, garantizar su integridad física y acceso a asistencia legal y médica.
Senadores de PRI, PAN y PRD, integrantes de las comisiones de Justicia y de Derechos Humanos, calificaron como "lamentables y reprobables" los hechos de violencia y exigieron una investigación a fondo sobre los mandos que permitieron "la brutalidad" y se les sancione.
(Con información de Francisco Reséndiz)
Y hay más:
Detallan agresiones contra atenquenses
Pobladores de Atenco relatan cómo los policías allanaron sus viviendas
María Teresa Montaño y Emilio Fernández
ALMOLOYA DE JUÁREZ, Méx.- Las historias de abusos y vejaciones cometidas por policías estatales y federales durante el asalto a San Salvador Atenco el jueves pasado surgen entre familiares de los detenidos y habitantes de la comunidad.
El Universal
Martes 09 de mayo de 2006Personas que hacen guardia afuera del penal estatal de Santiaguito narran el caso de Aurora y María, quienes, aseguran, fueron violadas durante su traslado de Atenco al penal.
Aurora, al rendir su declaración preparatoria, pidió al juez que lleva la causa dar vista al Ministerio Público por la agresión que sufrió por parte de los uniformados.
Sandra vaga todo el día alrededor del centro penitenciario. Su hijo de 20 años está preso con dos costillas rotas.
A pesar de que ayer el gobierno mexiquense prohibió el acceso a los juzgados donde declararon los detenidos, EL UNIVERSAL pudo ingresar y constatar que muchos presentan golpes y heridas.
Al ser presentado a la rejilla de prácticas, Édgar exhibe amplios moretones alrededor de los ojos que le llegan hasta las mejillas, rastros de raspones y cortadas en las manos y frente. Florentina, una mazahua, se le ve golpeada y trabajosamente se comunicaba con los funcionarios.
Édgar Santiago Nava, de 21 años, sigue esperando ser intervenido quirúrgicamente en el Hospital Adolfo López Mateos de Toluca, a pesar del riesgo que corre por una fractura expuesta en cúbito derecho, consecuencia de la paliza que recibió el jueves por parte de la policía durante el desalojo.
Él es uno de los diez hombres que fueron trasladados al hospital general de la capital mexiquense en calidad de consignados, con vigilancia las 24 horas del día y encadenados a sus camas.
Édgar se encuentra internado en el área de traumatología del hospital, junto con Rodolfo Olivares Galicia, de 57 años, quien también presenta una fractura en cúbito e igual requiere de cirugía.
De acuerdo con el director del propio hospital, José Manuel Domínguez, los dos pacientes no han sido intervenidos debido a que los familiares "deben llevar el material de osteosíntesis que se requiere para la operación".
El caso de Édgar es el más grave. El propio director del hospital reconoce que si no es intervenido a más tardar la próxima semana a pesar de la operación, el estudiante de 21 años sufrirá secuelas y disfunciones de por vida en su brazo.
En San Salvador Atenco la vivienda de Deogracia Morales Solís todavía está de cabeza por los destrozos que causaron policías.
A su hogar, ubicado en el 111 de la calle Miguel Hidalgo, ingresaron 40 granaderos que destruyeron muebles, puertas, vidrios, aparatos electrónicos y dos mujeres policía le robaron más de 10 mil pesos que tenía guardados en su alacena.
Los elementos federales y estatales se llevaron a su nieto Néstor Martínez Romero, de 32 años de edad. Lo golpearon hasta el cansancio y ahora no sabe nada de él.
A su patio se introdujeron 15 estudiantes que huían de la fuerza pública y los sacaron a toletazos, puntapiés y puñetazos. Frente a su casa, según vecinos, a los jóvenes los tundieron a golpes más de 50 efectivos.
A Arnulfo Pacheco, a quien hace unos días sufrió un derrame cerebral, a su esposa e hijo los policías les dieron una golpiza en el interior de su casa antes de ser detenidos. A Jordán Flores Rosas, de 23 años, los uniformados lo aventaron desde la azotea de su domicilio, explicó su esposa.
"Se metieron por el segundo piso de mi casa, destruyeron parte de los aparatos electrónicos y se llevaron dinero y varios celulares".
En el hospital general de Toluca se encuentran internados en el área de cirugía Paulino Zavala, de 61 años de edad, quien presenta "fracturas costales" y Arnulfo Pacheco, de 55 años, también con fracturas en las costillas. Ambos están fuera de peligro y podrían ser dados de alta en las próximas horas para ser trasladados al penal estatal de Santiaguito.
Cabe destacar que Arnulfo es parapléjico y que a pesar de su avanzada edad y estado de salud, fue sacado a golpes de su domicilio.
Este lunes se presentaron a San Salvador Atenco integrantes del Centro de Derechos Humanos Agustín Pro, a visitar los domicilios de las familias que denunciaron abusos de la policía.
Luis Macías Medina, integrante del Programa de Defensa Integral del organismo, señaló que luego de acudir a ocho de las 20 casas donde ingresó la PFP y la ASE, se comprobó el uso excesivo de la fuerza pública. "Que se investigue, enjuicie y castigue a los responsables de esos actos", sugirió.
Reporta Edomex 211 detenidos
Por su parte el secretario general de gobierno del estado de México, Humberto Benítez Treviño, aseguró en conferencia de prensa que serán investigados los excesos que cometió la policía durante el desalojo del miércoles, pero nuevamente acusó de "sanguinarios, despiadados e irracionales" a los pobladores de Atenco.
En conferencia de prensa, informó que durante el operativo policiaco en San Salvador Atenco fueron detenidas 211 personas, de las cuales 190 fueron consignadas, en tanto que los cinco extranjeros ya fueron deportados a sus respectivos países. (Con información de Notimex)
ONG reporta abuso policiaco en Atenco
El Centro Pro informa que agentes allanaron casas sin órdenes de cateo
María de la Luz González
El Universal
Martes 09 de mayo de 2006Elementos de la Agencia Estatal de Seguridad y de la Policía Federal Preventiva incurrieron en uso excesivo de la fuerza durante el operativo del 4 de mayo para retomar el control de San Salvador Atenco, luego de los violentos enfrentamientos del día anterior con integrantes del Frente de Pueblos Unidos en Defensa de la Tierra (FPDT).
Así lo establece un reporte preliminar del Centro de Derechos Humanos "Miguel Agustín Pro Juárez" (Prodh), elaborado a partir de testimonios con integrantes del movimiento detenidos y heridos durante los operativos, así como de visitas realizadas a sus domicilios.
Paralelamente, la oficina central de Amnistía Internacional, en comunicado desde Londres, pidió que se hiciera pública la identidad de los detenidos, garanticen su integridad física, acceso a asistencia legal y médica, que se le acuse de un delito común reconocible o se les deje en libertad y se investigue el homicidio del adolescente muerto en la trifulca del 3 de mayo y las violaciones a derechos humanos en el operativo del 4 de mayo.
El informe da cuenta de allanamientos y destrozos en viviendas, a las que los elementos policiacos ingresaron sin órdenes de cateo; lanzamiento de gases lacrimógenos en áreas donde se encontraban niños, ancianos y mujeres embarazadas, así como del sometimiento de detenidos mediante golpes de tolete, puñetazos y patadas.
El organismo no ha documentado violaciones sexuales, aunque de acuerdo con testimonios recabados sí se registraron casos de abuso, pero la evidencia que se tiene es sólo de oídas, no de víctimas directas, precisó el abogado Luis Arturo Macías, uno de los encargados de elaborar el reporte.
"Lo que tenemos son elementos presuncionales. Los testigos nos informan que los policías los reunieron en dos camiones, y que uno de ellos se escuchaban gritos de mujeres que al parecer estaban siendo agredidas sexualmente, pero como todos estaban cubiertos o agachados en el camión no pudieron confirmarlo", explicó.
Destacó que en las entrevistas con los detenidos en el reclusorio estatal de Santiaguito, en Almoloya de Juárez y con los heridos en los hospitales integrantes del Centro Prodh pudieron constatar las lesiones causadas por los agentes, y que varios de ellos tenían aún las huellas de los golpes y la ropa ensangrentada o destrozada.
Sobre las agresiones sexuales, la abogada Bárbara Zamora, representante de un grupo de los detenidos, aseguró que ella tiene conocimiento de por lo menos dos casos, aunque tampoco de manera directa, sino por versiones de algunos de sus representados.
Por su parte, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) continúa recibiendo quejas sobre presuntas violaciones a los derechos humanos de los detenidos y sus familiares durante el operativo del 4 de mayo.
Ocho visitadores adjuntos del organismo y cuatro peritos médicos están asignados a la investigación del caso, y siguen entrevistándose con los afectados para elaborar el informe que presentará en breve la comisión, la cual informó inicialmente haber recibido denuncias por uso excesivo de la fuerza por parte de los agentes policiacos.
Pedirán intervención de la CIDH
El Centro Pro confirmó que prepara una solicitud de medidas cautelares contra la incomunicación ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en favor de Saúl Ríos Moreno, integrante del FPDT detenido el 4 de mayo y cuyo paradero se desconoce hasta el día de hoy.
El organismo informó que Ríos Moreno es el único caso documentado de desaparición hasta ahora, aun cuando familiares de los detenidos en el operativo han dado diferentes cifras, que van de los 27 a los 400 personas de quienes presuntamente se desconoce su paradero.
Detienen a activistas
La Red Nacional de Organismos Civiles "Todos los derechos para todas y todos" (Red- TDT) denunció que el pasado 4 de mayo fueron detenidos en San Salvador Atenco Damián Camacho y Pedro Álvaro Delgado, defensores de derechos humanos, y exigió su inmediata liberación.
El organismo calificó de ilegal y arbitraria la detención de los activistas y denunció que además se violó su derecho al proceso, pues no se les remitió de inmediato ante la autoridad competente, no se les informó de los cargos en su contra ni tuvieron asistencia legal desde el momento mismo de su detención.
Además de su liberación, la Red TDT pidió que se investigue y sancione a los responsables de los abusos y se den garantías plenas para el desarrollo de su trabajo.
Ofrece Presidencia diálogo y advierte que no tolerará bloqueos
Hay 16 quejas por abusos sexuales en Atenco: CNDH
Capturan a César, hijo del líder Ignacio del Valle; América, prófuga.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos documenta 14 quejas por abuso sexual y dos por presunta violación contra mujeres durante la intervención de agentes policiacos en el conflicto del jueves pasado en San Salvador Atenco, Estado de México, cuando fueron detenidos integrantes y simpatizantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra.
El coordinador general de la CNDH, Guillermo Ibarra, informó ayer que las quejas fueron presentadas por terceras personas, pero la Comisión ha encontrado algunas dificultades para probarlas, ya que algunas de las mujeres no han puesto la denuncia, otras han pedido tiempo y “otras no han querido someterse a los exámenes”.
En entrevista radiofónica con Ciro Gómez Leyva, Ibarra informó que de manera inmediata los hechos fueron denunciados al Ministerio Público, ya que se trata de presuntos delitos que se persiguen de oficio, “aunque no tengamos documentados todos los casos”.
Dio a conocer que de cinco a diez días, el presidente de la CNDH, José Luis Soberanes, rendirá un informe preliminar de la investigación y, en caso de que una recomendación proceda, ésta se llevaría más tiempo, porque “todo tiene que ir documentado y probado”.
Ibarra recordó que la propia Comisión emitió hace poco una recomendación sobre los manuales del uso de la fuerza pública en situaciones como la de Atenco, donde se establece que se tienen que respetar procedimientos cuando una persona se encuentra ya sujeta o inmovilizada, luego de lo cual no tiene que haber otro hecho más que su traslado a un transporte y de inmediato al lugar que corresponda.
Esto significa, explicó, que puede ser ante el Ministerio Público o un reclusorio.
El coordinador general de la CNDH refirió que también se encuentra determinado el uso de los calibres o las pistolas.
Sin referirse al caso de Atenco en particular, Ibarra dijo no poder decir que la presentación de quejas por abuso sexual o por violación forme parte de una táctica en común, “pero ha habido casos en los que ha sido muy complicado probar eso para nosotros, y sí se ha presentado la queja, y ha sido muy difícil que quede debidamente probado”.
Con ello aludió la aseveración del comisionado de la agencia de Seguridad del Estado de México, Wilfrido Robledo, en el sentido de que era falso que hayan ocurrido violaciones en Atenco y que eran inventos contra la autoridad.
En el caso de dos mujeres españolas detenidas, Ibarra informó que la CNDH no tuvo contacto con ellas, porque fueron enviadas al Instituto Nacional de Migración y de ahí llevadas directamente al avión. De ellas se tiene conocimiento de una publicación ayer, “pero sí tuvimos conocimiento por un tercero de que habían sido abusadas sexualmente”.
Ibarra aclaró que en el caso de que se les hubiese quitado la ropa a esas mujeres, si se sigue el procedimiento tiene que ser por medio de personal médico femenino autorizado, lo cual no constituye violación, “porque en el momento de ser entregadas a la autoridad competente se les tiene que hacer una revisión médica”.
- Claves
Las denuncias
• El sábado pasado, 44 mujeres detenidas en Atenco iniciaron una huelga de hambre en protesta por las presuntas violaciones que afirman haber sufrido tras su detención.
• Hace dos días, 18 de los detenidos enviaron una misiva en la que denuncian tortura y agresiones sexuales realizadas en su contra por agentes policiacos.
• Se espera que hoy el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez presente la documentación y denuncia de las violaciones a los derechos humanos de los habitantes del municipio mexiquense.
"Despiadados y sanguinarios"
••• El secretario general de Gobierno del Estado de México, Humberto Benítez Treviño, se comprometió a deslindar responsabilidades y a castigar a los policías que cometieron excesos el jueves pasado en San Salvador Atenco.
En conferencia de prensa, a cinco días del enfrentamiento entre integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y la policía, Benítez insistió en calificar a los atenquenses de irracionales, despiadados y sanguinarios. “Por supuesto que no estamos de acuerdo con los excesos de la policía, pero por otro lado, esto no obsta para que yo admita que es inadmisible la forma violenta, irracional, despiadada y sanguinaria con la que los pobladores agredieron a policías inertes e inermes.
“El Estado está obligado a garantizar el Estado de Derecho . . . hay una violencia que es inevitable, la violencia contra la violencia misma y ésta está a cargo del Estado; la razón del Estado es mantener la armonía y paz social . . . utilizando la fuerza, pero si hay exceso lo vamos a investigar y castigar” apuntó. (Toluca • Claudia Hidalgo)
¿Entienden por qué no podemos permitir que el PRIAN continúe en el poder? Le estaríamos tirando a 6 años más de disctadura salinista que desembocaría en una guerra civil.
Una razón más para votar por el peje y por el PRD para el congreso en el 2006.
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