Esta nota de Proceso nos muestra otro más de los tejes y manejes que ha habido entre Carlos Salinas de Gortari y el PRIAN, pero sobre todo la presidencia de Fox, para intercambiar impunidades. OJO; sugiere que la mano detrás del poder NO es Fox, sino... bueno, léanlo:
Carlos Salinas agita la batuta
Álvaro delgado/apro
México, D.F., 15 de marzo (apro).– Propenso al uso de fachadas para salir de su escondrijo para hacer política, Carlos Salinas utilizó en esta ocasión un foro académico, por supuesto estadunidense, con el fin de protagonizar un nuevo episodio de su plan por regresar de lleno a la contienda en defensa de sus privilegios y sus cómplices.
El momento político es, como en las anteriores apariciones, propicio para el exjefe del Ejecutivo: Raúl Salinas, el hermano que súbitamente apareció como un hombre absolutamente impoluto en el homicidio de José Francisco Ruiz Massieu y en el acopio de más de 120 millones de dólares, es declarado inocente en Francia y ya está avecindado en Puebla, donde disfruta de su capricho, la exhacienda Las Mendocinas.
¿Por qué Raúl ganó los juicios? En parte porque sus abogados, que no son filántropos, hicieron su trabajo, pero también porque los representantes de la Procuraduría General de la República (PGR) no hicieron el suyo, quizá porque recibieron la instrucción desde la residencia oficial de Los Pinos, de una voz femenina, para un intercambio de impunidad.
El asesinato de Enrique Salinas, el otro hermano, ha quedado en el limbo, pese a los indicios de negocios con empresarios de Monterrey, Nuevo León, de la propia matriz salinista, y con personajes muy próximos a quien formalmente gobierna los Estados Unidos Mexicanos. Y Carlos sabe quién fue el homicida.
Carlos Salinas apareció en agosto del año pasado en Chalco, Estado de México, unas semanas después de que Raúl salió de prisión, y volvió a asomarse en noviembre, en Monterrey, en ambas ocasiones supuestamente para promover su Fundación Solidaridad, pero en realidad era para calibrar el ambiente político para preparar su abierta participación.
No ha sido posible este propósito sencillamente porque en su partido, el PRI, se protagonizan reyertas que han agudizado el repudio social y sabe que su sola presencia pública implica el completo desfonde electoral y prefiere las repentinas apariciones.
Ahora Salinas pontifica desde el Instituto Tecnológico de Massachussets, unos días después de que la justicia francesa dejó sin efecto la orden de captura de Raúl, pero con tan mala fortuna –que pone en entredicho su presunta astucia– que fue en la víspera de las elecciones de este domingo en el Estado de México, que no arrojaron buenos resultados para su causa.
En realidad, Salinas está tan desesperado por el frustrado freno a Andrés Manuel López Obrador que comete ese elemental error de timing –como dicen los cursis– y, en vez de alentar un desdén contra el perredista, lo impulsa.
Vaya, hasta los panistas Felipe Calderón y Manuel Espino repudiaron las expresiones de Salinas, aunque por supuesto siguen el guión que les ha marcado con aquello de que López Obrador es sinónimo de Hugo Chávez y, lo más reciente, que es la encarnación de Luis Echeverría, aportación de Jorge Castañeda.
Salinas agitó la batuta y, pese a sus tibios deslindes, Calderón y Espino siguieron la instrucción, hermanados con Roberto Madrazo. La mejor expresión son los promocionales de ambas campañas: López Obrador es un “riesgo” para México, afirman, y proceden a repetir lo que su jefe les instruye desde su escondrijo.
El caso de Calderón es dramático y al mismo tiempo grotesco: En el relanzamiento de su campaña, ayer martes, presentó su nuevo lema, “Para que vivamos mejor”, no sólo idéntico al programa del gobierno de Tamaulipas, sino porque el problema no es esa herramienta de propaganda en sí mismo. El problema es el candidato, quien anoche compareció ante el cómico Adal Ramones y, además de sus pobres ideas y humor, exhibió eso que tanto detesta, la obesidad.
Apuntes
Tal es la desesperación de Calderón, que no levanta, que se afana por recoger cascajo priista de la vertiente tecnocrática. La más reciente adquisición es el gordillista Rafael Moreno Valle, exsecretario de Finanzas del gobernador Melquíades Morales. El PAN olvidó que fueron desaparecidos casi 3 mil millones de pesos que ellos mismos denominaron el “hoyo financiero” y que tanto los escandalizó. Esta súbita amnesia fue lo que facilitó la adquisición política por parte de Manuel Espino. Melquíades será candidato al Senado por el PRI y es deseable que se efectúe un debate con Moreno Valle para saber dónde quedó ese dinero. La muda de Moreno Valle al PAN implicó un movimiento en los candidatos a senadores en este partido: Ángel Alonso Díaz–Caneja será ahora incluido en la lista de senadores por Hidalgo, mientras que Humberto Aguilar Coronado encabezará la segunda fórmula y Jorge Ocejo Moreno será incluido en la lista nacional. Cuatro senadores poblanos. ¡Viva El Yunque de ese estado! Y El Yunque está feliz también porque Ramón Muñoz, “Julio Vértiz”, será también senador: nacido en Lagos de Moreno, Jalisco, hizo carrera en Guanajuato, tiene su residencia en Cuajimalpa, Distrito Federal, y será senador por… Guerrero. Muñoz solía decir que alguien tendría para apagar la luz al fin del gobierno. Ahora tendrá que ser el propio Fox.
¿Se fijaron en el detalle que mencionan del lema de fecal? Idéntico al lema que usan en Tamaulipas.
Con esto tenemos confirmación de que el lema de fecal es copia del lema PRIISTA de Colima y el lema PRIISTA de Tamaulipas.
¿Para qué se siguen haciendo guaje fecal entonces? El y Madrazo son uno mismo. Son el PRIAN.
Una razón más para votar por el peje en el 2006.
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