Resistencia y Sacrificio

Resistir implica sacrificio.

A veces es fácil juzgar la resistencia en conjunto pero es más complejo juzgar la resistencia personal desde un punto de vista objetivo y lejano. ¿A que nos resistimos? A muchas cosas que se conjugan en una sola: contra la injusticia. Tan simple concepto engloba lo que el hombre libre determina como vital para desarrollarse en plenitud en una sociedad democrática. Con justicia todo viene por consecuencia. Y bien, en México simplemente no hay justicia; existe algo que está en poder de algunos pocos que le aplican tesis, terminología, papeleo y un sinfin de procedimientos que hace parecer una cirugía ceberal mucho más sencilla que la aplicación de la justicia de forma expedita. A eso le llaman justicia, un procedimiento avalado por unos pocos y que afecta a muchos más, esa es la justicia aquí.
Sin justicia hemos visto nuestro voto robado, sin justicia hemos visto cómo se pretende entregar lo nuestro por el interés de un puñado de gente.
A eso nos resistimos, sin tesis ni complejas fórmulas.
La resistencia exige sacrificio y el costo personal a veces es alto más se asume por ser su parte inherente, he visto que ciertas cosas personales se pierden y parece no tener remedio. El compañero a veces requiere de una explicación menos egoista pero la verdad es que no la hay, la resistencia a veces se impone siempre por el bien común. Un bien común que parece nunca llegar pero que siembra futuros posibles en base a nuestro actos del presente.

He visto muchos espectros de esta resistencia y es emocionante ver la cantidad de gente, a veces dispar, que congenian en esta amalgama, luego la resistencia se individualiza para transformarse en algo sólido, duradero; el ideal se consolida en base a la relación interpersonal que se desarrolla por la coincidencia ideológica. Ideas, pensamientos, creencias, acciones; todo cabe en cada persona que carezca de mezquinos intereses personales.
A veces los beneficios de la resistenca no parecen serlo y también se asume es cuando uno mira más allá, lejos, cuando la resistencia se tranforma en justicia pura, es en ese momento de reflexión cuando se recobran las fuerzas necesarias que se requiere para continuar ante la duda y la aparente inmovilidad de la tiranía y opresión. A veces la resistencia se nutre de la esperanza, otras veces del amor, otras del hambre y la soledad. La resistencia es el crisol donde los sentimientos más humanos se funden en fuerza y lealtad.

Todo evoluciona y quienes resistimos evolucionamos a formas insospechadas, en ocasiones nos transformamos en esos sueños de antaño cuando la resistencia era aplastada, cuando se pensaba que el terror era suficiente para callar a la gente en movimiento. Hoy desistimos de la violencia pues sabemos que las palabras y las ideas son temibles para el terror quien no logra articular palabra ante la fuerza de la inteligencia, enmudece, se detiene, muere por su propio veneno.

Si, el costo es alto pero hay quienes estamos dispuestos a dar más aún.

Morfo Fuera
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