SOBRE EL INFORME

El Universal publica hoy la siguiente nota en la que ya de plano el congreso (el PRIAN, más bien) se van a plan B debido a que de plano no ven como posibilidad que el CEROTE CON PATAS de el informe en la tribuna de San Lázaro:

Congreso prevé Informe sin mensaje en la tribuna

La Mesa Directiva de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión elaboró un proyecto con un plan B que garantice la participación “segura e institucional” del Presidente de la República en la ceremonia del primer Informe de Gobierno, prevista para el 1 de septiembre en el palacio legislativo de San Lázaro

Arturo Zárate
El Universal
Jueves 23 de agosto de 2007

La Mesa Directiva de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión elaboró un proyecto con un plan B que garantice la participación “segura e institucional” del Presidente de la República en la ceremonia del primer Informe de Gobierno, prevista para el 1 de septiembre en el palacio legislativo de San Lázaro.

En este esquema se considera que el presidente Felipe Calderón entregue por escrito su Informe en el Salón de Protocolo de San Lázaro y que se retire del edificio, bajo un clima de paz y tranquilidad.

De no lograrse un arreglo el próximo 27 de agosto, cuando se reúnan las juntas de coordinación política de ambas cámaras (Diputados y Senadores), se propondría un “acuerdo parlamentario” en la última sesión de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, programada para el 31 de este mes.

Según las reglas del proyecto de la Mesa Directiva, cuya copia posee EL UNIVERSAL, el presidente Calderón entregaría su Informe por escrito en el Salón de Protocolo del recinto de San Lázaro.

El documento no prevé que el mandatario haga uso de la tribuna, porque en su opinión, el artículo 69 de la Constitución “no precisa que el titular del Ejecutivo deba estar presente durante el tiempo que dure la sesión del Congreso General ni determina que deba hacer uso de la palabra ante el pleno”.

Tampoco hace ninguna referencia a la posibilidad de que se realice un debate entre el jefe de la nación y los legisladores, porque no está considerado en la ley, y es uno de los desajustes, señala, que se tendría que reparar dentro de los trabajos de la reforma del Estado.

Lo que sí subraya en su argumentación es que por ahora, “dadas las condiciones políticas en las que se desenvuelve la vida institucional de nuestro país”, es conveniente “adoptar un procedimiento transitorio que garantice la participación segura e institucional del Presidente de la República en ese acto”.

Las reglas propuestas por la Mesa Directiva de la Permanente, fundamentadas en el artículo 69 de la Constitución y en lo previsto en el artículo 7 de la Ley Orgánica del Congreso, precisan que el presidente Calderón sería recibido por una comisión de legisladores, en las puertas del edificio, y conducido al salón de Protocolo.

Vicepresidentes y secretarios de las cámaras, previamente designados, recibirían el Informe y le darían al Presidente o a la persona que éste designe el respetivo acuse de recibo.

Después, la misma comisión de bienvenida lo acompañaría hasta su automóvil.

Los vicepresidentes y secretarios se encargarían de avisar al pleno de que se ha cumplido con el mandato establecido en la Carta Magna.

El proyecto de la Mesa Directiva de la Comisión Permanente se pensó por un momento presentarlo en la sesión de ayer. No se hizo para dejar que evolucione el cabildeo entre los diversos grupos, con la esperanza de que se pueda llegar a un acuerdo el 27 de agosto.

De no ser así, el proyecto de la Mesa Directiva se discutiría y votaría en la sesión del 31 de agosto.

En entrevistas por separado, los panistas Santiago Creel y Héctor Larios expresaron su convicción de que el presidente Calderón Hinojosa haga uso de la tribuna el 1 de septiembre en San Lázaro.

Según ellos, es lo que ordenan las leyes y que las leyes deben ser cumplidas por quienes las hacen, los legisladores.

Carlos Navarrete y Javier González Garza invitaron a los medios de comunicación a que revisen el alcance de los resolutivos del Consejo Nacional del PRD, porque “hay una diferencia semántica entre no permitir y no aceptar” que el Presidente utilice la tribuna.

Pues francamente los perredistas deberían fajarse los pantalones y NO PERMITIR que el CEROTE CON PATAS se acerque a la tribuna de San Lázaro. HUEVOS, señores. Eso es lo que el electorado que les dio el triunfo en 2006 (y que el PAN les ROBÓ) quiere que muestren: que tienen los TANATES para hacerle frente a la USURPACIÓN de la presidencia.


Una razón más para apoyar al peje en el 2007.