PARA LA TRANSFORMACIÓN DEMOCRÁTICA DE OAXACA
PRESENTACIÓN
“Diálogos y Acuerdos para la Transformación Democrática de Oaxaca” es un instrumento político de propuestas ciudadanas que marca los compromisos y acuerdos mínimos que se requieren establecer para lograr avanzar en la transformación del estado. Esta iniciativa, impulsada por el Espacio de Organizaciones Civiles, señala los acuerdos fundamentales en los que habrá que coincidir para garantizar una verdadera convivencia democrática y participativa en Oaxaca; además, emana de un largo proceso de participación social y política de diversos actores en el estado, interviene en las discusiones actuales y va más allá de la presente coyuntura electoral.
Este documento –que retoma los contenidos centrales del Foro Nacional: Construyendo Democracia y Gobernabilidad y de la Iniciativa Ciudadana de Diálogo por la Paz, la Democracia y la Justicia celebrados en Oaxaca durante el año 2006– está dirigido principalmente a la sociedad oaxaqueña con los siguientes objetivos: a) Proponer acciones y mecanismos para aumentar la participación conciente de la ciudadanía en la construcción democrática de Oaxaca y b) Generar consensos entre distintos sectores y actores de la sociedad para lograr una “cooperación eficaz” que contribuya a la gobernabilidad democrática en el estado.
Esta acción está dirigida también a todas las personas que aspiran a ocupar cargos de autoridad, ya sea como concejales en los ayuntamientos o como legisladores en el congreso local con el objetivo de que hagan suyos los Diálogos y Acuerdos para la Transformación Democrática de Oaxaca y ejerzan la función pública apegada a las necesidades de la ciudadanía y en corresponsabilidad con ésta.
Con esta iniciativa, el Espacio de Organizaciones Civiles tiene el propósito de dar continuidad a un proceso participativo de análisis y reflexión sobre los principales temas de agenda para Oaxaca. Esto se realizará a través de foros de discusión y del establecimiento de diálogos horizontales con diversos actores sociales. Partimos de una aseveración clara, en Oaxaca no puede haber Reforma del Estado mientras no haya un cambio sustancial en las relaciones políticas. Es por ello que esta acción tiene como horizonte y como método la construcción de un poder ciudadano, la construcción de ciudadanía con derechos y responsabilidades en las decisiones de la vida pública de Oaxaca.
Oaxaca de Juárez, Oaxaca. Agosto de 2007.
Espacio de Organizaciones Civiles de Oaxaca.
CONTEXTO POLÍTICO
Oaxaca lleva viviendo, desde el 14 de junio de 2006, una crisis política sin solución, la cual se ha reavivado con los acontecimientos del pasado 16 de julio produciendo nuevas detenciones, torturas, agresiones graves que ponen en riesgo la vida de dos ciudadanos oaxaqueños. Esta crisis es resultado de una coyuntura histórica que deja al descubierto añejas problemáticas sociales, económicas y políticas, incubadas a lo largo de los años en nuestra entidad. Se manifiesta principalmente en la obsolescencia de las instituciones públicas y en el agotamiento de un marco jurídico-normativo diseñado para afianzar un régimen político autoritario.
Esta crisis también se manifiesta en la agudización de la pobreza y la desigualdad social. Es evidente que la excesiva desigualdad genera desequilibrios sociales profundos, debido a ello se acentúan las condiciones adversas que persisten en Oaxaca: denegación de justicia hacia los pueblos y comunidades indígenas, sistemática violación a los derechos humanos y garantías individuales, creciente desempleo que ahonda el fenómeno migratorio, violencia feminicida que se comete contra mujeres y niñas, criminalización de la protesta social, malversación de recursos públicos y destrucción del patrimonio cultural y natural de la sociedad oaxaqueña.
En la ciudadanía existe la percepción de que la acción gubernamental, lejos de enfrentar y resolver los problemas, contribuye a su incremento. Esto se debe, entre otros factores, al pésimo desempeño de la función pública por parte del gobierno, cuya labor se caracteriza por la falta de transparencia en el uso y manejo de recursos públicos, el enriquecimiento ilícito de algunos funcionarios y sus familias, y la ausencia de mecanismos de evaluación y control en el trabajo gubernamental.
Frente a este complejo panorama la ciudadanía exige una mayor participación en el quehacer público. Demanda actuar de manera informada en la toma de decisiones que le afectan. Sin embargo, la actividad pública en Oaxaca se ha reducido solamente al campo de la acción gubernamental, a la vez que la participación ciudadana no es tomada en cuenta en los asuntos de interés colectivo.
En este sentido, es importante reconocer que en la actual crisis por la que transita el estado, existe una pluralidad y diversidad de actores sociales y políticos que buscan lograr cambios y transformaciones de fondo para Oaxaca, así como proponer alternativas pacíficas de solución a la crisis y ofrecer respuestas públicas desde una perspectiva ciudadana. Hoy más que nunca la ciudadanía oaxaqueña se encuentra convencida de que la construcción de un estado democrático demanda la intervención comprometida de una ciudadanía fuerte.
LA TRANSFORMACIÓN DEMOCRÁTICA DE OAXACA
Partimos de la premisa que cualquier enmienda o cambio que se pretenda hacer en Oaxaca exige ante todo y como condición previa la transformación democrática del régimen. Es por ello que la Transformación Democrática de Oaxaca va más allá de los cambios legales que el gobierno ha anunciado a través de las Comisiones para la Reforma del Estado creadas ex profeso por el poder ejecutivo y legislativo.
Para una real y profunda Transformación Democrática de Oaxaca, es necesario impulsar acciones y mecanismos que aumenten la participación ciudadana, así también es importante generar y tejer acuerdos entre distintos sectores de la sociedad para contribuir, bajo un esquema político de “cooperación eficaz”, a fortalecer la gobernabilidad democrática.
Uno de los principales retos en el estado de Oaxaca es la construcción de una gobernabilidad democrática que se base en el fortalecimiento de la sociedad civil, en la consolidación de sujetos sociales pro-positivos y en la definición clara de un proyecto político democrático para el estado. Esta gobernabilidad atraviesa necesariamente por el marco de una nueva constitucionalidad, nueva participación social y nueva corresponsabilidad ciudadana.
Por ello se requiere básicamente de la construcción de acuerdos, así como del establecimiento de compromisos para poder avanzar en una verdadera convivencia democrática y participativa en el estado. Estos acuerdos tendrán que formularse en base a los temas prioritarios para Oaxaca, como son: Nueva Relación Gobierno-Sociedad, Respeto y Justiciabilidad de los Derechos Humanos, Bienestar y Vida Digna, Derechos a la Libre Expresión y Manifestación Pública, Cultura y Educación, Recursos Naturales y Territorio. La finalidad es que estos temas sean abordados desde una perspectiva de inclusión, equidad y de reconocimiento a la diversidad social, política y cultural en el estado.
En suma, urge impulsar cambios en Oaxaca, cambios en las relaciones políticas entre los diversos actores, cambios en los asuntos de carácter socioeconómico, cambios tendientes a generar mayor participación de la sociedad, cambios en la demanda de los derechos, cambios en la distribución del poder. Oaxaca requiere cambios de fondo, requiere de una auténtica transformación política y democrática.
ACUERDOS POR OAXACA
1. En Oaxaca se requiere construir acuerdos para establecer nuevas formas de gobernabilidad, en especial para democratizar la relación gobierno-sociedad. Esta relación habrá de fundarse en condiciones que aseguren participación ciudadana y respeto a los derechos humanos, así como en la necesidad de considerar la justicia distributiva como un imperativo ético y como un elemento indispensable para poder hablar de gobernabilidad como “ejercicio de autoridad orientado al bien común y al desarrollo”. No puede haber gobernabilidad donde existe injusticia social.
2. Ante la falta de credibilidad y la crisis de las instituciones, en nuestro estado es necesario una nueva institucionalidad y mejores prácticas de gobierno tanto en el ámbito estatal como en el municipal. En Oaxaca debe establecerse una efectiva división de poderes y adecuados equilibrios entre ellos, reconociéndoles plena autonomía y regulando adecuadamente las relaciones entre los diversos ámbitos de gobierno. El gobierno estatal deberá garantizar en la práctica la libertad municipal consagrada en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
3. En nuestro estado no podemos hablar de democracia plena sin respeto a los derechos humanos y garantías fundamentales de las personas. El estado deberá ser garante de la convivencia plural e incluyente de todos los grupos que forman la sociedad, además deberá establecer los mecanismos necesarios para la resolución no violenta de los conflictos sociales prescindiendo en estos casos del uso de la fuerza pública.
4. El marco normativo de Oaxaca debe basarse en el pluralismo jurídico que corresponde a la realidad pluricultural del Estado, que es el de mayor número y diversidad de pueblos indígenas de México. Igualmente, debe reconocerse en las leyes, en las instituciones y en la práctica social la autonomía de los pueblos indígenas, sus prácticas políticas, sus sistemas normativos internos y sus formas de convivencia.
5. Un acuerdo unánime para Oaxaca deberá ser el de garantizar la equidad de género y la igualdad entre hombres y mujeres en todos los espacios de la vida pública y privada, generando los mecanismos para erradicar toda forma de violencia feminicida y discriminación hacia las mujeres y las niñas.
6. En Oaxaca es indispensable la construcción de políticas que propicien el desarrollo, la sustentabilidad, la equidad y la competitividad de la economía a fin de generar empleos con plenos derechos. Las acciones de gobierno deberán estar orientadas a la búsqueda de la justicia social, haciendo que la política y la ética ocupen el centro de la vida colectiva y que las actividades productivas, económicas y comerciales sean ecológicamente sensatas y sustentables y socialmente justas y generen bienestar y prosperidad para todas y todos.
7. En materia social se hace necesario modificar la orientación de las políticas para pasar de las estrategias actuales de compensación individualizada, al desarrollo de las capacidades y al fortalecimiento del tejido y de la organización social haciendo frente a los nuevos problemas asociados a la crisis como la migración, el desempleo y la expansión urbana.
8. Se deberán propiciar cambios legales e institucionales en los medios de comunicación masiva, especialmente en el sistema estatal de radio y televisión, que garanticen plena libertad de expresión, aumenten la capacidad de expresión de los ciudadanos, valoren apropiadamente y respalden las experiencias comunitarias de comunicación social, se abran a las nuevas tecnologías y respeten la participación de la sociedad civil en su funcionamiento. Merecerá especial atención la diversidad cultural y la prevención de las actitudes racistas y sexistas.
9. El estado de Oaxaca posee un patrimonio natural enorme, único e insustituible, que corresponde a su gran riqueza cultural. Sin embargo, los cambios demográficos, económicos y sociales de las últimas décadas han causado graves daños tanto a la naturaleza como a la cultura en la entidad. Un nuevo acuerdo en Oaxaca respecto al patrimonio deberá garantizar un apropiado control ciudadano de las políticas y acciones tendientes a protegerlo y enriquecerlo.
10. Finalmente, en Oaxaca la educación y la cultura son dos elementos centrales para promover el respeto a la diversidad y la inclusión de todos los sectores sociales en el desarrollo. En este nuevo acuerdo la educación y la cultura serán condiciones indispensables para el crecimiento armónico del estado.
Oaxaca de Juárez, Oaxaca. Agosto de 2007.
Espacio de Organizaciones Civiles de Oaxaca.
YO TE NOMBRO LIBERTAD, CREANDO CONCIENCIA
VERONICA VILLALVAZO
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sábado, agosto 04, 2007
DIÁLOGOS Y ACUERDOS
Publicadas por Frida a la/s 9:56 p.m.
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