La fijación de El Universal con este blog

Si según las versiones periodísticas difundidas con excepcional entusiasmo a partir del lunes, las amenazas contra Ruth Zavaleta se han estado presentando desde el año pasado, ¿por qué es justo ahora cuando le dan tanta difusión a este asunto?

El Peje refrendó el domingo el carácter pacífico del movimiento, y frente a la mierda de los spots de odio, frente a la inmundicia vomitada por los medios de comunicación, frente a la estupidez de quienes, pelmazos sin criterio, ciegos y descerebrados, atacan a la resistencia civil, AMLO responde que el amor en su sentido más puro es el camino a seguir.

Esto enfurece a quienes viven, respiran y destilan odio y amargura; no soportan ver que en el movimiento hay alegría, convicción, AMOR. Por ello se dedican a atacar hasta de las maneras más absurdas y burdas posibles. Como por ejemplo retomando y magnificando un asunto que fue oportunamente denunciado y que se supone se investiga desde el año pasado, y "darle vuelo" en los medios como si se hubiera descubierto ayer.

El Universal fue el único medio que se atrevió a ir más allá y a *sugerir* "culpables" de las amenazas a Zavaleta: afirmó, sin probar, que los ataques provenían de El Sendero del Peje.

La fijación de Raymundo Riva Palacio, director de ese diario, con El Sendero, es explicable: Riva Palacio aún no logra superar el resentimiento, el rencor de haber sido CORRIDO de Milenio Diario por Federico Arreola, cuando este último era director editorial de ese periódico. Hoy, en su carácter de socio en el proyecto SDP, Arreola es atacado por Riva Palacio en cada oportunidad que se le presenta. Otra vez, el odio, el rencor y la bilis en el trasfondo del ataque al movimiento.

Pero ya que El Sendero ha sido mencionado, valdría la pena preguntarse por qué nadie ha retomado lo que en dicho blog se denunció públicamente también desde el año pasado: que las amenazas de muerte que han recibido políticos y otros personajes públicos a nombre de ese blog, o de sus colaboradores, en realidad provienen de muy bien identificados grupitos de panistas que, usurpando identidades, se dedican al vandalismo cibernético escudados en un anonimato (o semi) cobarde.

Cualquiera puede echar un vistazo en algunas páginas antipeje, en donde se han publicado llamados a enviar correos electrónicos con insultos y amenazas, a políticos, periodistas, y demás actores de la vida nacional, siempre en nombre de Víctor Hernández, o cualesquiera otros de los colaboradores del Sendero del Peje. En el chat de alguna de esas letrinas virtuales, con frecuencia algún imbécil entra a jactarse de que ya "le dieron su probadita de resistencia" a tal o cual destinatario de correo, y, entre risas idiotas, afirman que lo hicieron firmando como Pomponio, como Víctor, o como algún otro renegado. Y se congratulan de su "ingeniosa estrategia".

Los simios que publican en las páginas antipejistas no se limitan sólo a enviar correos electrónicos. En repetidas ocasiones han hecho todo lo posible por "ubicar" el teléfono o domicilio de algún renegado. Las amenazas de muerte en esos casos tampoco se hacen esperar.

Sería bueno que la diputada Zavaleta efectivamente interpusiera las denuncias correspondientes y se investigara a fondo el asunto. Porque entonces saldrían a la luz los nombres de esos panistas, esos sí perfectamente identificados, que no sólo envían correos apócrifos, sino que incluso llegan a extremos esquizofrénicos, como llevar a sus descerebrados borregos hasta la puerta del domicilio de un renegado, y esperarlo en el auto estacionado a la vuelta de la esquina, mientras el mini-facho toca la puerta de la casa en un intento -fallido- de amedrentar al susodicho.

Esos mismos orangutanes dementes, que entran a los foros de Internet a publicar mensajes usando los nicks de otros, confirman de esa manera que son tan pequeños e insignificantes que necesitan escudarse detrás de otros más grandes para darle sentido a su patética vida.

Esperamos las denuncias de parte de Zavaleta, aunque quizá esperemos en vano: esto es más ruido mediático que otra cosa.

Comentarios: renegadolegitimo@gmail.com