/tr>
LOS PRODUCTOS DEL BOICOT ¡NO LOS CONSUMAS!: Bimbo , Sabritas , Jumex , Pepsi, Gamesa , Televisa (televisión y revistas), TV Azteca , Milenio (Diario y Semanal), Banamex , Maseca , COPARMEX , Coca-Cola , Wal-Mart , Bachoco , Megacable , Farmacias Similares , M&M's , Kimberly Klark , Burger King , grupo ALSEA , Autobuses Estrella Blanca . Más en este link.

miércoles, marzo 01, 2006

AZNAR Y EL PANISMO: DOS NOTAS DE PROCESO DIGNAS DE LEERSE

Primero que nada este cartón de Naranjo que lo dice todo:




Luego DOS notas DOS que aparecen en la página de internet del semanario Proceso sobre Aznar y el panismo. Salen.

La primera: EL EFECTO AZNAR.

El efecto Aznar
cuauhtémoc arista

México, D.F., 28 de febrero (apro).- Logrado el pueril escándalo en nuestro medio político y una defensa innecesaria por parte de su país, el exjefe de Gobierno español, José María Aznar, continúa su labor propagandística internacional. Ahora llama a detener la “ola populista” que avanza en América Latina.

Seguramente el amigo de Bush y de Fox confía, como Enrique Krauze, en que pronto los mexicanos dejemos de ser “rehenes del pasado” y dejemos de ser tan especialmente sensibles a las gillipolleces de españoles respecto de los asuntos vagamente considerados mexicanos. ¿Para qué? Para que hagamos caso de las palabras de Aznar, por ejemplo.

Yo sí creo que debemos tomar en serio las opiniones de “el ciudadano Aznar” –como se le tildó en algún periódico--; porque es cierto que no vino como un extranjero intruso, sino para solidarizarse con un proyecto determinado, al que es afín, y el hecho de que le pagaran la conferencia no desvirtúa la lealtad esencial. Es que de algo tienen que vivir los intelectuales independientes.

No creo que ni a él ni a Bush los asuntos mexicanos les tengan sin cuidado, y qué bueno. Lo que no veo es la necesidad de que Calderón, Vázquez Mota y cuanto panista fue interrogado sobre el “vade retro” de Aznar contra López Obrador se deslinden de él. A menos que hayan caído en la cuenta, mientras firmaban el cheque para el ilustre intelectual y conferencista, de que ya le habían fabricado a Felipe Calderón el espantajo apropiado para compensar al de Hugo Chávez, que Fox le heredó a fuerzas a su enemigo perredista.

Pero si hay una afinidad real, ¿por qué avergonzarse de patrocinar sus sinceras declaraciones? Sobre todo, repito, porque han tenido consecuencias mayores que la abstracta intromisión en asuntos internos. De hecho, dos días después de la partida de Aznar, Calderón señaló que López Obrador tenía “nexos” con Kamel Nacif. Le faltó decir que también pertenecía a la ETA.

En verdad, me quedé esperando las grabaciones que lo demostraran, imaginando cómo sería el intercambio de acentos, el tabasqueño y el siciliano. Pero ya se sabe que las vías de comunicación oficiales andan lentas últimamente. Ojalá ya el personal del Cisen y de la delegación metropolitana de la PGR, estén reuniéndose con el exjefe Diego para corregir esa deficiencia, en un hotel donde no se pare Federico Arreola.

Por esa lentitud, nadie le ha dicho al presidente que puede apoyar legalmente a su candidato. Tan fácil que era evitarse esa suspensión de la Corte a una campaña oficial tan costosa y el consecuente arrugar los ceños de los dueños de las televisoras...

Aquí una consultoría gratuita: debieron echar a andar sus spots de “resultados” sin la presencia de Fox y con los titulares más panistas de las dependencias federales. Al mismo tiempo, el presidente hubiese aparecido en mensajes pagados por el PAN, junto a Calderón o solo, pero apoyándolo explícitamente. Eso no es ilegal y que la oposición pusiera el grito en el cielo (al fin allá el presidente tiene influencias). Pero, ojo, hacer eso en este momento sólo haría más evidente el error inicial y falta que Calderón quisiera cederle parte de su momentánea celebridad a un político tan goloso de tiempo al aire.

Por cierto, en esta ciudad tan insegura una duda me asalta: ¿cómo es que a los presidentes más mochos –que no religiosos— los desbordan con mayor frecuencia las más grandes mentiras? Lo digo por el mismo trío: Bush, Aznar y Fox. ¿O es que, como apuestan otros, se trata de una confusión sobre la naturaleza de la mentira y la verdad? En todo caso, siempre les ha resultado conveniente tergiversar o maquillar los datos, o bien dorar criminalmente la píldora, como en el caso Irak, 11-M y de la tragedia en la mina Pasta de Conchos, que le sirvió al secretario del Trabajo para “acercarse a Dios”. O como la indiferencia de Aznar ante el asesinato de un periodista español por un tanque estadunidense.

En el caso de Calderón, resulta curioso cómo tras salir con la foxiada de sacarle al gobernador de Puebla, Mario Marín, una “tarjeta roja” para expulsarlo del juego del poder priista y panista, intentó endilgarle la misma cosa a López Obrador, pero como decía, el espía mágico no cerró la pinza. Bien señala Denise Dresser que si el perredista llega a la Presidencia, se lo deberá más a sus adversarios que a su propia campaña (y no creo que lo diga sólo por Jesús Ortega).

Por lo pronto, otra consultoría gratuita para Calderón. Para quitarse ese estigma de ser el candidato oficial, Labastida reloaded pues, puede documentar el carácter clandestino de su movimiento con imágenes de su mitin en Chihuahua. Al fin dice Manuel Espino que las plazas llenas no votan (o por lo menos no tanto como las vacías, hay que aclarar).Ya será problema de los encuestadores de Ipsos-Bimsa documentar sus estudios de preferencia electoral auspiciados por un “patrocinador sindicado” que incluye “partidos políticos y dependencias públicas” y en los cuales Calderón empató ya, desde hace rato, al Peje. A estas alturas ya debe llevarle incluso una considerable ventaja.

Ese avance espectacular se, debe tal vez, a que Calderón, con Francisco Barrio sonriendo junto a él, prometió justicia para las familias de las mujeres asesinadas en Ciudad Juárez, o en su nueva propaganda televisiva donde la arrebata a Madrazo su genial idea de presentar como compañera de fórmula presidencial a su esposa, que luce una sahagunesca afabilidad, aunque son mejor conocidos desde ahora sus muchos parientes políticos, es decir, parientes consanguíneos que se dedican a la política. Pero nada que haga sospechar nepotismo, claro que no.

Que no se preocupe tanto, pues, el excelentísimo señor Aznar. El populismo va a la baja. Ya ve, hasta su principal exponente en México, el presidente Fox, comienza a vomitarlo, aunque hace años apenas lo exudaba.


La segunda: PAN, la ley a conveniencia

PAN, la ley a conveniencia
Álvaro delgado/ apro

México, D.F., 27 de febrero (apro).- El artículo 33 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos es tan claro que no admite interpretaciones: “Los extranjeros no podrán de ninguna manera inmiscuirse en los asuntos políticos del país”.

Tampoco hay confusión en las expresiones proselitistas del exjefe del gobierno español, José María Aznar, a favor de Felipe Calderón, el candidato del PAN, el 21 de febrero, en la propia sede de este organismo:

“Espero, deseo, que Felipe Calderón sea el nuevo presidente de México, por el bien de los mexicanos y por el bien de este país.”

Tal disposición constitucional, que es nítida, podrá no ser del agrado de muchos mexicanos y aun de extranjeros, pero está vigente y, como todo el andamiaje constitucional y legal, debe ser respetado o la Secretaría de Gobernación debe proceder contra quienes lo violenten.

Lamentablemente no es así, y menos lo ha sido por parte del PAN, cuya fundación institucional “Rafael Preciado Hernández” invitó a Aznar a sustentar una conferencia en la que claramente se inmiscuyó en “asuntos políticos del país” para delicia de la dirigencia de ese partido.

Tan repugnante es el involucramiento del chavismo con el Partido de la Revolución Democrática (PRD), y al revés, como el insolente llamado de Aznar a favor de Calderón, independientemente de que le ayude o no para avanzar en la conquista del voto.

Se trata de un asunto de legalidad, y el partido que dice enarbolarla, el PAN, la desprecia por cálculo político, y todavía su dirigente, Manuel Espino, declara ufanamente que no ha “lloriqueado” por la relación política de miembros del PRD con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, y sus personeros.

Pero, en realidad, el PAN sí chilló cuando se produjo el altercado con Chávez, y el embajador de Venezuela, Vladimir Villegas, fue expulsado por el gobierno de Vicente Fox. Ahora, la Secretaría de Gobernación envió, tímidamente, un comunicado al PAN, para recordarle a sus invitados que se apeguen al marco legal.

Se trata de una conducta del PAN y del gobierno foxista no sólo hipócrita, que de eso hay muchas muestras, sino desafiante inclusive de su doctrina e historia.

Felipe Calderón no se cansa, en su campaña, de poner en el primer lugar de los problemas nacionales el escaso respeto a la legalidad, pero él mismo se ha sumado a su partido y a su gobierno al disimulo, inadmisible –insisto--, tratándose de quien se quiere diferenciar en ese aspecto sustantivo de sus adversarios, Andrés Manuel López Obrador y Roberto Madrazo.

Otro episodio funesto de la hipócrita conveniencia es la conducta que el secretario de Gobernación, Carlos Abascal, tiene sobre la participación política de los ministros de culto, particularmente los católicos, en la vida política del país y las expresiones de su fe religiosa, respetables como ciudadano, pero no como responsable de cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes.

La conducta facciosa de Fox y miembros de su gobierno también ha sido subrayada por pensadores tan lúcidos como Enrique Krauze, quien este domingo 26 reseñó en el diario Reforma varias de esas incursiones, y relató un episodio que le tocó vivir:

“A estas manifestaciones públicas de amor y fervor, siguieron otras, nada divertidas, que publicó la prensa sobre la influencia en los Pinos del oscuro grupo ultraderechista ‘El Yunque’. Alguna vez me tocó atestiguar la calidad moral de uno de esos personajes encumbrados, muy próximo al presidente. En un desayuno me dijo, ya en confianza: ‘En Los Pinos trata uno todo tipo de gente extraña, hasta judíos.’ Admiré su tolerancia al compartir conmigo el pan y la sal.”

Tal cual.

Apuntes

No es admisible la violencia bajo ninguna circunstancia, menos cuando los mexicanos debemos robustecer el empeño por encauzar la pluralidad mediante la discusión respetuosa, por más encendida que parezca o sea. Por eso no debe verse como normal el zarandeo, la agresión, al secretario del Trabajo, Francisco Xavier Salazar Sáenz, por el familiar de uno de los 65 mineros muertos en la mina de Coahuila. La tragedia, que acredita una vez más la profunda iniquidad social y la irresponsabilidad e insensibilidad gubernamental y empresarial, no debe desencadenar otra…

En el empeño por demostrar que Calderón crece en las encuestas, aunque no entusiasme a sus auditorios con una garganta cada vez más maltratada, Francisco Ortiz Ortiz, el responsable de imagen de la campaña del panista, mandó publicar este domingo un desplegado con cifras de algunas de ellas. Pero algo evidencia que haya escrito “otra ves” (sic) en lugar de “otra vez”.


Es precisamente por esto que fecal ya no sabe ni donde esconderse cuando le echan en cara la injerencia de Aznar en los asuntos internos de México. A pesar de que Aznar dio una conferencia en las oficinas del CEN del PAN, acompañado por el presidente del PAN Manuel Espino, y a pesar de que Aznar dijo con todas sus letras que votaran por fecal, ahora sale fecal con que se deslinda. ¿Qué sigue? ¿Que también se deslinde del PAN? ¡Por favor!

Una razón más para votar por el peje en el 2006.

No hay comentarios.: