Hay que leer completo este editorial de Jorge Eugenio Ortiz Gallegos, que aparece en la edición de hoy del Universal, y en el que se detalla como empezaron a darse las concertacesiones entre el amasiato PRIAN; las ilegalidades arregladas en lo oscurito, y los amarres entre el PAN y Salinas que continuaron hasta el sexenio de Fox:
Jorge Eugenio Ortiz Gallegos
18 de enero de 2006
El PAN, promesas vanas
EL Partido Acción Nacional ha declarado que su mayor propósito en caso de llegar a asumir la Presidencia de la República en sustitución de Vicente Fox es preocuparse por el cumplimiento de la ley, por encima de cualquier otra prioridad. Se señala que gran parte de los males que nos aquejan en México son sistemáticamente construidos para que en su uso puedan encontrarse muchos pretextos o salidas, y sea inútil la aplicación del derecho.
En el capítulo denominado "Democracia" de la Proyección de los Principios de Doctrina aprobados en la 18 Convención Nacional de mayo de 1965, puede destacarse este párrafo: "Todo régimen democrático debe respetar, promover y garantizar mediante procedimientos electorales imparciales y objetivos, la expresión y representación de las minorías, los derechos del ciudadano para intervenir en el proceso de integración del gobierno."; y en el capítulo sobre el "Estado" se demanda: "La supremacía que de hecho ejerce en México el Ejecutivo federal sobre los demás poderes federales y estatales, resta a todos dignidad y eficacia y rompe el fundamento de la organización democrática federal. El cumplimiento de un programa de gobierno para bien de la colectividad no debe fincarse en el predominio que se mantiene a favor del presidente de la República, sino en el recto ejercicio de las funciones de cada uno de los poderes, con el mutuo respeto que tienen obligación de guardarse".
Hace casi 20 años las dirigencias del PAN, concretamente desde el año 1987, echaron por la borda la existencia de principios aprobados por las asambleas constitutivas. El que fuera alcalde de León por triunfo del PAN, Carlos Medina Plascencia, al iniciar su campaña aspirando a ser el jefe del partido, reveló el que fue llamado "Pacto PAN-Salinas", y por tanto los entretelones de la concertacesión en 1991: por 10 años a partir de 1991 tales negociaciones entre la dirigencia panista y el presidente Carlos Salinas de Gortari fueron negadas y ocultadas por los altos dirigentes del Partido Acción Nacional.
Carlos Medina Plascencia hizo la siguiente declaración tajante: "No se entiende el México del 2 de julio de 2000 sin el Guanajuato de 1991". Recordemos los hechos: El ex gobernador interino de Guanajuato quiso convertirse en el presidente nacional del partido en 2001. Los opositores de Medina Plascencia fueron también del estado de Guanajuato, que postulaban a Felipe Bravo Mena, que era entonces jefe del partido y pretendía reelegirse. Con ese motivo Medina Plascencia se presentó con la verdad en la mano revelando los acontecimientos de 1991.
Se habían celebrado elecciones para la renovación de la gubernatura del estado y se dio el triunfo a Ramón Aguirre, priísta de larga trayectoria que había sido regente de la ciudad de México. Según Medina Plascencia, los protagonistas de los arreglos con Salinas fueron: el jefe del PAN nacional, Luis H. Álvarez, y Vicente Fox, el candidato oficialmente derrotado.
Por la mañana del miércoles 28 de agosto de 1991, Medina habló con Vicente Fox en el aeropuerto capitalino y se entrevistó más tarde con el director del Programa Nacional de Solidaridad (Pronasol), Carlos Rojas, en Palacio Nacional, y la firma del acuerdo se concretó en el restaurante Vips del Toreo de Cuatro Caminos, en la zona que divide el Distrito Federal y el estado de México.
Al día siguiente Medina Plascencia se entrevistó con Salinas en Los Pinos sellando el pacto. Increíblemente Ramón Aguirre renunció a la gubernatura, de la que ya había tomado posesión y pasó a ser gobernador interino Carlos Medina Plascencia, dejando a Vicente Fox, como diría el pueblo, con "un palmo de narices". Al mismo tiempo el candidato segundo después de Fox, Felipe Bravo Mena, dijo que no tenía nada que ofrecer y consideraba correcto el camino abierto para Carlos Medina Plascencia.
Por 10 años aparecía de vez en cuando en los periódicos la cabeza en primera plana: "El PAN siempre negó que en Guanajuato hubo una negociación cupular". La noticia extraña había sido hecha en 1991: Ramón Aguirre viene volando de Guanajuato a la ciudad de México, porque ha tomado la decisión más difícil de su gobierno y no rendirá protesta. Al mismo tiempo nadie comentó la derrota de Fox y nadie anunció que no volvería a ser candidato.
Por la conversación revelada, Carlos Medina se encontró en la mañana del miércoles 28 con Vicente Fox en la cafetería del hotel Fiesta Americana del aeropuerto de la ciudad de México:
-Necesitamos que le entres -le planteó Fox.
-¿Qué le entre a qué?
-Al interinato.
-Vicente, ¿cómo le vamos a entrar con un Congreso con mayoría del PRI.
Y Fox remató:
-No sólo eso. El secretario de tu gobierno tiene que ser del PRI.
Medina Plascencia replicó:
-Oye, pero tú, ¿cómo estás? Tú eres el que luchaste por esto. ¿Yo qué vela tengo en este entierro?
Y remató Vicente Fox:
-Es que no nos queda de otra, y no hay mucho qué pensar. La liebre (el PRI) la tenemos sujeta de las orejas, pero todavía está vivita, todavía se le mueven las patas. Necesitamos que le entres.
¿Quién garantiza que las ofertas de ahora incumplidas durante cerca de 20 años sean de algún modo cumplidas por el Partido Acción Nacional, que no ha podido ni siquiera proceder a censurar o encarcelar a docenas de funcionarios electos por el PAN que se están enriqueciendo con los dineros del pueblo?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario