Antes que nada quiero comentar sobre esta foto que publica El Universal de Martarita Zavala en Palacio Nacional ayer que el ESPURIO fue a poner su cara de pendejo por que a un año de haber USURPADO la presidencia no ha hecho NI MADRES--salvo el ridículo, es decir.
No me lo estoy imaginando: Martarita Zavala se ve RUCA, demacrada y subida de peso. Cosa que resulta inexplicable si consideramos el hecho de que ella no ha tenido que lidiar con asuntos de política nacional. Lo cual me lleva a prguntarme: ¿No será más bien que el aguantar las borracheras de fecal ya la tienen HASTA LA MADRE y ese hartazgo ya se le está manifestando fisicamente?
Digo, es pregunta.
Seguimos con una nota que demuestra lo que publica Álvaro Delgado en su libro El Engaño: Prédica y Práctica del PAN; que el PAN tiene tantas broncas internas que es el partido que más casos tiene en el TRIFE por transas entre ellos mismos. Germán Mentiras, por cierto, dice que "eso se tiene que acabar", que lo que en realidad quiere decir es que Germán Mentiras lo que quiere es que los militantes del PAN acepten la línea de Los Pinos y se callen el hocico aunque les impongan candidaturas desde Los Pinos. Aquí la nota:
Liderazgo marcado por desencuentros
El día que ganó la dirigencia del PAN, Manuel Espino dijo que buscaría no dividir a los militantes. Casi tres años después su sucesor Germán Martínez reconoce: “¡Somos el partido con más conflictos en el Tribunal Electoral!”
LILIA SAUL
El Universal
Domingo 02 de diciembre de 2007
lilia.saul@eluniversal.com.mx
Distanciamiento con el gobierno federal, fracasos electorales, conflictos internos en la militancia panista y contrasentidos diplomáticos a nivel internacional fueron algunos de los hechos que marcaron la gestión de Manuel Espino Barrientos al frente de la dirigencia nacional del PAN y que motivaron que finalmente este panista no buscara la reelección por tres años más.
El día que ganó la elección para dirigente nacional, Espino Barrientos dijo en su discurso de toma de protesta que buscaría no dividir a los militantes. Casi tres años después, los números arrojarían lo contrario y el mismo Germán Martínez, ahora próximo dirigente nacional del PAN, lo demostró con cifras: de noviembre de 2006 a septiembre de este año los panistas promovieron 884 juicios de protección de derechos políticos ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). Los perredistas sólo 206 y el PRI 96.
“¡Somos el partido con más conflictos en el Tribunal Electoral, y eso se tiene que acabar!”, exclamó Martínez Cázares al registrarse como candidato a la dirigencia nacional.
Después de la competencia interna en la que resultó triunfador Espino Barrientos, éste dejó a su paso a varios candidatos derrotados, pero el que más pesó —por ser cercano incluso al ahora presidente de México, Felipe Calderón—, fue Carlos Medina Plascencia.
Además de los conflictos internos entre diversos “tonos azules” del PAN —como nombra a los diversos grupos panistas el mismo Germán Martínez—, Espino Barrientos denotó que su candidato a la presidencia de la República no era Calderón, sino Santiago Creel, según panistas consultados. Esto generó que algunos se sintieran ofendidos por obligar a Calderón a continuar con las rondas que algunos consideraron “innecesarias”, pues ya era ganador de la contienda interna. El 2 de octubre de 2005 ganó Calderón la interna panista.
Después de que Felipe Calderón logró ser ratificado por parte del TEPJF en su triunfo como presidente de México, al interior del PAN se inició una “burbuja” que parecía convertirse no en un partido en el poder, sino de un verdadero partido de oposición.
De acuerdo con analistas consultados, como Juan Luis Hernández, académico de la Universidad Iberoamericana, el PAN no logra comportarse como partido en el gobierno.
Ricardo Raphael, analista político, señaló que su impresión en este año es que el PAN estuvo al mando de algunos “radicales”, pero éstos fueron derrotados luego de la Asamblea Nacional panista. “Los radicales están derrotados. Creo que Calderón pertenece a la corriente demócrata cristiana del PAN, yo lo veo más de centro, más liberal que conservador, y mi impresión es que en el Consejo pasado Calderón acabó de tomar fuerza, Espino claro está que perdió capacidad de negociación y Calderón tiene a su partido mayoritariamente detrás de él. Los extremos están cayendo, este país se está moviendo al centro”, dijo.
Inician los desencuentros
El 17 de diciembre de 2006, Espino Barrientos aseguraría que “a título personalísimo” no estaba de acuerdo con el impuesto de 5% aprobado en comisiones de la Cámara de Diputados para los refrescos y aguas carbonatadas. “Ojalá y ese impuesto fuese menor o no hubiese necesidad de establecerlo”, afirmó.
Analistas políticos lo tomaron como el primer gran desencuentro entre partido y gobierno pues la propuesta venía de Los Pinos.
Luego, el 30 de enero de 2007, el presidente Felipe Calderón desaprobó las declaraciones de Manuel Espino, quien criticó la actuación del jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, contra el terrorismo.
Calderón dijo, sin citar al panista: “Sin entrar en particularidades lamento el señalamiento en ese sentido; respeto las opiniones de todos, pero clara y contundentemente reconozco y respaldo la lucha y responsabilidad del gobierno español en este tema”.
Y es que un día antes fue publicada una entrevista de Espino Barrientos en el diario español La Razón, donde señaló que con los terroristas no se negocia, como lo hizo José Luis Rodríguez Zapatero. En esos días ya se hablaba de un enfrentamiento entre gobierno y partido. Y es que no era para menos. En esos días, Espino invitó a cuatro ex secretarios de Estado a formar parte del CEN panista, lo que fue considerado como un “gabinete de sombra”. También fue invitado el ex presidente Vicente Fox a la inauguración de la sede de la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA), lo que se tomó como un protagonismo innecesario.
La intervención del gobierno federal
El 28 de marzo, el CEN señalaba que militantes se quejaban de presuntas intervenciones de funcionarios del gobierno federal en el proceso para renovar el Consejo Nacional. Según el secretario de Fortalecimiento Interno del PAN, Enrique Navarro Flores, había denuncias en varios comités municipales de que recibieron llamadas de la Secretaría de Gobernación para verificar el curso del proceso.
Gobernación negó la acusación del CEN y dijo que las declaraciones “lesionaban” a las instituciones de la República. Pero sería el 2 de junio cuando se detonarían las inconformidades en la Asamblea Nacional, donde, de pronto, una parte de la gran nave azul, sede de casi 10 mil delegados panistas, tronó contra su líder nacional, Manuel Espino.
En tierra del ex presidente Vicente Fox, las tarjetas color rojo con un “NO”, destinadas a emitir un voto negativo, fueron mostradas a Espino durante su discurso. Además, no faltaron los abucheos. Un momento de bochorno para el panismo, denunciarían después personajes como Javier Corral, Diego Fernández, Santiago Creel, Elena Álvarez.
Y aún faltaba Venezuela
El 24 de julio Espino Barrientos le envió una carta al presidente de Venezuela, Hugo Chávez, en la que le hizo un llamado para que respete la libertad de expresión y el libre flujo de pensamiento, “toda vez que es sobre la base de la tolerancia y respeto a este derecho universal que se construyen las verdaderas sociedades democráticas”.
La misiva la envió como líder nacional del PAN a nombre de los integrantes de la ODCA, de la cual Espino Barrientos es el presidente nacional. Ese hecho fue tomado a mal por el Consejo que integran, entre otros, el senador Ocejo, pues no debía propiciar conflictos internacionales cuando Calderón buscaba tender puentes entre Venezuela y Cuba.
La cuestión electoral
Finalmente, aunque se ufana de haber conseguido por segunda ocasión consecutiva la Presidencia de la República y la mayoría en el Congreso de la Unión, en comicios locales tuvo bajas sensibles.
En 2007 el PAN fue derrotado en Yucatán, Aguascalientes y Michoacán. Y en el resto de los estados hubo retrocesos, a excepción de Baja California, donde ganó el gobierno, la capital y cuatro ciudades más. En Tamaulipas y Puebla el PAN tuvo retrocesos, mientras que en Tlaxcala ganó. En meses anteriores, en Zacatecas, el PAN ganó la capital del estado.
No puede uno evitar notar que resulta completamente inexplicable que el partido que dice que ganó las elecciones presidenciales de 2006--cosa que solamente ellos se la creen--pierda tan estrepitosamente en la abrumadora mayoría de las elecciones en las que participaron a partir del 2 de Julio de 2006. Y la única que se supone que ganaron, la de Baja California, de pilón fue impugnada y estuvo a un tris de que la anularan por las irregularidades que cometieron los panistas y los mapaches de la mamá de chucky y por la intervención ilegal del gobernador panista Eugenio Elorduy.
Más bien lo que esto demuestra es que NO ganaron las elecciones de 2006 y que, por el contrario, cada vez menos gente quiere votar por el PAN por que saben la clase de RATEROS, CORRUPTOS y ASESINOS que son.
Ah, y una corrección para Ricardo Raphael: Fecal no es de centro. Es de la más añeja derecha neoliberal PRIISTA. Su método para lograr simpatías es simple y sencillamente COMPRAR a la gente con dinerito y con huesos. Fecal dejó de ser panistas desde 2005 que le hizo fraude a Santiago Creel y se convirtió de plano en priista salinista.
Por cierto que esto de que fecal ha estado comprando voluntades al más viejo estilo del PRI lo balconea el propio Manuel Espino en entrevista para el Reforma:
Acusa Espino sabotaje
El panista acusó que los calderonistas ofrecieron cargos públicos y vetaron posibles consejeros para llegar a la dirigencia del partido
Ernesto Núñez
Ciudad de México (2 de diciembre de 2007).- A cinco días de dejar la dirigencia nacional del PAN, Manuel Espino acusó a funcionarios cercanos al Presidente Felipe Calderón de sabotear su gestión y utilizar el Gobierno para llevar a Germán Martínez a la dirigencia partidista.
Señaló que, en elecciones locales recientes, como Yucatán, Puebla y Michoacán, panistas allegados al Mandatario "echaron a perder" muchas estrategias del Comité Ejecutivo Nacional de Acción Nacional.
"Afortunadamente, quien va a ser sin duda el presidente del partido, Germán Martínez, ha dicho que hay que hacer una evaluación a fondo de qué pasó en esos procesos electorales. Bueno, yo sé qué pasó y estaré presente en esa evaluación.
"Ya llegarán los tiempos del debate. Esos temas no pueden sepultarse; tienen que estar en el debate de la institución para aprender de esas experiencias, y que no se vuelvan a repetir acciones ni sabotajes como los que hemos vivido recientemente", expuso en entrevista.
El aún líder panista denunció que los calderonistas, en su estrategia para ganar la dirigencia el próximo 8 de diciembre, ofrecieron cargos públicos, vetaron posibles consejeros, e incluso, presionaron a quienes ya ocupaban una posición en el Gobierno federal.
Por ello, dijo, adelantó su salida sin buscar la reelección.
"Es la primera vez que hay un esfuerzo para que el Consejo Nacional se integre a modo de un proyecto concebido de antemano.
"Yo no lo llamaría gubernamental; lo llamaría, simplemente, irregular, pero en el que sin duda hay la mano de personas que, estando en el Gobierno, usaron la fuerza de esa posición para inducir la integración del Consejo".
Espino deja la dirigencia con un saldo electoral negativo: de las 37 elecciones que se celebraron durante su gestión (de marzo 2005 a diciembre 2007), el PAN obtuvo resultados adversos en 24, y perdió 2 gubernaturas que tenía en su poder: Nayarit y Yucatán.
Además, registró una nueva marca para el PAN: la del ser el partido con más controversias en el Tribunal Electoral del Poder Judicial. En el último año acaparó el 77 por ciento de los conflictos intrapartidistas que llegaron a esa instancia.
Espino defendió su actuación, y aseguró que Calderón ha sido el candidato presidencial de Acción Nacional que más apoyo ha recibido de su partido.
La pregunta es inevitable: si eso se hacen entre ellos, y si Espino llama IRREGULARES a las mañas de fecal, ¿Entonces por qué insisten en que no hubo fraude electoral en las elecciones presidenciales de 2006? ¿Es que a caso los panistas nomás se hacen fraude entre ellos pero ni lo intentan con el resto de los partidos? ¿Eso es lo que nos quieren hacer creer? Digo, o sea... Favor de no mamar.
LOS VIOLENTOS Y LOS RAJONES
Hay algo que de plano me encabrona de esta nota del Universal. Ruth Zavaleta dice que algunos esperaba que se cacheteara a Jorge Zermeño y que le arrebatara la banda presidencial al PELELE, y que considera injusto que la juzguen por no haberlo hecho. Pero mientras tanto la panista Violenta--digo--Violeta Lagunes, que le aventó una lata de soda y botellas de agua a un diputado panista dice que no se arrepiente.
¿Por qué entonces Ruth Zavaleta, que le pudo haber puesto una SUPER-MADRIZA al ESPURIO y dejarlo patas pa'rriba antes de que USURPARA la presidencia poniéndose la banda presidencial, considera injusto que la juzguen por no haberlo hecho?
Peor parado quea el Güero González Garza (quien seguramente luego de leer esto imprimirá este post para ir a mariquearle al Peje por que lo volvimos a balconear). No se le notó intención alguna de defender la tribuna. Mucho menos con su declaración mamerta esa de que Ruth Zavaleta no era niña héroe.
En fin. El desaguisado en esta nota:
Persiste el recuerdo de violencia en San Lázaro
Andrea Merlos y Ricardo Gómez
El Universal
Domingo 02 de diciembre de 2007
andrea.merlos@eluniversal.com.mx ricardo.gomez@eluniversal.com.mx
Un fantasma recorre San Lázaro. Es el fantasma del 1 de diciembre de 2006, el recuerdo de un capítulo en la vida política nacional con heridas, sentimientos encontrados, pactos políticos no concretados y una imagen del Congreso entre golpes e insultos, unos por impedir la toma de protesta de Felipe Calderón, y los otros por lograrla a toda costa.
Ruth Zavaleta (PRD), presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara Baja, se dice convencida de que debieron evitar que el presidente Calderón no entrara al salón de plenos para tomar protesta, “pero eso se iba a lograr negociando, con acuerdo, y pues no”.
Recuerda que su coordinador, Javier González Garza, le dijo que se bajara de la tribuna “que no era niña héroe” semi tomada por PAN y PRD, cuando ya era inevitable el ungimiento de Calderón.
Ella siempre esperó un acuerdo, dice. Sin embargo, también tuvo dudas de hacia dónde iba el movimiento de resistencia, lo único seguro es que no querían que la toma de protesta fuera en el salón de plenos. No supe, dice, si de verdad íbamos a negociar o íbamos a una lucha que terminó como terminó: perdiendo.
Considera injusto que la critiquen porque se bajó de la tribuna tomada en el último momento, “porque para algunos yo tenía que darle una cachetada a Jorge Zermeño (panista, ex presidente de la Mesa Directiva) y arrebatarle el bando presidencial a Felipe Calderón”.
Esos días aciagos son recordados por diferentes actores. Entonces, el diputado del PAN, Manuel Minjares, fue el enlace vía telefónica con Los Pinos, a través de Juan Camilo Mouriño, secretario particular del presidente Calderón.
Con Margarita Zavala, esposa del presidente Calderón, las diputadas panistas se mandaban mensajes de apoyo por teléfono celular durante la refriega por la tribuna.
A pesar de que se negoció no meter armas ni objetos que dañaran la integridad de los legisladores, varios recuerdan que el diputado del PAN Óscar Mohamar Dainitin fue quien roció con gas lacrimógeno a varios perredistas en plena pelea campal.
Violeta Lagunes, diputada del PAN por Puebla, es recordada por la imagen en que aventó una lata de refresco y cinco botellas de agua para evitar que el perredista Víctor Varela subiera a la tribuna.
“No me arrepiento”, dice. Rememora que convivió tres días con las perredistas, una incluso le agredió en un seno.
Valentina Batres, del PRD, fue una de las diputadas más aguerridas de esa fracción cuando inició el enfrentamiento a golpes, y a un año reprocha que los senadores del PRD no cumplieron su encomienda de bloquear la entrada del salón ubicado atrás de la Mesa Directiva, por donde ingresó Calderón al recinto parlamentario para tomar protesta.
A lo mejor por eso es que a los Nalgaizquierdos y demás perredistas "modernos" (o sea nalguiprontos y vendidos) les caga la RCP; por que la RCP muestra los TANATES que los perredistas agachones--como González Garza--no han querido tener.
DEJAN PLANTADO AL PELELE CASI LA MITAD DE LOS INVITADOS
Para que se den una idea de quien le fue a aplaudir (por obligación, que no por gusto) al CEROTE CON PATAS en su primer año de USURPACIÓN. 240 invitados de plano lo dejaron plantado:
Crónica
Festejo de ausentes en palacio
Ni poderosos empresarios, como Slim, ni líderes de oposición... Unos 200 lugares sin llenar en el primer aniversario del gobierno de Calderón.
Dieron las once en el Palacio Nacional, el momento para el único discurso de celebración por el primer año de Felipe Calderón como presidente, y los miembros de su equipo de logística se resignaron a que no llegaran alrededor de 240 invitados.
Esas ausencias (150 en el costado noreste del patio central y 90 en el otro lado) dieron pie para interpretar los vacíos políticos de quienes ostentan representaciones de Estado y no llegaron a un festejo que se presumió de recuperación de gobernabilidad.
Las sillas vacías seguro eran para invitados en listas que no pudieron, o no quisieron, llegar. Pero tampoco estuvieron otros que, en tiempos de presidentes priistas, eran interlocutores invitables y que disputaban un lugar.
Por ejemplo, los que representan a otros poderes. Sí se notó a Guillermo Ortiz Mayagoitia, presidente de la Corte, porque estuvo en la mesa de Calderón, pero no a más miembros destacados del Poder Judicial. Tampoco del Legislativo se vieron miembros notables de las bancadas que no fueran los del PAN. Otra vez el vacío de Ruth Zavaleta, la presidenta de la Cámara de Diputados, cuya representación quiso ocupar el panista Cristian Castaño, y de líderes de los ocho partidos. Las miradas y las cámaras sólo encontraron a los salientes Manuel Espino y José Espina.
De otras correas del poder federado, por ejemplo de los 32 gobernantes de las entidades, se vieron muy pocos: los de Tabasco, Guanajuato, Nayarit, Campeche, Durango, Sinaloa, Morelos y San Luis Potosí. Se notaron poco. Se mencionaba, sin confirmarlo, que llegaron los de Yucatán, Querétaro, Tlaxcala y Baja California Sur.
Y, como de poder se trataba, contrastaron las ausencias de los liderazgos empresariales, como el de Carlos Slim, o de los presidentes de las cámaras o de los banqueros, porque sólo paseaba Claudio X. González. Igual que el más notable de los líderes sindicales era Carlos Romero Deschamps, resaltaba la ausencia de otros grandes del Congreso del Trabajo o de la UNT o de la burocracia. Incluso nadie vio a la mandamás del SNTE, Elba Esther Gordillo, ni a los principales líderes de campesinos, ni a los destacados de organismos no gubernamentales, ni a intelectuales. Ausencias que pesan.
Era muy ligero, para un Estado fuerte, el paisaje dominante: un frente de secretarios, subsecretarios y otros mandos del Ejecutivo; de invitados de recursos económicos ostensibles en la ropa; de muchos guías de cultos, pero destacado sólo Onésimo Zepeda, el infalible obispo de Ecatepec; de deportistas politizados (Ana Gabriela Guevara, Iridia y Óscar Salazar, Alejandro Cárdenas, Roberto Alvez, Zague).
Los presentes parecían muy cercanos a este gobierno, como pudo constatarlo Calderón durante los 25 minutos que duró su paseíllo de saludar, mirar a los ojos y sonreír alegre, antes del desayuno.
Pero, la alegria colectiva y abierta también estuvo ausente. No hubo vítores ni jolgorio ni bailes ni cantos. Sólo pudieron registrarse tres tímidos aplausos, durante los 32 minutos de recuentos del Presidente, cuando agradeció a los legisladores de su partido por aquel 1 de diciembre, a su esposa Margarita Zavala, “por ser el gran apoyo y fortaleza personal, y a sus hijos, por comprender “el tiempo que no les dedico”.
Quizá todos compartían la misma herida abierta del momento traumático de hace un año, cuando la difícil asunción a la Presidencia, como lo reflejó Calderón al referirlo ocho veces.
La misma celebración no tuvo el boato que otros presidentes han ostentado: en alimentos fue un menú michoacano de huchepos, corundas y semitas de piloncillo. No se oyó música festiva para baile, sino de piano suave que arrancó con Bésame Mucho, al parecer sin más intención que amenizar.
Igual, Calderón no presentó sorpresas en su discurso de celebración. El recuento de obras y proyectos —testificaban los reporteros de la fuente presidencial— ya tenía tres días repitiéndolo.
Escatimó incluso los mensajes cifrados o apoyos a nadie. Aparte de los saludos protocolarios al principio sólo refirió al gobernador Andrés Granier, “por su testimonio y su trabajo ejemplar” ante las inundaciones en Tabasco de octubre pasado.
Los ausentes muy explicables eran; algunas decenas batallaban por acercarse a la conmemoración, pero se los impedían cuatro vallas o cinturones de seguridad de policías preventivos, granaderos, Policía Federal Preventiva y Estado Mayor Presidencial, que mantenían a raya a manifestantes más allá de la plancha del Zócalo.
Un año de gobierno, una celebración, recuentos, presencias y ausencias muy notorias para un Poder Ejecutivo con más retos que motivos de fiesta.
“Aún tenemos graves problemas y desafíos”, refirió varias veces Calderón, pero machacando también, “tenemos también un rumbo claro y definido”.
Día de ausencia notables ayer en el Palacio Nacional.
Rogelio Hérnandez López
O sea que fueron a medio-aplaudirle a fecal unos cuantos panistas, uno que otro lídercillo charro, el embajador gringo, lo peor de la iglesia católica, y ya.
Y eso que disque no hay encono--según el PELELE.
Lo más vaciado es que ante la cantidad de gente que dejó plantado al enano (¿tal vez por que la RCP bloqueó los accesos a Palacio Nacional?) de plano mandaron a achichincles menores a rellenar espacio:
Que nadie atinaba a explicarse los porqués del desaire a Felipe Calderón en el desayuno para conmemorar su primer año como Presidente de la República.
El Estado Mayor y el equipo de televisión de la Presidencia mandaban secretarias y asistentes de cuarto y quinto rango a ocupar los vacíos en las mesas. Y aun así, quedaban huecos.
Políticos, empresarios, periodistas e intelectuales prefirieron desayunar en sus casas, tal vez pensando que Calderón reeditaría otro festejo con aroma de vieja escuela, como el del pasado 2 de septiembre.
Lo que pasa es que todo el mundo sabe que al terminar Diciembre va a estallar la crisis. Y prefieren evitar la foto con el que será el responsable. Bueno, eso y el hecho de que la RCP mantuvo bloqueados los accesos a Palacio Nacional. ¡Vientos por la resistencia, chingao! ¡ES UN HONOR ESTAR CON OBRADOR!
QUE NO MAME EL SECRETARIO DE MARINA
El secretario de marina pretendió justificar la INEPTITUD del CEROTE CON PATAS en la disque guerra contra el narco alegando que los 2500 ejectutados por el narco en lo que va del año son en realidad por pleitos internos del narco y que el estado no ha sido rebasado por el narco.
¿Ah sí?
¿Y entonces por qué tuvieron que mandar a la gestapo de petatiux a Tamaulipas? ¿Por qué se escabecharon a un ex-alcalde a pesar de que tenía a 2 AFIs de escolta? ¿Cómo es que le disparan por la espalda a una cantante, la hospitalizan, y luego en el hospital otro sicario la remata de dos tiros en la cara?
Y ENCIMA de todo eso la venta y precios de drogas en el país siguen IGUAL que siempre. Nombre, y eso que el estado no fue rebasado por el narco. Pinches panistas MENTIROSOS.
Porque de pilón ahora ya van a inventar culpables. Los disque sicarios que tienen arraigados en Tamaulipas dieron negativo en las pruebas para ver si habían disparado armas de fuego, pero de todos modos los van a consignar:
Que a pesar de que las pruebas no parecían ser muy firmes y de que todos ellos dieron negativo en la prueba del radizonato de sodio, los siete presuntos operadores y gatilleros del narco detenidos el 5 de octubre en el decomiso de Altamira, Tamaulipas, que se encontraban bajo arraigo, fueron consignados finalmente y trasladados al penal de alta seguridad de Puente Grande, Jalisco.
ESO se llama INEPTITUD y se llama ESTAR REBASADO POR EL NARCO.
LO PEOR DEL PRI
Cerramos con este último párrafo de la columna de hoy de Federico Barrueto que resume sin rodeos en lo que se convirtió el espuriato: en el mandato de lo peor del PRI:
Calderón ha hecho lo que no pudo lograr Madrazo: que lo peor del PRI mande la política nacional. No es juicio que resulte de un evento, decisión o batalla. Es lo que ocurre día a día, incluso en las oficinas del gobierno federal. A Fox se le ha señalado como el gran traidor a la democracia. Su intervencionismo en la elección presidencial es la negación de la lucha histórica de su partido. Restan cinco años para dejar en claro el legado del periodo calderonista. No hay espacio para el optimismo.
Por lo cual reitero: fecal ya ni panista es, sino PRIISTA SALINISTA. De ahí que los que de verdad hacen la política en el congreso son los priistas; los que definen las agendas son los priistas; los que deciden que reformas se aprueban y cuales no son los priistas; y los grandes recompensados con IMPUNIDAD, pues son también los priistas, como Mario Marín y Ulises Ruiz.
Una razón más para apoyar al peje en el 2007.
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