CRÓNICA

Acá los dejo con una croniquita que me rifé, espero sea de su agrado:

¿MAGIA?

No se va a llenar!!!
Falta gente!!!
Ya llegó??!!
Está hasta la madre!!!
No estas solo, no estas solo!!!
Es un honooor estar con obrador!!!

Las calles volvieron a rugir; el Zócalo de nuevo se vistió de colores para recibir a los renegados tercos que apoyan la teoría de su líder. Esa teoría que dicta que el dos de julio de 2006 se fraguó un fraude electoral, la mafia se organizó para robarnos la Presidencia, a él, a mi, a ti y a todos los mexicanos que pensamos, que sentimos, que por fin toda esta historia iba a ser diferente; que nosotros ibamos a participar en la construcción de esa nueva etapa histórica. Que ibamos a estar ahí.

Desde temprano, tres de la mañana del domingo, el auto compacto negro que traslada a los Malacara a sus destinos desde hace cuatro años encendió sus motores, el conductor aún soñaba despierto (pese al regaderazo), la copilota (que no zopilota, no sean manchados) abría la reja del estacionamiento y posteriormente subía al asiento que la alberga en el 95% de las ocasiones que el auto transita.

Dos compañeros nos acompañaron, pasamos por ellos por el rumbo y nos dirigimos al Hemiciclo a Juárez; ahí nos esperaban ollas de café y cajas de pan dulce... Entregamos como 700 al mismo número de compañeros que llegaban de provincia. A las 7 de la mañana una señora, doña tere, se nos acercó a preguntar: "¿Por dónde me voy a la Villa?, voy a rezar por mi presidente antes de que comience la marcha"; le indicamos pero sugerimos que la Catedral estaba más cerca... Se alejó.

Los rezos de doña tere se escuchaban por todos lados, parece que las fuerzas del mas allá los escucharon porque comenzaron a movilizarse miles de personas. Sonrisas lejanas pero sinceras, ayuda, solidaridad de un pueblo golpeado pero no vencido, de nuevo gritos, pancartas, consignas, risas, banderas, trompetas... Y el aderezo de todas las movilizaciones: los turístas tratando de entender que pasa. "Oye guey, se venderán paquetes turísticos a la Ciudad de México con marchas o sin marchas?", bromeaban unos chavos; y las bromas se tornan en realidades. La gente se manifiesta por el mal gobierno, por los malos programas, por el exceso de pobreza, por la presencia de ratas y la ausencia de ideas.

Risas generalizadas cuando el líder menciona el refrán que relaciona al aparato televisor con el seudónimo del chaparro, pelón, de lentes... La venta de libros estaba al por mayor... El sol quemante, bronceante... el sudor, el sueño, el cansancio acumulado... esimulante, sin embargo, la voz y las palabras de nuestro líder... El que en su libro reconoce que sabe rectificar; el que relata los acontecimientos que muchos sufrimos. ¡LIBROS DE A 100, LIBROS DE A 100! no nos cansabamos de gritar. Terminó el himno, los malacara caminaron hacia el auto compacto de cuatro años, compartiendo anécdotas, risas y recuerdos. De salida un policía, con cara de malo no hacía ningún esfuerzo pa evitar que los coches atropellaran a los marchantes, de inmediato el reclamo y la frase por respuesta: "Yo no voté por ese loco, por mi que los maten", exacto, así piensan los panistas... No cabe duda, la baraja de electores es super amplia.

Tristeza, alegría, cansancio... tres estados de ánimo-físico que no sentía juntos desde julio-agosto de 2006. Tarde semi-redonda... no pudo ser del todo buena por el plantón a unos amigos que se organizaron para comer en un local en el barrio chino (sinceras disculpas).

Lo de menos es contar... finalmente aprendí que esto de ponerle número a las concentraciones es subjetivo... El chiste es que ni el patético de Fecal, ni todos sus patiño-ardillas juntas podrían convocar a la cuarta parte de lo que puede hacer mi presidente...

Ahí nomás...