Hace unos dias Fox anunció que haría proselitismo a favor del PAN para las elecciones del 2006. Inmediatamente los medios y los partidos políticos (menos el PAN) cuestionaron esta declaración. El PRI de plano amenazó con juicio político. Mientras tanto Fox simple y sencillamente dijo con toda tranquilidad que si alguien le demostraba que era ilegal hacerle proselitismo al PAN (siendo Fox el presidente de la república) que se lo hiciera y que se desistiría.
Hoy el IFE le calló el hocico a Fox según esta nota de La Jornada:
El Consejo General del Instituto Federal Electoral (IFE) hizo un llamado a la mesura a todos los servidores públicos, desde el Presidente de la República hasta los gobernadores, el jefe de Gobierno del Distrito Federal y los alcaldes, para que no hagan campaña desde sus cargos, porque ello podría poner en riesgo la elección presidencial de 2006, y definió que todos están legalmente imposibilitados para respaldar a sus partidos o candidatos.
En ese contexto los exhortó ''a que se abstengan de emitir opiniones o desplegar conductas que puedan afectar la equidad'' de las elecciones presidenciales del próximo año, o ''limitar la libertad del sufragio y, potencialmente, generar un clima de confrontación y desconfianza que poco abona a la celebración de una contienda electoral pacífica''.
Ahora bien: NO es nuevo esto de que algún funcionario público esté de alguna manera apoyando una campaña electoral. Vamos; el peje ha asistido a varios mítines de Yeidckol Polevnsky. Los funcionarios del gabinete, y el mismo Fox ni se diga; han asistido a todos los actos de campaña del PAN que se les ha pegado la gana. Pero aquí la diferencia está en el siguiente detalle: el asistir a algunos mítines o actos de campaña nomas a saludar a la concurrencia y a lo mejor echarse algun discurso dominguero DE VEZ EN CUANDO no es lo mismo que hacer toda una campaña política desde un cargo público. Fox tendrá todo el derecho a apoyar al candidato que quiera, pero una cosa es apoyo y otra hacerle campaña.
La principal bronca que hay en que el presidente de la republica sea el que le haga la campaña a su delfín (en este caso el hombrecito Santiago Creel) literalmente nos regresa a las épocas del PRI en la que el candidato a la presidencia era obra y gracia del presidente en turno--y por ende tenia de tras de si todo el aparato proselitista del estado.
Si Fox de verdad pretende que haya un cambio en México y que el sistema electoral priista no vuelva a resucitar, se tiene que remover completamente de la contienda electoral del 2006. Lo mismo va a para los gobernadores y demas funcionarios públicos de TODOS los partidos, no nomas del PAN.
Y desde luego seguimos pidiendo lo imposible: que alguien le cierre el hocico a Fox cuando se ponga a hablar de LO QUE SEA que tenga que ver con política. O bueno no; que siga diciendo burradas. Cada burrada que dice le consolida mas votos al peje.







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